March Reaches Presidential House as Mothers Plead to See Their Children — Marcha llega hasta Capres y madres claman poder ver a sus hijos

Dec 11, 2024

Families marched from the Cristo de la Paz in San Marcos to the Presidential House in San Salvador. They demanded visits to their relatives in prisons to check on their condition. — Las familias caminaron desde el Cristo de la Paz en San Marcos hasta Casa Presidencia en San Salvador. Exigieron visitar a sus familiares en las cárceles para saber su estado.

The Cristo de la Paz monument, located on the road to Comalapa near San Marcos, served as the initial meeting point for relatives of individuals detained under the state of exception, with the goal of reaching Casa Presidencial (Capres). The nearly 10-kilometer march highlighted the struggles faced by these families since the implementation of the security measure.

It was 8:00 AM when dozens of people gathered to march in defense of the rights of their detained family members. They all shared the same demand: to be allowed to see their loved ones who are deprived of liberty. Their worry grows each day as they remain uncertain whether their relatives are alive, in ill health, or suffering from poor nutrition.

The majority were elderly and ill mothers, joined by fathers, children, aunts, uncles, siblings, relatives, and friends. The march began at 9:30 AM. Despite the scorching sun and the honking of cars, sometimes accompanied by insults, the families ignored it all and stayed focused on their goal.

The march was led by a large banner reading:  

“For a Christmas without innocent prisoners, victims of the state of exception and political persecution.” 

This was followed by others with more urgent slogans such as: “Freedom for my innocent relatives!” 

“We demand justice and freedom for the innocent detained on Espíritu Santo Island!”  

“We ask for freedom this Christmas for our fathers, mothers, uncles. They are innocent!”  

Among the marchers, the severity of the participants’ health conditions was evident. Some struggled to walk; some women limped due to injured feet, while others bore signs of various illnesses.

Occupying a single lane of the road leading to San Salvador, over 150 people chanted in unison:  

“They took them alive, we want them alive!”  

“What do we want for our relatives? Freedom and justice!”  

“We don’t defend criminals; we defend innocence!”  

These families made it clear that marching is their only option, insisting that it is the State being “violent towards them” by refusing to listen.

All the families continued to a second stop—Árbol de la Paz—resting only briefly at the monument to the Hermano Lejano. By that point, they had walked nearly 6 kilometers without pause.

Upon reaching the Bulevar de Los Próceres, participation in the march grew to over 200 people. Though tired, the group remained motivated to complete the remainder of the journey. The final stretch was the most important: reaching the office of the President of the Republic to demand answers to their petitions, including information on nearly 200 cases presented in August 2024, all involving individuals they believe to be innocent.

About 500 meters from reaching Capres, they were met by more than 20 agents from the Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO) (Riot Control Unit), who instructed the group to move to the side of the road and announced that only six representatives would be allowed to approach and deliver the letter they had prepared.

“Just think about this, we’re here because your colleagues arrested our children,” shouted one of the marchers in response to the riot police’s pressure.

LPG: https://www.laprensagrafica.com/elsalvador/Marcha-llega-hasta-Capres-y-madres-claman-poder-ver-a-sus-hijos-20241210-0072.html

Marcha llega hasta Capres y madres claman poder ver a sus hijos

El monumento Cristo de La Paz, ubicado en la carretera a Comalapa a la altura de San Marcos, fue el primer punto de encuentro de familiares de personas capturadas en el régimen de excepción que tenían como objetivo llegar hasta Casa Presidencial (Capres). El recorrido de casi 10 kilómetros evidenció la problemática que afecta a estas personas desde que se implementó dicha medida de seguridad.

Eran las 8:00 de la mañana cuando decenas de personas se reunieron para marchar por la defensa de los derechos de sus familiares detenidos. Todos y todas compartían la misma exigencia: poder ver a sus privadas y privados de libertad, pues su preocupación aumenta cada día al no saber si están con vida, mal de salud o con mala alimentación.

En su mayoría eran madres de la tercera edad y enfermas, junto a padres, hijos, hijas, tías, tíos, hermanas, hermanos, parientes y amistades. Emprendieron la marcha a las 9:30 de la mañana. A pesar del fuerte sol y los pitidos insultantes de los carros, ellas hicieron caso omiso y siguieron con us objetivo.

La marcha era encabezada por un gran cartel que decía:

“Por una Navidad sin presas y presos inocentes víctimas del régimen de excepción y la persecución política”, a este cartel le seguían otros más exigentes con lemas como “¡Libertad a mis familiares inocentes!”; “Exigimos justicia y libertad para los inocentes de la isla el Espíritu Santo”; “¡Pedimos libertad en Navidad para nuestros papá, mamás, tíos. Ellos son inocentes!”.

Entre las marchantes se podía notar la grave situación de salud en las que se encontraban, pues algunas con dificultad caminaban. Habían mujeres que tenían mal un pie y patojeaban y había otras con diferentes tipos de enfermedades.

Ocupando un solo carril de la carretera que conduce hacia San Salvador, las más de 150 personas gritaban al unísono:

“Vivos se los llevaron vivimos los queremos”, “¡¿Qué queremos para nuestros familiares? Libertad y Justicia!”; ¡No defendemos delincuentes, defendemos inocentes!”.

Estas personas fueron claras en decir que marchar es la única opción que les queda, ya que es el Estado el que es “violento con ellos” y no los escucha.

Todas las familias marcharon hacia un segundo punto que era el Árbol de la Paz, descansado solo unos breves minutos en el desnivel del monumento al Hermano Lejano. Para entonces habían caminado sin descansar cerca de 6 kilómetros.

Al llegar al Bulevar de Los Próceres la marcha se intensificó y superó las 200 personas. Todas ellas, aunque cansadas, aún estaban animadas porque la mitad del recorrido ya había terminado y faltaba el tramo más importante, llegar ala oficina del presidente de la República para exigirle respuesta a sus peticiones, entre ellas, que informe sobre los casi 200 casos presentados en agosto de 2024, todos de personas que consideran inocentes.

Antes de llegar a Capres, a unos 500 metros aproximadamente, más de 20 agentes de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO) los estaban esperando, para darles indicaciones de que se hicieran a un lado de la carretera y que solo permitirían el ingreso de seis personas para que entregaran la carta que llevaban.

“Solo piensen esto, estamos aquí porque sus compañeros capturaron a nuestros hijos”, gritó uno de los marchistas, ante el acoso de los antimotines.

LPG: https://www.laprensagrafica.com/elsalvador/Marcha-llega-hasta-Capres-y-madres-claman-poder-ver-a-sus-hijos-20241210-0072.html