After six years in government, President Nayib Bukele had few major economic results to offer in his June 1st address to the Nation, according to economists consulted.
Reiterating that the 2025 budget is “fully funded” and the creation of agromarkets – two economic points Bukele mentioned – are neither new announcements nor significant achievements given the economic hardship squeezing Salvadorans, experts summarized.
For economist Rommel Rodríguez, the presidential speech was “incomplete” on the economic front.
“The president’s speech was a very superficial and very light overview, so to speak, on the economic front,” Rodríguez says.
The expert explains that when Bukele speaks of a “funded” budget, it’s because “perhaps the president is confused or isn’t well-advised. What he should say is that they’ve tried to cover as much as possible, and that current spending is funded—that is, they’ve tried to cover the budget’s current expenses as much as possible. We’ll see at the end of the fiscal year if that really holds true.”
And regarding the agromarkets, he believes that “that has been a mitigating measure, but it is by no means a policy, much less a large-scale, far-reaching one.”
Rodríguez considers that “at no point do the agromarkets have the capacity to supply even 40% of Salvadoran families. Yes, they are an alternative, but they do not represent a policy that reaches everyone.”
Carlos Acevedo, former president of the Banco Central de Reserva (Central Reserve Bank, BCR), also points out that Bukele “didn’t delve much into the economic issue. The fact is, perhaps because there aren’t many tangible results to offer on the economic front, he preferred not to touch on it much.”
Acevedo expected the president to address more specific challenges of the Salvadoran economy, such as the (low) growth rate or attracting foreign investment, as well as the tourism rebound. But that didn’t happen Sunday night.
“The thing is, the economy really isn’t doing well, so if he wanted to say something positive, what was he going to say: that the economy is growing at high rates? He couldn’t say that. That we are attracting foreign investment? He couldn’t say that either. That the fiscal situation is behind us? He couldn’t say that either. So there wasn’t much he could say,” he states.
According to data from international organizations, El Salvador is projected to grow the least in Central America in 2025, and it also grew the least in 2024. Furthermore, it attracts the least foreign investment in the region.
However, he believes Bukele could have capitalized on tourism data and the services balance, for example, as he thinks “it’s a topic I find interesting to highlight, and one that offers a clue as to where a strategic focus might lie.”
He also indicates that Bukele could have highlighted the agreement with the Fondo Monetario Internacional (International Monetary Fund, IMF) more, but he didn’t because it wouldn’t benefit him.
“There are also aspects the government wouldn’t like to acknowledge, commitments regarding corruption and transparency—important commitments—but obviously, he couldn’t delve into that without somehow being exposed,” Acevedo highlights.
“No hay muchos resultados tangibles que ofrecer”, señalan economistas
Después de seis años en el gobierno, el presidente Nayib Bukele no tenía mayores resultados económicos que ofrecer en su discurso a la Nación de este 1 de junio, señalaron economistas consultados.
Reiterar que el presupuesto de 2025 está “completamente financiado” y la creación de los agromercados, dos de los puntos en materia económica que mencionó Bukele, no son anuncios nuevos ni logros de envergadura para la situación económica que aprieta a los salvadoreños, dicen en resumen los expertos.
Para el economista Rommel Rodríguez, el discurso presidencial fue “incompleto” en el ámbito económico.
“El discurso del presidente fue un panorama, digámoslo así, muy superficial y muy ligero en el ámbito económico”, expresa Rodríguez.
El experto explica que cuando Bukele habla de un presupuesto “financiado” es porque “quizá el mandatario se confunde o no tiene buena asesoría. Lo que sí debería de decir es que se ha intentado sufragar lo mayor posible y que está financiada la partida de gasto corriente, eso es, que se ha tratado de cubrir lo más posible los gastos corrientes del presupuesto. Ya veremos al final del ejercicio fiscal si eso realmente se cumple”.
Y sobre los agromercados, opina que “esa ha sido una medida para mitigar, pero en ningún momento es una política y mucho menos de envergadura, de alcance”.
Rodríguez considera que “en ningún momento los agromercados tienen la capacidad de abastecer ni siquiera un 40 % de las familias salvadoreñas. Sí son una alternativa, pero no representan una política que alcance a todos”.
También Carlos Acevedo, expresidente del Banco Central de Reserva (BCR), apunta que Bukele “no entró mucho al tema económico. Definitivamente lo que pasa es que quizá como no hay muchos resultados tangibles que ofrecer en el tema económico, quizá prefirió mejor no tocarlo mucho”.
Acevedo esperaba que el mandatario abordara desafíos más específicos de la economía salvadoreña, como la (baja) tasa de crecimiento o la atracción de inversión extranjera, así como el repunte del turismo. Pero eso no pasó la noche del domingo.
“Lo que pasa es que realmente la economía no está bien, entonces, si él quería decir algo positivo qué iba a decir: que la economía está creciendo a tasas altas, no podía decirlo; que estamos atrayendo inversión extranjera, tampoco podía decirlo; que la situación fiscal está olvidada, tampoco podía decirlo. Entonces no quedaba mucho que pudiera decir”, afirma.
Según datos de organismos internacionales, El Salvador es el que menos crecerá a nivel de Centroamérica en 2025, pero también fue el que menos creció en 2024. Además es el que menos inversión extranjera atrae en la región.
Sin embargo, opina que sí podría haber explotado los datos del turismo y el tema de la balanza de servicios, por ejemplo, ya que piensa que “es un tema que me parece interesante destacar y que da una pista de por dónde puede ir una apuesta estratégica”.
También indica que podría haber resaltado más el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero no lo hizo porque no le beneficiaba.
“Ahí también hay aspectos que no le gustaría reconocer al gobierno, con compromisos en materia de corrupción, de transparencia, que son compromisos importantes, pero obviamente no podía profundizar en eso sin que de alguna manera quedar en evidencia”, destaca Acevedo.