Construction Grew Much Less Than Expected in 2024 — La construcción creció mucho menos de lo que esperaba en 2024

Mar 19, 2025

Casalco had projected an 11% growth for the construction sector. However, data from the Banco Central de Reserva (BCR) regarding quarterly GDP variations and the IVAE indicate the growth will instead be around 2.5%. — Casalco ha manifestado que el crecimiento del sector de la construcción sería del 11%. Sin embargo, datos del BCR sobre la variación del PIB trimestral y el IVAE indican que estará, más bien, en torno al 2.5%.

In 2023, construction became the main driver of El Salvador’s economy. Nevertheless, the sector slowed down significantly in 2024 and will close with relatively low growth—around 2.5%, according to estimates by Otto Rodríguez, economist and former vice president of the Banco Central de Reserva (BCR), who served during the early months of Nayib Bukele’s administration.

This modest growth contrasts sharply with earlier projections from the main construction industry association— the Cámara Salvadoreña de la Construcción (Casalco). In January of this year, Casalco president José Velázquez had told a government-aligned newspaper that the organization expected the sector’s growth for 2024 would range between 10.5% and 11%.

“We don’t yet have the full year’s final results because we’re awaiting reliable data from Banco Central de Reserva (BCR). Still, based on the latest figures, we estimate the sector would have grown between 10.5% and 11%. We believe these numbers will hold up once the final data comes in,” Velázquez told the government-friendly media outlet.

However, official data from the BCR indicate it is now virtually impossible for the construction sector to achieve the double-digit growth forecast by Casalco.

For instance, the average growth of construction gross domestic product (GDP) during the first three quarters of 2024 (from January to September) was only 1.73%. This moderate figure largely resulted from a contraction experienced during the second quarter, when growth went negative at -3.58%.

Accurate consolidated figures for 2024 will only be available once the BCR publishes data for the last quarter, expected later this month. However, we can estimate how the year will end through the complete figures provided by the Índice de Volumen de la Actividad Económica (IVAE). While October showed significant year-on-year growth (22.38%), November and December registered negative variations of -2.01% and -0.49%, respectively.

This mixed performance will lead to a fourth-quarter GDP growth more modest than that registered in the first quarter, which stood at 4.54%. These metrics align with Rodríguez’s forecast, estimating that construction grew only about 2.5% in 2024.

The economist underlines that the weak results in 2024 are actually a consequence of the sector’s substantial success in 2023, when construction growth exceeded 18%.

“When there’s a recession, you typically see significant growth in the following year. We saw this, for instance, following the pandemic. The opposite phenomenon also happens: when you have extensive growth one year, the next year’s growth typically slows down,” explains Rodríguez.

Another factor, according to Rodríguez, is the deceleration of remittances, whose growth rate was only 2.5% in 2024. Furthermore, public-sector investment in infrastructure projects decreased compared to 2023.

Rodríguez points out that it is a common practice for the Salvadoran government to inflate economic growth figures in its projections. Similarly, industry representatives sometimes do the same as they aim to create high expectations. Such optimism encourages a belief that the sector is healthier than it actually is, prompting investors to anticipate rising prices and thus to invest early.

“This allows them to increase prices, as the market adjusts its expectations accordingly,” Rodríguez concludes.

Outlook for 2025

Despite the weak performance in 2024, Casalco is optimistic about improvements in 2025 due to planned private projects and government infrastructure constructions, including the Los Chorros viaduct and the Aeropuerto del Pacífico.

“We believe that 2025 will bring more investments, both public and private, due to the projects we have seen—projects that will undoubtedly grow in strength thanks to institutional backing from entities such as the Oficina de Planificación del Área Metropolitana de San Salvador (Opamss). We are confident 2025 will definitely be a better year for the sector,” Velázquez was quoted by government-friendly media.

On the other hand, economist Otto Rodríguez predicts continued deceleration due to El Salvador’s challenging macroeconomic environment.

In fact, government investments are likely to slow down further as a result of the agreement with the International Monetary Fund (IMF). Additionally, government employment cutbacks imply that thousands of families will lose significant purchasing power.

A Crisis in the Manufacturing Sector

While the construction industry enjoyed a strong year in 2023, the manufacturing sector has remained stagnant for some time.

Between January and September 2024, this sector contracted by an average of 1.13%, according to BCR data. In 2023, it also posted negative numbers, registering a decrease of 0.96% compared to 2022. Experts emphasize that manufacturing is a fundamental wealth generator since it produces tradable goods capable of generating foreign exchange—something construction, which has ceased to be the main engine of Salvadoran economy, is unable to achieve.

EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/negocios/sector-construccion-el-salvador-pib-crecimiento-economico/1206964/2025/

La construcción creció mucho menos de lo que esperaba en 2024

La construcción se convirtió en el motor de la economía salvadoreña en 2023. Sin embargo, en 2024, el sector se ralentizó y presentará cifras bajas de crecimiento, en torno al 2.5%, según la estimación de Otto Rodríguez, economista y exvicepresidente del Banco Central de Reserva (BCR) en los primeros meses de la administración de Nayib Bukele.

