Individuals detained and later released in the state of exception in El Salvador are not recognized by the state as victims of arbitrary detentions, despite President Nayib Bukele having acknowledged that they are innocent, warned a human rights advocacy organization on Wednesday.
“According to official data, there are more than 8,000 people released under the framework of the state of exception, whom the authorities have referred to as the ‘margin of error,'” and “the fundamental problem we have is that they remain as defendants, without being acquitted or declared innocent,” said Gabriela Santos, director of the Instituto de Derechos Humanos de la UCA (IDHUCA) (Human Rights Institute of the Central American University). She added that these individuals “are not recognized as victims by the state, which complicates everything related to compensating the physical and moral damages caused to them and their families.”
“It is necessary to recognize the victims of arbitrary detentions and to undertake comprehensive reparations,” Santos stated during the presentation of a report by the Observatorio Universitario de Derechos Humanos (OUDH) (University Human Rights Observatory).
In a recent visit to Costa Rica, President Bukele acknowledged that under this regime, which suspends constitutional rights, innocent people have been detained.
“Obviously, the operations are not perfect, and without any intention of harming an innocent person, some were captured the same way as it happens in France, Germany, Japan, and all countries in the world. We are releasing them; we have already released 8,000 people and will release 100% of the innocents,” the president said at a conference.
However, the head of state did not clarify that these individuals, according to the FGR, have not been exonerated of the charges initially filed against them.
In a press conference with international media on Tuesday, the Attorney General, Rodolfo Delgado, stated that the innocents mentioned by Bukele “are under precautionary measures” (conditional release).
“Every person is innocent until proven guilty,” Delgado asserted to address questions on the matter.
According to the OUDH, individuals detained and later released under this state of exception face significant obstacles to “social reintegration,” as well as economic and health problems. It also warned that while in prison, they were subjected to “cruel, inhuman, and degrading treatment.”
The state of exception was approved after the murder of more than 80 people in a weekend at the end of March 2022, which investigations by the local outlet El Faro indicate resulted from the breakdown of a pact between the government and criminal gangs.
Meanwhile, various humanitarian organizations have received more than 6,400 reports of human rights violations, mainly for arbitrary detentions and torture, and report about 340 deaths of detainees in state custody, most showing signs of violence.
Salvadoreños liberados en régimen de excepción no son reconocidos como víctimas, dice el Idhuca: “Es necesario emprender reparaciones integrales”
Las personas detenidas y posteriormente liberadas en el régimen de excepción en El Salvador no son reconocidas por el Estado como víctimas de detenciones arbitrarias, a pesar que el presidente Nayib Bukele ha reconocido que son inocentes, advirtió el miércoles un ente defensor de derechos humanos.
“Según datos oficiales, hay más de 8.000 personas liberadas en el marco del régimen de excepción, a quienes las autoridades se han referido como el ‘margen de error'” y “el problema fundamental que tenemos es que ellas continúan como procesadas, sin ser sobreseídas o declaradas inocentes”, dijo Gabriela Santos, directora del Instituto de Derechos Humanos de la UCA (Idhuca).
Agregó que estas personas “no son reconocidas como víctimas por parte del Estado, lo que complejiza todo lo relacionado con resarcir daños físicos y morales causados a ellas y sus familias”.
“Es necesario reconocer a las víctimas de detenciones arbitrarias y emprender reparaciones integrales”, sostuvo Santos en el marco de la presentación de un informe del Observatorio Universitario de Derechos Humanos (OUDH).
En una reciente visita a Costa Rica, el presidente Bukele reconoció que bajo este régimen, que suspende derechos constitucionales, han sido detenidas personas inocentes.
“Obviamente, las operaciones no son perfectas y pues, sin ninguna intención de dañar a una persona inocente, algunos fueron capturados de la misma manera que lo son en Francia, en Alemania, en Japón y en todos los países del mundo y estamos liberándolos, ya hemos liberado 8,000 personas y vamos a liberar el 100 % de inocentes”, sostuvo el mandatario en una conferencia.
Sin embargo, el jefe de Estado no aclaró que estas personas, de acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), no han sido exonerados de los cargos imputados inicialmente.
En una rueda de prensa con medios internacionales el martes, el fiscal general, Rodolfo Delgado, dijo que los inocentes mencionados por Bukele “están con medidas cautelares” (libertad condicional).
“Toda persona es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad”, sostuvo Delgado para zanjar las preguntas sobre el tema.
De acuerdo con el OUDH, las personas detenidas y liberadas posteriormente bajo este régimen de excepción enfrentan obstáculos significativos para la “reintegración social”, además de problemas económicos y de salud. También alertó que mientras guardaron prisión estuvieron expuestas a “tratos crueles, inhumanos y degradantes”.
El régimen de excepción se aprobó tras el asesinato de más de 80 personas en un fin de semana a finales de marzo de 2022, lo que investigaciones del medio local El Faro señalan que se dio por la ruptura de un pacto entre el Gobierno y las bandas criminales.
Entre tanto, diversas organizaciones humanitarias han recibido más de 6,400 denuncias de violaciones a derechos humanos, principalmente por detenciones arbitrarias y torturas, y reportan unas 340 muertes de detenidos bajo custodia estatal, la mayoría con signos de violencia.