ARENA lawmaker Marcela Villatoro accused the Salvadoran government of misleading the public by announcing that this year’s budget was fully funded and that no additional debt would be required, even as the most recent loans approved by the Legislative Assembly allow the funds to shore up the government’s cash flow.
During the June 19 plenary session, the Asamblea Legislativa (Legislative Assembly) authorized the executive branch to sign a $75 million loan agreement with the Corporación Andina de Fomento (Development Bank of Latin America, CAF) for the “Sector-Wide Support Program for Comprehensive Management Toward Quality Health Care in El Salvador.”
That same day, under a fast-track procedure, lawmakers also ratified another $75 million loan—again with the CAF—for the “Sector-Wide Support Program to Strengthen Comprehensive Education in El Salvador.”
Both credits are classified as “freely disposable, rapid-disbursement financing” under the Sector-Wide Approach (SWAp) modality. In each case, the money “may be allocated to address the government’s strategic priorities, the State’s general obligations, assorted transfers, and, if necessary, direct support for the fiscal coffers.”
“That is where the trap lies,” Villatoro said Wednesday on the program Encuentro Tv. “Once you start reading the loan document, it states that these funds can be used for current expenditure—practically for whatever the government decides.”
She recalled earlier plenary debates over similar loans, in which opposition legislators argued that such provisions contradict the administration’s claim that the budget is fully financed and that the country will not take on additional debt. Lawmakers from Nuevas Ideas countered that the loans are earmarked for investment projects, not for operating costs.
“In the end it makes no difference what the stated purpose is: the government keeps plunging Salvadorans deeper into debt,” Villatoro remarked.
She cited the CAF loans as a case in point. Although they are marketed as supporting education and health programs, the fine print leaves their use entirely at the administration’s discretion.
“It is a way of deceiving Salvadorans,” she said. “They lie by insisting they will not keep borrowing; they keep borrowing anyway, and they lie again when they claim the loans are for investment rather than current expenditure. Read the small print, and you will see it is meant for everyday spending.”
On April 1, 2025, the Assembly also approved a $500 million loan agreement between the government and the Inter-American Development Bank (IDB) for the “Program to Support Macroeconomic and Fiscal Sustainability in El Salvador.” Billed as “special development financing,” the loan’s stated objective is to “strengthen the country’s macroeconomic stability.”
Marcela Villatoro sobre últimos préstamos: “Es una forma de engañar a la población”
Marcela Villatoro, diputada de ARENA, señaló al gobierno de engañar a la población salvadoreña al decir que el presupuesto de este año estaría totalmente financiado y no se necesitaría de más endeudamiento, cuando los últimos préstamos aprobados permiten usar los recursos para las necesidades de la caja fiscal.
En la sesión plenaria del 19 de junio, la Asamblea autorizó al gobierno para que suscriba un contrato de préstamo por $75 millones con la Corporación Andina de Fomento (CAF), para el “Programa Sectorial de Apoyo a la Gestión Integral para una Salud de Calidad en El Salvador”.
En esa misma sesión, por dispensa de trámites, se ratificó el préstamo de $75 millones, también con la CAF, para el “Programa Sectorial de Apoyo al Fortalecimiento Integral de la Educación en El Salvador”.
Ambos créditos son financiamientos “de libre disponibilidad y rápido desembolso”, bajo la modalidad de Crédito de Enfoque Sectorial Amplio (SWAp), y en los dos casos los recursos “pueden destinarse para atender prioridades estratégicas del gobierno, obligaciones generales del Estado, transferencias varias y eventuales apoyos a la caja fiscal”.
“Ahí venía la trampa, cuando usted comenzaba a leer el préstamo, le decía en una parte de la misma (pieza) que estos fondos se podían ocupar para gasto corriente prácticamente, para cualquier decisión que el gobierno necesitara ocuparlo se podía ocupar”, dijo Villatoro en la entrevista Encuentro Tv este miércoles.
Señaló que en plenarias anteriores en las que se aprobaron préstamos denunciaron que esto contradice el argumento del gobierno de que el presupuesto está completamente financiado y no se seguiría endeudando al país, a lo que diputados de Nuevas Ideas respondieron que los créditos son para proyectos de inversión y no para gasto corriente.
“Entonces, al final de cuentas, no importa para lo que sea, sigue endeudándose a la población salvadoreña”, dijo Villatoro.
Tomó como ejemplo los préstamos con el CAF que, aunque dicen que serán para programas de educación y de salud, dejan abierto el uso del dinero a lo que el gobierno estime necesario.
“Entonces, es una forma de engañar a la población salvadoreña, porque le mienten diciéndole que no van a seguir endeudándose; se siguen endeudando y le mienten más cuando les dicen que los préstamos que se están haciendo son para otras cosas que no sean gasto corriente, como es inversión; pero, al final, cuando usted lee la letra chiquita del préstamo le dice que es para gasto corriente”, reprochó.
El 1 de abril de 2025, la Asamblea también aprobó el contrato de préstamo por $500 millones suscrito entre el gobierno con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para el “Programa de apoyo a la sostenibilidad macroeconómica y fiscal de El Salvador”. El objeto del préstamo, “estructurado bajo la categoría de financiamiento especial para el desarrollo”, es para “fortalecer la estabilidad macroeconómica” del país.