Seven months had to pass before Judge Three of San Salvador’s First Organized Crime Tribunal convened a special hearing and replaced pre-trial detention with alternative measures in favor of economist and former FMLN leader Atilio Montalvo, arrested in May 2024.
After examining the hospital records, the judge allowed Montalvo—still in critical condition—to face proceedings at liberty. Instead of requiring his presence, the court ordered his wife to sign in at the tribunal every fifteen days, with or without him.
Montalvo was arrested on 30 May 2024. That same day several veterans of the Armed Forces and guerrilla veterans were detained, accused of planning bomb attacks on gas stations, supermarkets, and government buildings to be carried out on 1 June, the date of President Nayib Bukele’s second inauguration. In November, his family and attorneys requested a special hearing to review his detention, citing his deteriorating health.
On Monday, seven months after that petition, the judge declined to impose a monetary bond—common in other cases—and directed that any funds that might have been spent on bail be used instead for private medical care.
“The ruling points in the right direction; the judge said that whatever he would have spent on a financial guarantee he should invest in private treatment so that he might recover,” noted Montalvo’s attorney, Óscar Canjura.
Canjura left the courtroom satisfied, remarking that “justice often takes its time, but it arrives.” For now, he explained, Montalvo will remain in the Regional Hospital of the Salvadoran Social Security Institute (Hospital Regional del Instituto Salvadoreño del Seguro Social, ISSS) before being transferred home.
The lawyer described the medical outlook for the Peace Accords signatory as “grave,” adding that doctors hold out little hope. “No one doubts his resolve or fighting spirit,” he said. “The judge herself recounted that when asked what he wanted, he replied that he wished to see his family. He did not ask for freedom; he asked to be allowed to see them. Today we secured a favorable substitute measure, one that sets an important precedent.”
Health crisis
Silvia Montalvo, Atilio’s daughter, expanded on her father’s condition, recalling that he suffered two syncopal episodes and a gastric hemorrhage while in prison.
“My father died twice inside the facility because of a gastric hemorrhage that brought him to the verge of death,” she said. “From the day they took him we issued public warnings. We knew the state he was in: ill, freshly operated on, one month after a heart attack, with a prior stroke. His condition only worsened.”
“The case has dragged on and will continue until December, and we should never have reached the point where he was on the brink of death. Even so, we are grateful to have our father back home, to spend the last days of his life caring for him,” she added.
After the decision became public, the Committee of Relatives of Political Prisoners and Persecuted Persons of El Salvador (Comité de Familiares de Personas Presas y Perseguidas Políticas de El Salvador, COFAPPES) reported that Montalvo had been taken to a hospital the previous Wednesday “already in agony.” The family, they said, did not learn of the transfer until two days later. In light of the emergency, the group used social media to request blood donors.
“No tendríamos que haber llegado al punto que él estuviera al borde de la muerte”: hija de Atilio Montalvo
Siete meses transcurrieron para que la jueza tres del Tribunal Primero Contra Crimen Organizado de San Salvador convocara a una audiencia especial y decidiera decretar medidas alternas a la detención a favor del economista y exdirigente del FMLN, Atilio Montalvo, capturado en mayo de 2024.
Ayer, luego de observar los informes médicos, la jueza autorizó que Montalvo, quien se encuentra hospitalizado y en estado crítico, sea procesado en libertad, con la medida que su esposa deberá presentarse a firmar, ya sea con o sin él, cada 15 días al tribunal.
Montalvo fue capturado el 30 de mayo de 2024. Ese mismo día fueron arrestados varios veteranos de la Fuerza Armada y excombatientes de la guerrilla, acusados de planificar atentados con explosivos contra gasolineras, supermercados y edificios de gobierno, que serían ejecutados el 1 de junio, fecha en la que tomó posesión por segunda vez el presidente Nayib Bukele. En noviembre de ese mismo año, su familia y abogados pidieron una audiencia especial de revisión de medidas por su complicado estado de salud.
Este lunes, tras siete meses de la petición, la juzgadora no estableció ninguna fianza económica como medida sustitutiva a la detención, como lo hacen en otros procesos, y dijo que el dinero que podrían gastar para esto, sea usado para un tratamiento médico.
“La resolución va en un buen sentido, dijo que lo que él (Montalvo) vaya a gastar en una caución económica mejor que lo gaste en un tratamiento en lo privado para ver si así se recupera”, mencionó Óscar Canjura, defensor de Montalvo.
El abogado afirmó salir satisfecho de la audiencia y que “la justicia muchas veces tarda, pero llega”. Agregó que por el momento Montalvo permanecerá ingresado en el Hospital Regional del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y luego será trasladado hacia su vivienda.
Canjura aseguró que el cuadro médico del firmante de los Acuerdos de Paz es “delicado” y que los médicos no auguran un futuro favorable: “Creo que lo que menos podemos dudar es de su capacidad y convicción de lucha, porque incluso la jueza mencionó que cuando le preguntaron qué era lo que quería, dijo ver a su familia, estar con ellos, no pidió su libertad, sino que le permitiera ver a su familia. Pero este día se ha logrado una medida sustitutiva favorable y digamos que se establece un precedente importante”, indicó.
Crisis de salud
Silvia Montalvo, hija de Atilio, amplió sobre la situación de su padre y lamentó que en el interior del penal sufrió dos síncopes (pérdida de conciencia total) y una hemorragia gástrica.
“Mi papá se murió dos veces dentro del centro penal con una hemorragia gástrica que lo llevó al borde de la muerte, a pesar que estuvimos siempre haciendo denuncias públicas desde el día en que se lo llevaron porque sabíamos en qué condiciones iba, enfermo, recién operado, a un mes de un infarto, con un derrame cerebral previo y su situación se fue complicando”, dijo la hija del detenido.
“El proceso se dilató mucho, el proceso sigue, hasta el mes de diciembre y no tendríamos que haber llegado hasta este punto que estuviera al borde de la muerte, aún así agradecemos que nuestro padre esté de regreso en casa, que esté con nosotros los últimos días de su vida para que podamos cuidarlo”, añadió.
El Comité de Familiares de Personas Presas y Perseguidas Políticas de El Salvador (COFAPPES) denunció, luego de conocer la resolución de la jueza, que Atilio fue trasladado hacia un hospital el pasado miércoles y que lo llevaron “agonizando”, pero que la familia se enteró hasta dos días después. Ante el deterioro de su salud solicitaron a través de redes sociales donantes de sangre para cubrir la emergencia.