U.S. Lawmakers Denounce Trump Administration’s ‘Complicity’ in Torture of 252 Venezuelans Sent to El Salvador’s Mega-Prison — Congresistas de EE. UU. denuncian en dura carta ‘complicidad’ del gobierno Trump en torturas a 252 venezolanos enviados a megacárcel de El Salvador

Nov 22, 2025

Letter sent to Secretary of State Marco Rubio follows Human Rights Watch report documenting human rights violations. — Fue enviada al secretario de Estado, Marco Rubio, tras una publicación de Human Rights Watch en la que se documentan violaciones a los DD. HH.

A group of 43 U.S. lawmakers—including 21 senators, all Democrats—sent a scathing letter to Secretary of State Marco Rubio and Homeland Security Secretary Kristi Noem, branding the transfer of 252 Venezuelans to El Salvador’s mega-prison and their treatment there as “a stain on the nation’s moral conscience.”

The lawmakers also demanded urgent steps to ensure the United States “never again becomes complicit in such abuses,” citing a report published last week by Human Rights Watch (HRW) and the Salvadoran organization Cristosal that documents systematic torture and human rights violations against the migrants, who were transferred to that country by the Trump administration between March and April 2025.

In the letter, the lawmakers voice “profound concern” over the findings of the report *Han llegado al infierno* (They Have Arrived in Hell), released on November 12.

They note that the document reveals a “systematic pattern of abuses and torture” against detainees at the Centro de Confinamiento del Terrorismo (Terrorism Confinement Center, CECOT), the maximum-security prison built by the Salvadoran government of Nayib Bukele.

According to the letter, the report not only confirms the assaults but concludes that the U.S. administration violated the principle of non-refoulement and disbursed public funds based solely on assurances from the Salvadoran government that it would honor the United Nations Convention Against Torture.

“We urge an investigation into these findings and an immediate explanation to Congress and the American people regarding the government’s complicity in subjecting these individuals to such cruel and horrific treatment,” the lawmakers wrote.

The 252 Venezuelans spent approximately four months in CECOT before being handed over to Venezuelan custody on July 18, 2025. After their release, HRW and Cristosal interviewed 40 of them, along with 150 others with direct knowledge of their ordeal, to corroborate the accounts.

The ex-detainees’ testimonies—as the letter states—fully meet the international definition of torture. All those interviewed reported near-daily physical and psychological abuse, along with inadequate food, lack of basic hygiene, and insufficient medical care. Some alleged sexual violence, including rape. Many, according to the lawmakers, still suffer physical aftereffects and psychological trauma.

The lawmakers also spotlighted accounts of the “grotesque” treatment inflicted during visits by U.S. officials, including Secretary Noem’s on March 26.

Detainees reported that guards distributed hygiene products, sheets, and mattresses before her arrival—but just 30 minutes after she departed, several men who had protested during her visit were brutally beaten and denied food and water for the rest of the day. Other beatings reportedly followed visits by the Comité Internacional de la Cruz Roja (International Committee of the Red Cross) or protests inside the prison.

Despite long-standing warnings from international organizations about torture in Salvadoran prisons, the Department of Homeland Security sent these individuals to CECOT, while the Department of State transferred 4.76 million dollars to the government of El Salvador to cover detention-related costs.

Facing what they describe as potential direct culpability by the U.S. government, the lawmakers demanded concrete answers by December 10. Among other questions, they ask for the full terms of the agreement with El Salvador, which official authorized the multimillion-dollar transfer, what restrictions—if any—accompanied those funds, what due diligence assessed the torture risk, and whether the findings will feature in the 2026 Human Rights Report.

Among the signatories are some of the Democratic Party’s most influential senators on foreign policy and human rights. Leading the list are Tim Kaine, Chris Van Hollen, Jeanne Shaheen, Richard J. Durbin, Jeff Merkley, Ron Wyden, Cory Booker, Edward Markey, Richard Blumenthal, Alex Padilla, Mazie Hirono, Bernie Sanders, and Adam Schiff.

They are joined by House representatives Gregory Meeks, Joaquin Castro, Adriano Espaillat, Nydia Velázquez, Debbie Wasserman Schultz, and James McGovern, among others.

El Tiempo: https://www.eltiempo.com/mundo/eeuu-y-canada/congresistas-de-ee-uu-denuncian-en-dura-carta-complicidad-del-gobierno-trump-en-torturas-a-252-venezolanos-enviados-a-megacarcel-de-el-salvador-3510416

Congresistas de EE. UU. denuncian en dura carta ‘complicidad’ del gobierno Trump en torturas a 252 venezolanos enviados a megacárcel de El Salvador

Un grupo de 43 congresistas estadounidenses, entre ellos 21 senadores, todos del Partido Demócrata, envió una dura carta al secretario de Estado, Marco Rubio, y a la secretaria de Seguridad Interna, Kristi Noem, en la que califican como “una mancha en la conciencia moral del país” el envío de 252 venezolanos a la megacárcel de El Salvador y el trato que recibieron allí.