Este pequeño crecimiento contrasta con lo planteado por la gremial más importante del sector: la Cámara Salvadoreña de la Construcción (Casalco). Según lo expresó en enero de este año su presidente, José Velázquez, al periódico oficialista, las estimaciones de la entidad eran que el sector habría crecido entre un 10.5% y 11 % en 2024.

“Aún no tenemos un cierre completo del año porque estamos esperando los datos fiables del Banco Central de Reserva (BCR) pero, según las últimas cifras, estimamos que el sector crecería entre un 10.5 % y un 11 %. Creemos que, independientemente de lo que haya pasado con las cifras finales, se mantendrán”, señaló Velázquez al medio afín al gobierno.

Los datos de esa institución, sin embargo, indican que es casi imposible que el crecimiento para el sector llegue a las dos cifras vaticinadas por Casalco.

Por ejemplo, el promedio de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del sector en los primeros tres trimestres de 2024 (de enero a septiembre) fue del 1.73%. Tal cifra se debió, sobre todo, a la contracción vivida en el segundo trimestre, cuando el crecimiento fue negativo (-3.58%).

Para tener la cifra consolidada de 2024 se debe esperar que el BCR publique los datos del último trimestre, que estarán listos a finales de este mes. Pero se puede tener una idea de cómo cerrará ese periodo, a través de un dato que sí está completo: el Índice de Volumen de la Actividad Económica (IVAE). En ese sentido, si bien hubo un crecimiento interanual importante en octubre (22.38%), en noviembre y diciembre, la variación fue negativa, de -2.01% y -0.49%, respectivamente.

Eso provocaría que el crecimiento del PIB en el último trimestre sea más modesto que el del primero, el cual cerró en una variación del 4.54%. Esos datos son coherentes con lo sostenido por Rodríguez, que vaticina que el crecimiento de la construcción en 2024 fue de solo el 2.5%.

El economista ilustra que los pobres resultados del año pasado son consecuencia del éxito de 2023, en el que el sector creció más del 18%.

“Cuando hay recesiones, lo natural es que al siguiente año se registre un importante crecimiento. Eso pasó, por ejemplo, con la pandemia. Y pasa el mismo fenómeno en el sentido contrario. Cuando hay un gran crecimiento, lo normal es que el del año siguiente sea más modesto”, apunta.

El otro factor, dice Rodríguez, es la desaceleración de las remesas, cuyo crecimiento en 2024 fue de solo 2.5%. Además, el sector público también bajó el volumen de sus inversiones en infraestructura con respecto a 2023.

Que el Gobierno de El Salvador presente cifras infladas en sus previsiones de crecimiento es algo común. También que lo hagan los representantes de un sector, pues el objetivo de ello es generar expectativa, manifiesta Rodríguez. Para el economista, que se crea que el sector tiene una mejor salud que la real provoca que se tenga una idea de que los precios subirán en el corto plazo, por lo que un inversor se ve más tentado a mover su dinero hacia allí.

“Les permite elevar los precios, pues el mercado se ajusta a esa expectativa”, concluye.

Las perspectivas para 2025

A pesar de los pobres números de 2024, desde Casalco vaticinan que el sector se acelerará en 2025, debido a una serie de proyectos privados y construcciones del sector público, como el viaducto de Los Chorros y el Aeropuerto del Pacífico.

“Creemos que 2025 traerá más inversión, tanto en la parte pública como privada, por los proyectos que hemos estado viendo que definitivamente serán superiores, gracias al apoyo que se está teniendo de instituciones como la Oficina de Planificación del Área Metropolitana de San Salvador (Opamss). Definitivamente creemos que 2025 será un mejor año para el sector”, dijo Velázquez al medio oficialista.

Sin embargo, para Otto Rodríguez la tendencia continuará en desaceleración, pues el entorno macroeconómico de El Salvador luce adverso.

En efecto, como consecuencia del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la inversión desde el sector público se ralentizará. Además, el recorte en las plazas del Gobierno se traduce en que miles de familias perderán una gran parte de su poder adquisitivo.

La crisis del sector industrial

Si bien la construcción tuvo un buen año en 2023, el sector que se ha mantenido en números bajos desde hace tiempo es el de la industria manufacturera.

Se contrajo el 1.13% en promedio en los primeros tres trimestres de 2024, según el BCR. En 2023, los números fueron negativos, al marcar un PIB de 0.96% menor respecto al de 2022. Para los expertos, este último es el gran generador de la riqueza de un país, pues crea productos transables, capaces de traer divisas desde el extranjero. Algo que no puede hacer, por ejemplo, la construcción, que ha dejado de ser el gran motor de la economía salvadoreña.

EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/negocios/sector-construccion-el-salvador-pib-crecimiento-economico/1206964/2025/