Amnesty International calls on the Salvadoran authorities to immediately and unconditionally guarantee the release of community defenders José Ángel Pérez and Alejandro Henríquez, who have been unjustly imprisoned since May 2025 after participating in a peaceful protest in defense of the rights of the El Bosque community. This comes ahead of a hearing scheduled for Wednesday, October 29, at which the provisional detention order against them will be reviewed.
“José Ángel and Alejandro should never have spent a single day in prison for peacefully exercising their right to defend the rights of their community. Their detention is arbitrary and deeply unjust. October 29 represents an opportunity for the authorities to rectify this injustice, guarantee full respect for due process, and ensure their immediate and unconditional release,” said Ana Piquer, Americas Director at Amnesty International.
The organization has expressed its deep concern about the violations of their human rights and the inhumane conditions of detention to which they have been subjected. The criminal proceedings against them have been marked by unfounded accusations of “resistance” and “public disorder,” without evidence to justify their deprivation of liberty. These irregularities have seriously violated their right to the presumption of innocence, to an adequate defense, and to a fair trial.
Since their arrest, both defenders have been held incommunicado without access to the outside world, increasing the risk of torture and other cruel, inhuman, and degrading treatment. In addition, they have been exposed to a prison system characterized by extreme overcrowding. These types of arbitrary detentions are part of a systematic pattern of criminalization that seeks to silence those who denounce abuses, defend the rights of their communities, and demand justice.
“The criminalization of community human rights defenders not only violates the rights of those detained, but also seeks to send a message of fear and intimidation to all those who demand justice and defend the territory in El Salvador. This must end now,” concluded Ana Piquer.
The human rights defenders were recognized by Amnesty International as Prisoners of Conscience in July 2025, concluding that they are deprived of their liberty solely for the peaceful exercise of their human rights. The October 29 hearing is decisive in determining whether they will remain in detention.
El Salvador: Prisioneros de conciencia deben ser liberados de forma inmediata
Amnistía Internacional exige a las autoridades salvadoreñas garantizar de forma inmediata e incondicional la libertad de los defensores comunitarios José Ángel Pérez y Alejandro Henríquez, encarcelados injustamente desde mayo de 2025 tras participar en una protesta pacífica en defensa de los derechos de la comunidad de El Bosque. De cara a la audiencia prevista para el miércoles 29 de octubre, en la que se revisará la medida de detención provisional en su contra.
“José Ángel y Alejandro nunca debieron pasar un solo día en prisión por ejercer pacíficamente su derecho a defender los derechos de su comunidad. Su detención es arbitraria y profundamente injusta. El 29 de octubre representa una oportunidad para que las autoridades rectifiquen esta injusticia, garanticen el respeto pleno al debido proceso, y aseguren su libertad inmediata e incondicional”, afirmó Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
La organización ha manifestado su profunda preocupación por las violaciones a sus derechos humanos y las condiciones inhumanas de detención a las que han sido sometidos. Los procesos penales en su contra han estado marcados por acusaciones infundadas de “resistencia” y “desórdenes públicos”, sin pruebas que justifiquen la privación de su libertad. Estas irregularidades han vulnerado gravemente su derecho a la presunción de inocencia, a la defensa adecuada y a un juicio justo.
Desde su arresto, ambos defensores han permanecido incomunicados sin acceso al mundo exterior, incrementando el riesgo de tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes. Además, han sido expuestos a un sistema penitenciario caracterizado por el hacinamiento extremo. Este tipo de detenciones arbitrarias se inscriben en un patrón sistemático de criminalización que busca silenciar a quienes denuncian abusos, defienden los derechos de sus comunidades y reclaman justicia.
“La criminalización de defensores de derechos humanos comunitarios no solo vulnera los derechos de las personas detenidas, sino que pretende enviar un mensaje de miedo e intimidación a todas las personas que exigen justicia y defienden el territorio en El Salvador. Esto debe terminar ya”, concluyó Ana Piquer.
Los defensores de derechos humanos fueron reconocidos por Amnistía Internacional como Prisioneros de Conciencia en julio de 2025, al concluir que se encuentran privados de libertad únicamente por el ejercicio pacífico de sus derechos humanos. La audiencia del 29 de octubre es decisiva para determinar si continuarán privados de libertad.
