The hasty approval process of the bill allowing clinical trials in El Salvador could create loopholes that multinational companies might exploit to subject volunteers to unethical practices, said a healthcare expert who spoke anonymously out of fear of retaliation.
“When they choose a country like ours, it’s because they’re ensuring the safety of the populations in the countries where these laboratories originate. Therefore, the real viability, I believe, is zero,” the expert explained.
He further highlighted the thin line separating ethical from unethical actions, warning about the fragility with which experiments could be conducted without proper consent, possibly leading to exploitative and abusive situations, as was the case in Guatemala in the 1940s.
“They are going to expose us all as guinea pigs; it’s already clear this is what will happen. But what we should demand above all else is that those who decide to participate have all the necessary information,” he added.
The expert underscored that a primary concern is that the law’s requirements regarding safety protocols by corporations and oversight mechanisms by authorities might not be fully observed.
He also questioned the authorities’ capacity to monitor and supervise firms interested in carrying out drug research in the country.
“We have long waiting lists for specialized consultations and clear shortages of medication. How are we supposed to ensure thorough monitoring of side effects in a health system already on the brink of collapse?” he questioned.
Guatemala’s troubling precedent
The specialist pointed to the example of Guatemala, where between 1946 and 1948 American researchers deliberately infected prisoners and psychiatric patients with sexually transmitted diseases like syphilis and gonorrhea without their consent. This case, publicly revealed decades later, resulted in international condemnation and lawsuits for human rights violations.
According to the expert, El Salvador’s new law regarding clinical trials does not specify in which phase of development experiments would be introduced to the population or what types of pharmaceuticals could be involved.
“The worrying aspect is that other countries have strict regulations and economic compensation mechanisms for those who suffer adverse effects. Here, it has not been clarified who will assume responsibility in case of severe complications,” he observed.
Preocupación ante el riesgo de que haya ensayos clínicos poco éticos en El Salvador con nueva normativa
La apresurada aprobación del proyecto de ley para permitir ensayos clínicos en El Salvador podría dejar vacíos que aprovechen empresas transnacionales para realizar prácticas poco éticas en voluntarios, opinó un experto en el área de salud, que solicitó mantener el anonimato por temor a represalias.
“Desde el momento en el que escogen un país como el nuestro es porque están garantizando la seguridad de la población de los países de origen de los laboratorios, por tanto la viabilidad, creo es nula”, evaluó.
Además, añadió que existe una delgada línea entre las acciones éticas y las que no lo son, advirtiendo la fragilidad con la que estos experimentos pueden ser realizados sin el debido consentimiento y derivar en casos de explotación y abuso, como ocurrió en Guatemala en la década de 1940.
“Nos van a exponer a todos como conejillos de indias, ya es un hecho que así va a ser, pero lo que más se debería de exigir es tener toda la información posible para quienes decidan participar”, agregó.
Para el experto una de las principales preocupaciones es que la Ley no se cumpla al pie de la letra en cuanto a los protocolos de seguridad de las empresas y los mecanismos de observación por parte de las autoridades.
También cuestionó la capacidad de supervisión y seguimiento que las autoridades puedan dar a las empresas interesadas en investigar fármacos en el país.
“Tenemos largas listas de espera para consultas especializadas y un evidente desabastecimiento de medicamentos. ¿Cómo se pretende garantizar un monitoreo adecuado de los efectos secundarios en un sistema que ya está colapsado?”, cuestionó.
El precedente de Guatemala
El especialista recordó el caso de Guatemala, donde entre 1946 y 1948, científicos estadounidenses inocularon sin consentimiento enfermedades de transmisión sexual, como sífilis y gonorrea, a privados de libertad y pacientes psiquiátricos. Este caso, que salió a la luz décadas después, resultó en condenas internacionales y demandas por violaciones a los derechos humanos.
Según la fuente consultada, la nueva ley de ensayos clínicos en El Salvador no especifica en qué fase del proceso se introducirán los experimentos en la población ni qué tipo de fármacos se podrán utilizar.
“Lo que preocupa es que en otros países existen normativas estrictas y mecanismos de compensación económica para quienes sufren efectos adversos, pero aquí no se ha aclarado quién asumirá la responsabilidad en caso de complicaciones graves”, señaló.