Los legisladores solicitaron, además, que se adopten medidas urgentes para que EE. UU. “no vuelva a ser cómplice de estos abusos”, luego de que un reporte de Human Rights Watch (HRW) y la organización salvadoreña Cristosal, publicado la semana pasada, documentara torturas y violaciones sistemáticas a los derechos humanos contra los migrantes, quienes fueron trasladados a ese país por la administración Trump entre marzo y abril de 2025.

En la misiva, los congresistas expresan su “profunda preocupación” por los hallazgos del informe titulado “Han llegado al infierno” y publicado el pasado 12 de noviembre.

Señalan que el documento evidencia un “patrón sistemático de abusos y torturas” contra los detenidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), la prisión de máxima seguridad creada por el gobierno salvadoreño de Nayib Bukele.

Según la carta, el informe no solo confirma las agresiones, sino que concluye que la administración estadounidense violó el principio de “no devolución” (non-refoulement) y giró recursos públicos pese a depender únicamente de las garantías del gobierno salvadoreño de que respetaría la Convención de la ONU contra la Tortura.

“Instamos a que se investiguen estos hallazgos y se brinde una explicación inmediata al Congreso y al pueblo estadounidense sobre la complicidad del Gobierno en someter a estas personas a un trato tan cruel y horrendo”, escribieron.

Los 252 venezolanos estuvieron aproximadamente cuatro meses en el Cecot y fueron entregados a custodia de Venezuela el 18 de julio de 2025. Tras su liberación, HRW y Cristosal lograron entrevistar a 40 de ellos, además de 150 personas con conocimiento directo de sus experiencias, para corroborar los testimonios.

Lo que relataron los exdetenidos –dice la carta– coincide plenamente con la definición internacional de tortura. Todos los entrevistados afirmaron haber sufrido abuso físico y psicológico casi a diario, además de recibir comida insuficiente, no tener acceso a higiene básica ni atención médica adecuada. Algunos denunciaron violencia sexual, incluida violación. Muchos, según los congresistas, aún padecen secuelas físicas y traumas psicológicos.

Los legisladores también destacaron los testimonios sobre el trato “grotesco” que recibieron en el marco de visitas de funcionarios estadounidenses, como la de la secretaria Noem el 26 de marzo.

De acuerdo con los detenidos, los guardias entregaron productos de higiene, sábanas y colchones antes de su arribo, pero 30 minutos después de que la funcionaria se marchó, varios hombres que protestaron durante su llegada fueron golpeados severamente y se les negó acceso a comida y agua el resto del día. Otros episodios de golpizas se habrían dado tras visitas del Comité Internacional de la Cruz Roja o luego de protestas dentro de la prisión.

Pese a las advertencias históricas de organizaciones internacionales sobre torturas en cárceles salvadoreñas, el Departamento de Seguridad Interna envió a estas personas al Cecot, mientras que el Departamento de Estado transfirió 4,76 millones de dólares al gobierno de El Salvador para cubrir gastos asociados a su detención.

Ante lo que describen como una posible responsabilidad directa del Gobierno estadounidense, los legisladores exigieron respuestas concretas antes del 10 de diciembre. Preguntan, entre otras cosas, cuáles fueron los términos completos del acuerdo con El Salvador, qué funcionario autorizó la transferencia millonaria, qué restricciones –si las hubo– acompañaban esos fondos, qué diligencias se hicieron para evaluar el riesgo de tortura y si los hallazgos se incluirán en el Informe de Derechos Humanos 2026.

Entre los firmantes figuran algunos de los senadores demócratas más influyentes en política exterior y derechos humanos. Encabezan la lista Tim Kaine, Chris Van Hollen, Jeanne Shaheen, Richard J. Durbin, Jeff Merkley, Ron Wyden, Cory Booker, Edward Markey, Richard Blumenthal, Alex Padilla, Mazie Hirono, Bernie Sanders y Adam Schiff.

A ellos se suman los representantes a la Cámara Gregory Meeks, Joaquin Castro, Adriano Espaillat, Nydia Velázquez, Debbie Wasserman Schultz y James McGovern, entre otros.

El Tiempo: https://www.eltiempo.com/mundo/eeuu-y-canada/congresistas-de-ee-uu-denuncian-en-dura-carta-complicidad-del-gobierno-trump-en-torturas-a-252-venezolanos-enviados-a-megacarcel-de-el-salvador-3510416