Tania Fabían, 24, is the most recent victim of the state of exception. Socorro Jurídico Humanitario (SJH) (Humanitarian Legal Aid) documented her death in prison over the weekend, after nearly three years of arbitrary detention, bringing to 25 the number of female inmates that have died under this security measure.
In total, from March 2022 through March 3, 2025, SJH has recorded 373 deaths among persons detained during the state of exception. Although the proportion of women is lower (7%) than that of men (93%), the organization’s director, Ingrid Escobar, emphasized the widespread social impact their deaths are causing in El Salvador.
“In the context of the state of exception, women bear some of the greatest impacts. First, as collateral victims, because 90% of those who approach Socorro Jurídico to follow up on a detained relative are women. But even worse are the direct victims, such as this 24-year-old woman who leaves behind two children,” Escobar said.
The lawyer also stressed that the Salvadoran state is failing to adhere to its own laws, like the Ley Crecer Juntos (Growing Up Together Law), since the children of inmates who died in custody are not receiving proper assistance following their parents’ deaths.
Escobar said Fabían had already been issued a release order due to her critical health condition after being diagnosed with cancer. However, this order was never executed.
“She was severely ill and was denied the right to at least die close to her children and family. This demonstrates that misuse of the state of exception can victimize vulnerable groups such as women and children. This is unspeakable,” Escobar remarked.
Tania Fabían was being held at the Apanteos prison in Santa Ana. When her condition worsened, she was transferred to the San Juan de Dios Hospital in the same department, where she died. She leaves behind children aged five and seven.
Socorro Jurídico Humanitario (SJH) warns that the actual number of deaths in prison may be even higher, due to undocumented cases caused by authorities’ silence or families fearful of coming forward.
According to SJH’s analysis of deaths during the state of exception, as of December 2024, 28% of victims were between 18 and 30 years old, while 53% were between 31 and 60 years old.
Moreover, they noted that 94% of the deceased had no gang affiliation and had not yet been convicted but were being held in pre-trial detention.
25 privadas de libertad han fallecido durante régimen de excepción en El Salvador
Tania Fabían, de 24 años, es la víctima más reciente del régimen de excepción. El Socorro Jurídico Humanitario (SJH) documentó su muerte en prisión durante el fin de semana, después de pasar casi tres años detenida de forma arbitraria y con ella la cifra de mujeres privadas de libertad que han fallecido durante la medida de seguridad ya es de 25.
En total, desde marzo de 2022 hasta el 3 de marzo de 2025 el SJH contabiliza 373 muertes de personas que fueron capturadas en el régimen de excepción y aunque el porcentaje de mujeres es bajo (7 %) si se compara con el de hombres (93 %), la directora de la organización, Ingrid Escobar, destaca el amplio impacto que generan en la sociedad salvadoreña.
En el caso del régimen de excepción uno de los impactos más grandes se los llevan las mujeres. Primero por las víctimas colaterales, porque el 90 % de personas que llegan al Socorro Jurídico para dar seguimiento a la detención de un familiar son mujeres. Pero lo peor son las víctimas directas, como el caso de esta joven que tenía 24 años y deja dos hijos”, expresó Escobar.
La abogada también destacó que el Estado salvadoreño no está cumpliendo con sus mismas leyes, como la Ley Crecer Juntos, puesto que los hijos de las y los fallecidos en prisión no reciben después una ayuda idónea ante la ausencia de sus padres.
Escobar dijo que Fabián ya tenía una carta de libertad debido a su grave condición de salud, pues le habían diagnosticado cáncer. Sin embargo, esta no se había ejecutado.
“Estaba gravemente enferma y se le negó el derecho de ir a morir al menos cerca de sus hijos y su familia. Esto demuestra que la mala utilización del régimen de excepción puede dejar víctimas en poblaciones vulnerables, como son las mujeres, los niños y las niñas. Esto no tiene ni nombre”, opinó Escobar.
Tania Fabían estaba recluida en el Centro Penal de Apanteos, en Santa Ana, y cuando su estado de salud empeoró fue trasladada al Hospital San Juan de Dios, del mismo departamento, donde falleció. Sus hijos tienen cinco y siete años de edad.
El Socorro Jurídico Humanitario (SJH) sostiene que la cifra de fallecidos en prisión podría ser incluso más alta debido a los casos que no se han logrado documentad ya sea por el silencio de las autoridades o de las familias que temen denunciar.
Según el análisis del SJH sobre los fallecidos durante el régimen de excepción, hasta el diciembre de 2024 el 28 % de las víctimas tenían entre 18 y 30 años de edad, mientras que un 53 % eran salvadoreños entre los 31 y 60 años.
Además, destacan que el 94 % de los fallecidos no tenían una afiliación con pandillas y que todavía no habían sido vencidos en juicio, sino que estaban en detención provisional.