Chris Van Hollen, a Democratic senator from Maryland, held a press conference in the United States this Friday, after managing to meet on Thursday with Kilmar Ábrego García, who has been deported to El Salvador due to an error admitted by United States authorities.
Ábrego García was deported from the United States to El Salvador in mid-March as part of a Donald Trump administration operation to send alleged criminals to El Salvador.
Van Hollen gave a press conference at Washington Dulles International Airport upon his return from El Salvador, broadcast on his YouTube channel, where he addressed the alleged illegality committed by the U.S. government through the deportation of Ábrego García, whose lawyers have filed a lawsuit against U.S. officials.
In that conference, the senator referred to what he called “Margaritagate,” referencing an action allegedly taken by Nayib Bukele’s government employees who placed two glasses on the table where he was meeting with Kilmar Ábrego, which appeared to be alcoholic beverages.
In fact, it was President Bukele who said they were margaritas, which are alcoholic drinks made with tequila.
“Kilmar Abrego García, miraculously resurrected from the ‘extermination camps’ and ‘torture,’ now drinking margaritas with Senator Van Hollen in the tropical paradise of El Salvador!” the president posted on X, with photos from the meeting.
Van Hollen clarified what happened: “This is what happened: When I sat down with Kilmar, we only had glasses of water. I think maybe coffee. And while we were talking, a government official came over and placed two other glasses on the table with ice and I don’t know if it was salt or sugar on top, but they looked like margaritas. And if you look at the one placed before Kilmar, it actually had a little less liquid than the one before me. To make it look, I suppose, as if he had taken a drink. To be clear, neither of us touched the drinks.”
He insisted that neither of them drank from those glasses and criticized the bad faith of the Bukele government.
“Nobody drank margaritas or sugar water or anything. But this is the lesson: how far President Bukele is willing to go to deceive people about what is happening,” he stated.
He also criticized Trump’s reactions in Kilmar’s case. “This is about adhering to the Constitution, to the right to due process,” the senator emphasized.
“Margaritagate”: senador acusa a empleados de Bukele de colocar bebidas en reunión con Ábrego
Chris Van Hollen, senador demócrata por Maryland, ofreció una conferencia de prensa en Estados Unidos este viernes, tras lograr reunirse el jueves con Kilmar Ábrego García, quien ha sido deportado a El Salvador por un error que ha sido admitido por autoridades de Estados Unidos.
Ábrego García fue deportado de los Estados Unidos a El Salvador a mediados de marzo como parte de un operativo del gobierno de Donald Trump de enviar supuestos criminales a El Salvador.
Van Hollen dio una conferencia de prensa en el Aeropuerto Internacional Washington Dulles a su regreso de El Salvador, transmitida en su canal de Youtube, donde se refirió a la ilegalidad en la que habría caído el gobierno estadounidense por la deportación de Ábrego García, cuyos abogados han presentado una demanda contra funcionarios de dicho país.
En dicha conferencia, el senador se refirió a lo que calificó como “Margaritagate”, en referencia a una acción que habrían hecho empleados del gobierno de Nayib Bukele de poner dos copas en la mesa en la que estaba reunido con Kilmar Ábrego, que aparentaban ser bebidas alcohólicas.
De hecho, fue el presidente Bukele quien dijo que eran margaritas, que son bebidas alcohólicas hechas con tequila.
“Kilmar Abrego García, milagrosamente resucitado de los ‘campos de exterminio’ y la ‘tortura’, ¡ahora bebiendo margaritas con el senador Van Hollen en el paraíso tropical de El Salvador!”, publicó en X el presidente, con las fotos de la reunión.
Van Hollen aclaró lo ocurrido: “Esto fue lo que pasó: Cuando me senté con Kilmar, solo teníamos vasos de agua. Creo que quizás café. Y mientras hablábamos, un funcionario del gobierno se acercó y depositó otros dos vasos en la mesa con hielo y no sé si sal o azúcar por encima, pero parecían margaritas. Y si se fijan en el que le pusieron a Kilmar, de hecho tenía un poco menos de líquido que el que tenía delante. Para que pareciera, supongo, como si hubiera tomado una copa. Para que quede claro, ninguno de los dos tocó las bebidas”.
Insistió en que ninguno bebió de dichos vasos y criticó la mala fe del gobierno de Bukele.
“Nadie bebió margaritas ni agua azucarada ni nada. Pero esta es la lección: hasta dónde es capaz de llegar el presidente Bukele para engañar a la gente sobre lo que está sucediendo”, afirmó.
También criticó las reacciones de Trump en el caso de Kilmar. “Se trata de apegarse a la Constitución, al derecho al debido proceso”, enfatizó el senador.