A Letter to Polling Firms: In El Salvador, Polls No Longer Reflect Reality — Carta a las casas encuestadoras: En El Salvador las encuestas ya no reflejan la realidad

Jun 22, 2025

It is hard to accept, but at this point, El Salvador is just another dictatorship, with a government that controls and punishes everything and with a population that is afraid to speak. — Cuesta aceptarlo, pero El Salvador, a esta altura, ya es una dictadura más, con un gobierno que controla y sanciona todo – y con una población con miedo de hablar.

Dear Public Opinion Polling Professionals:

You are all already familiar with and have likely discussed this slide from the recent UCA poll:

48.3% say that “anyone who expresses a critical opinion about the government and the president would be detained or imprisoned.” An additional 30% say that those who criticize may receive other types of repercussions. That is a total of 78.3% who say that free expression comes at a very high cost in the Bukele era.

All serious polls have yielded similar results. They demonstrate what is obvious and what we are all feeling every day anyway: The majority of Salvadorans are afraid to express their political opinions, let alone when they are critical of the government—and God forbid they should be critical of the all-powerful president. Therefore, they prefer to remain silent—or even lie about their political views.

This single slide, which is the only one that matters, invalidates the entire UCA poll. I no longer trust any of its figures. In fact, it invalidates polling in general. In this climate of threats and fear, it is no longer possible to conduct serious polls. The answers are no longer reliable, and there is no way to filter them to find people’s true opinions.

This is not a problem for the shoddy polls that sell themselves to the highest bidder. But for universities like UCA and Gavidia, as well as for La Prensa Gráfica, which have a long track record of measuring public opinion as professionally and responsibly as possible, this presents a dilemma that no longer has a solution. It is better for them to refrain from conducting and publishing polls, so as not to lend their seal of approval to the manipulated results published by for-hire polling firms.

No one would think of conducting serious polls in Nicaragua, Iran, Russia, or North Korea, either. It is understood that there is no way a population trying to survive under a dictatorship will reveal its political opinions. It is hard to accept, but at this point, El Salvador is just another dictatorship, with a government that controls and punishes everything—and with a population that is afraid to speak.

With all due respect for your work and intentions, I recommend that serious public opinion institutes, instead of conducting impossible polls, explore other measurement methods that do not require interviews—methodologies like social listening, developing digital applications to track interactions on the internet and social media with positions published by the government and its agents, by opponents, by journalists, researchers, and by professional or human rights organizations. For universities, there is much to do in this field, much to experiment with—to arrive at more authentic results that are less affected by the climate of repression and fear.

Forgive my bold advice. You will make the decision; I am just offering my opinion.

Regards, Paolo Luers

EDH: https://www.elsalvador.com/opinion/cartas-de-paolo/las-cartas-de-paolo-luers-encuestas-nayib-bukele-6-anos-gobierno/1226242/2025/

Carta a las casas encuestadoras: En El Salvador las encuestas ya no reflejan la realidad

Estimados profesionales de los sondeos de opinión pública:

Todos ustedes ya conocen y habrán discutido esta lámina de la reciente encuesta de la UCA.

El 48.3% dice que “sería detenido o encarcelado quien exprese una opinión crítica sobre el gobierno y el presidente”. Un 30% adicional dice que quien critica puede recibir otro tipo de sanciones. Es un 78.3% que dice que expresarse libremente tiene un costo muy alto en tiempos de Bukele. 

Todas las encuestas serias han arrojado resultados similares. Demuestran lo obvio que de todos modos todos estamos sintiendo todos los días: La mayoría de los salvadoreños tiene miedo de expresar opiniones políticas, ni hablar cuando sean críticas al gobierno – y Dios guarde cuando sean críticas al todopoderoso presidente. Por tanto prefiere callarse – o incluso mentir sobre sus opiniones políticas.

Con esto, con una sólo lámina, que es la única relevante, se cae toda la encuesta de la UCA. Ya no confío en ninguna de sus cifras. Es más, se caen las encuestas en general. Porque en este clima de amenaza y miedo ya no se puede hacer encuestas serias. Las respuestas ya no son confiables y no hay manera de filtrarlas para encontrar la verdadera opinión de la gente. 

A las encuestas chafas, que se venden al mayor postor, no les causa problemas que sea así. Pero a las universidades, como la UCA y la Gavidia, así como a La Prensa Gráfica, que tienen larga trayectoria de medir la opinión pública de la manera más profesional y responsable posible, se presenta un dilema que ya no tiene solución. Es mejor que se abstengan de hacer y publicar encuestas, para no dar su sellos de aprobación a los resultados manipulados que las casas encuestadoras prepago publican. 

Tampoco a nadie se ocurre hacer encuestas serias en Nicaragua, en Irán, en Rusia o en Corea del Norte. Se sabe que no hay manera que una población, que trata de sobrevivir bajo una dictadura, va a revelar sus opiniones políticas. Cuesta aceptarlo, pero El Salvador, a esta altura, ya es una dictadura más, con un gobierno que controla y sanciona todo – y con una población con miedo de hablar.

Con todo respeto por su trabajo y sus intenciones, recomiendo a los institutos serios de opinión pública que en vez de hacer encuestas imposibles exploren otros métodos de medición que no requieren de entrevistas – metodologías del tipo social listening, desarrollando aplicaciones digitales para rastrear en el Internet y en las redes sociales las interacciones con posiciones publicadas por el gobierno y sus agentes, por opositores, por periodistas, investigadores y por organizaciones gremiales o de derechos humanos. Para las universidades hay mucho por hacer en este campo, mucho que experimentar – para llegar a resultados más auténticos y menos afectados por el clima de represión y miedo.

Disculpen mis consejos atrevidos. Ustedes van a decidir, yo sólo opino.

Saludos, Paolo Luers

EDH: https://www.elsalvador.com/opinion/cartas-de-paolo/las-cartas-de-paolo-luers-encuestas-nayib-bukele-6-anos-gobierno/1226242/2025/