Health sector unions reported on Thursday that between Monday and Wednesday this week, the Ministry of Health (MINSAL) carried out 981 layoffs.
According to information shared with LA PRENSA GRÁFICA, 230 people were dismissed on Monday, 239 on Tuesday, and 512 on Wednesday.
The Movimiento por la Salud “Dr. Salvador Allende” ALAMES/El Salvador (Dr. Salvador Allende Movement for Health ALAMES/El Salvador), which represents public health sector workers, stated that these dismissals will have a significant impact on the quality of patient care at various MINSAL units nationwide.
“The consequences for health establishments will be considerable, which is why they are trying to promote the idea of telemedicine, because the limited number of remaining staff will be insufficient,” the movement stated.
Health workers’ unions consulted by this outlet mentioned that many employees were not given clear information about the severance process. As a result, they plan to wait until January “to figure out how to resolve this issue and to file the corresponding complaints with the Office of the Human Rights Ombudsman (PDDH).”
According to ALAMES/El Salvador, the layoff procedure involved summoning employees to meetings where they were prohibited from using cell phones or being accompanied by legal counsel. Additionally, clear details about why their positions were being eliminated were not provided. The organization also emphasized that “the large-scale dismissals are unprecedented in the country’s history.”
“THEY ALREADY RESIGNED”
The movement reported that the layoffs include “administrative personnel, although there have also been reports of dismissals of doctors, particularly those in senior roles, as well as employees at health units and hospitals.” It was also noted that some workers preemptively resigned due to the anticipated dismissals.
“There are people who resigned early, anticipating the layoffs. They have also dismissed staff from health units, not just hospitals. Two weeks ago, there was a call for young doctors to submit their résumés, but young colleagues say it’s more for a job pool or short contracts lasting three to six months, without benefits, just service contracts,” the union explained.
ALAMES mentioned that the layoffs are expected to continue in the coming days. Based on the information they have gathered, the next wave of cuts could take place on December 23.
Additionally, the organization highlighted the vital role of healthcare workers during the COVID-19 pandemic, who worked with limited resources, and lamented that they are now being treated as “disposable personnel.”
“Let us remember that just yesterday we were heroes for working without proper supplies during the COVID-19 pandemic in El Salvador, and now we are being treated like disposable personnel,” the movement criticized.
So far, MINSAL has not provided an official statement regarding the layoffs. Since Monday, this newsroom sent an email to Minister Alabi inquiring about the reasoning behind the layoffs, but as of now, there has been no response to the request.
Unions acknowledged that the situation for the laid-off workers is “worrying” as “some have fallen ill due to the stress of the situation.”
Sindicatos denuncian 981 despidos en salud
Sindicatos de trabajadores del sector salud dijeron este jueves que entre el lunes y el miércoles de esta semana el Ministerio de Salud (MINSAL) realizó 981 despidos.
Según información compartida a LA PRENSA GRÁFICA, el lunes habrían sido destituidas de su cargo 230 personas, el martes 239 y el miércoles 512.
El Movimiento por la Salud “Dr. Salvador Allende” ALAMES/El Salvador, que agrupa trabajadores del sector público de salud, dijo que estos despidos tendrán un impacto enorme en la calidad de atención de los pacientes en las diferentes unidades del MINSAL en todo el país.
“El impacto de los establecimientos de salud será considerable, por ello están tratando de vender la idea de la telemedicina, porque el limitado personal que quede será insuficiente”, afirmó el movimiento.
Sindicatos de trabajadores de salud, consultados por este medio, dijeron que a muchos empleados no se les dejó claro cómo será el proceso de indemnización, por lo que estos esperarán hasta enero “para ver cómo solucionar ese problema y poner las denuncias respectivas en la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos”.
De acuerdo a ALAMES/El Salvador, el procedimiento de despido incluyó convocatorias a reuniones en las que no se permitió el uso de teléfonos, ni la presencia de abogados; además, no se brindó información clara sobre los motivos por los cuales sus plazas eran suprimidas. También, la organización enfatizó que “los despidos a gran escala carecen de precedentes en la historia del país”.
“YA RENUNCIARON”
El movimiento detalló que los despidos pertenecen al “personal administrativo, aunque también se han reportado ceses de médicos, principalmente del nivel superior, así como de empleados en unidades de salud y hospitales”. También mencionó que algunos trabajadores renunciaron de manera anticipada al prever la situación.
“Hay gente que previendo los despidos renunció antes. También han despedido gente de unidades de salud, no solo de hospitales. Hace dos semanas hicieron una convocatoria para contratar médicos jóvenes, para que mandaran currículum, pero los compañeros jóvenes dicen que es más para bolsa de trabajo o que los llaman para tres meses o seis, sin prestaciones, solo para venta de servicios”, dijo la gremial.
ALAMES mencionó que los despidos continuarán estos días. Según la información que manejan, el próximo recorte podría ser el 23 de diciembre.
Por otro lado, la organización recordó el papel crucial del personal de salud durante la pandemia del covid-19 cuando trabajaron con recursos limitados y lamentó que ahora sean tratados como “personal descartable”.
“Recordemos que ayer éramos héroes para atender sin insumos durante la pandemia de covid-19 en El Salvador y ahora se nos trata como personal descartable”, reclamó el movimiento.
Hasta el momento, el MINSAL no ha brindado una postura oficial sobre estos despedidos. Desde el lunes pasado, esta redacción envió un correo electrónico al ministro Alabi para consultarle a qué se deben los recortes, pero al momento no hay una respuesta a la solicitud.
Sindicatos reconocieron que la situación de las personas cesadas es “preocupante”, pues “algunos se han enfermado por el estrés de la situación”.