Catholic faithful and members of religious orders launched a campaign against the General Metallic Mining Law during the eighth pilgrimage to Ciudad Barrios, an event commemorating the legacy of Saint Óscar Arnulfo Romero.
Along the route, participants raised yellow lanterns as a symbol of resistance and pledged to light them on the 24th of each month until the Legislative Assembly repeals the current law.
“Unfortunately, these voices have not yet been heard as the cry of the people. We are not opposed to any particular ideology; we stand for life. Let this be our emblem of resistance. We will offend no one; we just want to say yes to life and no to metallic mining,” declared Father Santos Belisario.
“That is why today we are making this gesture with the yellow lanterns: to say yes to life and no to the projects of death that metallic mining brings to our country,” he emphasized.
The priest explained that the yellow lanterns will be placed in parks, churches, and courtyards as a monthly reminder of their opposition to mining. The chosen date, the 24th of each month, coincides with the anniversary of Monsignor Romero’s assassination on March 24.
Belisario also recalled that the Catholic Church, supported by other religious congregations, collected more than 150,000 signatures from Salvadorans demanding the law’s repeal, while civil society groups gathered over 60,000 to request that the law be declared unconstitutional.
Among the clergy who raised their lanterns was Cardinal Gregorio Rosa Chávez, who on March 18 went before the Legislative Assembly to request the law’s repeal.
At that time, Rosa Chávez remarked that the saint’s message today would likewise be a defense of life.
“This is exactly what we are doing: defending life against the grave menace posed by mining. That is how he taught us to think and to stand with the people. Life is more important than gold,” he stated.
The Legislative Assembly has ignored the petition, as the correspondence has not been sent to any study committee, according to the lists announced at each plenary session.
Con faroles, católicos piden la derogación de la ley de minería
Fieles católicos y consagrados iniciaron una campaña en rechazo a la Ley General de Minería Metálica durante la octava peregrinación a Ciudad Barrios, en la que se recuerda el legado del santo Monseñor Óscar Arnulfo Romero.
Durante el recorrido, los participantes levantaron faroles amarillos como símbolo de resistencia y se comprometieron a encenderlos cada 24 de mes, hasta que la Asamblea Legislativa derogue la normativa vigente.
“Lamentablemente estas voces todavía no han sido escuchadas como el clamor del pueblo, sabemos que no estamos en contra de ningún pensamiento, sino a favor de la vida. Este signo, sea nuestro signo de resistencia. No vamos a ofender a nadie, solo queremos decir sí a la vida y no a la minería metálica”, pronunció el sacerdote Santos Belisario.
“Por eso hoy queremos hacer este signo de los farolitos amarillos para decir sí a la vida y no a los proyectos de muerte que trae muerte para nuestro país, en este caso, la minería metálica”, enfatizó.
El párroco explicó que los faroles amarillos serán colocados en parques, templos y patios, como recordatorio mensual de su oposición a la minería. La fecha elegida, el 24 de cada mes, coincide con el natalicio de Monseñor Romero, el 24 de agosto.
“Queremos hacer este signo de los farolitos amarillos para decir sí a la vida y no a los proyectos de muerte que trae la minería metálica a nuestro país”, añadió Belisario.
Belisario también recordó que la Iglesia católica, apoyada de otras congregaciones religiosas, recolectó más de 150,000 firmas de salvadoreños que pedían la derogación de la ley y que de parte de la sociedad civil se recogieron más de 60,000 para pedir la inconstitucionalidad de la ley.
Entre los consagrados que alzaron su farol estaba el cardenal Gregorio Rosa Chávez, quien fue uno de los asistió el pasado 18 de marzo a la Asamblea Legislativa a solicitar la derogación de la ley.
Para entonces, Rosa Chávez dijo que el llamado del santo en estos días también sería de defensa de la vida.
“Sería lo que estamos haciendo nosotros, en defender la vida ante esta amenaza gravísima de la minería, él así nos enseñó a pensar y a estar con la gente. La vida es lo más importante, más que el oro”, expresó.
La Asamblea Legislativa ha ignorado la petición, ya que la correspondencia no ha sido enviada a ninguna comisión de estudio, según los listados que se dan a conocer cada plenaria.