The state’s debt to private pension funds, funded by worker payroll deductions, surpassed $11 billion last September, according to statistics from the Central Reserve Bank (BCR) released this Friday.
Official figures, which the BCR sources from the Salvadoran Pension Institute (ISP), indicate that the total debt grew from $10,525.96 million in December 2023 to $11,070.62 million last September, representing an increase of $544.66 million.
The debt rose by $46.44 million in January, $47.34 million in February, and $77.37 million in March. This was followed by increases of $44.72 million in April and $47.36 million in May.
The largest monthly increase was in June, at $87.63 million, while July added $45.75 million, August $47.44 million, and September $100.61 million, for a total of $544.66 million.
These funds, which the government is reportedly using to pay pensions for retirees from the public system—abandoned in the late 1990s—are drawn through securities issued by the ISP, which private Pension Fund Administrators (AFP) are obligated to purchase.
This instrument, known as Pension Obligation Certificates (COP), currently totals $2,675.85 million.
To this is added $8,394.77 million in Transition Financing Certificates (CFT), securities that have not paid principal or interest since a reform approved by the Legislative Assembly—dominated by the ruling Nuevas Ideas (NI) party—in late 2022.
This reform, according to the International Monetary Fund (IMF), has led to 89% of assets under the management of the AFPs—which reached $14.9 billion by 2023—being held “in public debt securities, either directly or indirectly through banks and financial institutions.”
The IMF has warned that pensions from the private system have begun to be paid using resources from the Solidarity Guarantee Account (CGS), which serves as “a common fund for AFP affiliates” and is tapped when pensioners exhaust the funds in their individual accounts.
These resources, the IMF has indicated, “would be depleted around 2027,” underscoring that “a comprehensive reform of the pension system is essential.”
Deuda con fondos privados de pensiones supera los 11.000 millones en El Salvador
La deuda estatal con los fondos privados de pensiones, alimentados con descuentos a los salarios de los trabajadores, superó en septiembre pasado los 11.000 millones de dólares acumulados, según las estadísticas del Banco Central de Reserva (BCR) divulgadas este viernes.
Las cifras oficiales, que el BCR retoma del Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP), indican que la deuda total pasó de 10.525,96 en diciembre de 2024 a 11.070,62 en septiembre pasado, lo que representa un incremento de 544,66 millones.
Es decir, que la deuda subió 46,44 millones de dólares en enero, 47,34 millones en febrero y 77,37 millones en marzo. A esto se suma que en abril sumaron 44,72 millones y 47,36 millones de dólares en mayo.
El mes que más incrementó la deuda fue junio, con 87,63 millones de dólares, mientras julio sumó 45,75 millones, agosto 47,44 y 100,61 en septiembre, para un total de 544,66 millones de dólares.
Estos recursos, que el Gobierno estaría usando para el pago de pensiones de los jubilados del sistema público, abandonado a finales de la década de los años noventa del siglo XX, los toma mediante unos títulos valores que emite el ISP y que las administradoras de fondos de pensiones (AFP, privadas) están obligadas a comprar.
Este instrumento, llamado Certificados de Obligaciones Previsionales (COP), suma actualmente 2.675,85 millones de dólares.
A esto se añaden 8.394,77 millones de dólares en Certificados de Financiamiento de Transición (CFT), títulos que no pagan capital ni intereses desde una reforma aprobada por la Asamblea Legislativa, dominada por el oficialista Nuevas Ideas (NI), a finales de 2022.
Esta reforma, según ha dicho el Fondo Monetario Internacional (FMI), llevó a que el 89 % de los activos bajo la administración de las AFP, que para 2024 llegaron a 14.900 millones, se mantengan “en títulos de deuda pública, ya sea directa o indirectamente a través de bancos e instituciones financieras”.
El FMI ha advertido que las pensiones del sistema privado han comenzado a pagarse con los recursos de la Cuenta de Garantía Solidaría (CGS), que es “un fondo común para los afiliados de las AFP”, que se utiliza cuando los pensionados agotan los recursos de su cuenta individual.
Los recursos en mención, ha dicho el FMI, se “agotarían alrededor de 2027”, por lo que advierte “es necesaria una reforma integral del sistema de pensiones”.

