President Nayib Bukele declared for the first time his support for metallic mining, banned in El Salvador since 2017.
“We are the only country in the world with a total ban on mining, something no other country applies. Absurd!” he said on his X account, after claiming that El Salvador has the highest density of gold deposits per square kilometer in the world.
Citing studies, the president shared a map of the Pacific Ring of Fire, where El Salvador is shown, along with other countries, as a zone rich in mineral resources due to its volcanic activity.
“Studies conducted in only 4% of the potential area identified 50 million ounces of gold, valued today at $131.565 billion. This is equivalent to 380% of El Salvador’s GDP (Gross Domestic Product),” the president added.
According to Bukele, this finding translates into “wealth” for the country, something that can create “thousands of quality jobs, finance infrastructure, boost the development of local economies, all with modern and sustainable mining.”
The president’s stance comes a day after the company VanEck revealed that El Salvador seeks to reverse the ban on gold mining.
According to VanEck, Bukele invited their geologists to investigate areas where gold extraction can begin.
Seven Years of Prohibition
In 2017, El Salvador became the first country in the world to ban mining of all its metals, including exploration activities.
This milestone was achieved with the push of a network of communities in northern El Salvador, which not only organized marches but also brought proposals to Congress to accelerate the total ban on mining.
That community was recently hit by the capture of several of its leaders amid a state of exception in effect since March 2022, which imposed a military siege in Cabañas, one of the departments known for its activism against mining.
The leaders, known as “The Santa Marta Five,” were imprisoned for almost two years after being linked to a crime that occurred during the armed conflict that ravaged the Central American country between 1979 and 1992.
However, social organizations and activists considered the detention of the leaders in January 2023, with Nayib Bukele already in the presidency, to be a persecution for their activism against mining.
Although they were acquitted by a judge at the end of October, on November 26, a day before Bukele’s stance favoring mining, a court annulled the ruling that freed the activists.
The Bukele government has not responded to the accusations made by national and international human rights organizations regarding the possible criminalization of environmentalists for their anti-mining activism.
Bukele’s recent announcement is part of a series of events in recent years concerning mining.
In October 2021, the Salvadoran Congress, with a pro-government majority, approved the project of the General Directorate of Energy, Hydrocarbons, and Mines for “the review and updating of Mining and its regulations.”
Additionally, that same year, El Salvador became a member of the Intergovernmental Forum on Mining, Minerals, Metals and Sustainable Development (IGF), an entity that supports countries committed to leveraging mining to ensure that this activity “supports their sustainable development goals.”
El Salvador is the most indebted country in Central America, with 87% of its Gross Domestic Product (GDP) pledged. In his inauguration speech, last June 1, Bukele stated that boosting the economy would be his next step.
Bukele dice que es “absurdo” que en El Salvador esté prohibida la minería
El presidente Nayib Bukele se declaró por primera vez a favor de la minería metálica, prohibida en El Salvador desde 2017.
“Somos el único país del mundo con una prohibición total de la minería, algo que ningún otro país aplica. ¡Absurdo!”, dijo en su cuenta de X, luego de asegurar que El Salvador tiene los depósitos de oro con mayor densidad por kilómetro cuadrado en el mundo.
Citando estudios, el mandatario compartió un mapa del Anillo de Fuego del Pacífico, donde se ve El Salvador, junto con otros países, en una zona rica en recursos minerales debido a su actividad volcánica.
“Estudios realizados en solo el 4 % del área potencial identificaron 50 millones de onzas de oro, valoradas hoy en $131,565 millones. Esto equivale al 380 % del PIB (Producto Interno Bruto) de El Salvador”, agregó el mandatario.
Según Bukele, el hallazgo se traduce en “riqueza” para el país, algo con lo que se pueden crear “miles de empleos de calidad, financiar infraestructura, impulsar el desarrollo de economías locales y todo con minería moderna y sostenible”.
La postura del mandatario llega un día después que la empresa VanEck reveló que El Salvador busca revertir la prohibición a la minería de oro.
Según VanEck, Bukele invitó a sus geólogos para investigar las zonas donde se puede comenzar la extracción de oro.
Siete años de prohibición
En 2017, El Salvador se convirtió en el primer país del mundo en prohibir la minería de todos sus metales, incluidas las actividades de exploración.
Este hito se logró con el impulso de una red de comunidades al norte de El Salvador que no solo organizaron marchas sino también llevaron hasta el Congreso propuestas de ley para acelerar la prohibición total a la minería.
Esa comunidad se vio golpeada recientemente por la captura de varios de sus líderes en medio de un régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, con el que se impuso un cerco militar en Cabañas, uno de los departamentos conocidos por su activismo contra la minería.
Los líderes, conocidos como “Los 5 de Santa Marta”, estuvieron presos casi dos años tras ser vinculados a un crimen ocurrido durante el conflicto armado que asoló el país centroamericano entre 1979 y 1992.
Pero organizaciones sociales y activistas consideraron que la detención de los líderes en enero de 2023, con Nayib Bukele ya en la presidencia, se trató de una persecución por su activismo contra la minería.
Aunque fueron absueltos por un juez a finales de octubre, este 26 de noviembre, un día antes de la postura de Bukele a favor de la minería, una corte anuló el fallo que dejaba en libertad a los activistas.
El gobierno de Bukele no ha respondido a los señalamientos de las organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales sobre la posible criminalización de los ambientalistas por su activismo antiminero.
El reciente anuncio de Bukele se enlista a la serie de hechos ocurridos en los últimos años en torno a la minería.
En octubre de 2021, el Congreso salvadoreño de mayoría oficialista, aprobó el proyecto de la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas para “la revisión y actualización de Minería y su reglamento”.
Además, ese mismo año El Salvador se convirtió en miembro del Foro Intergubernamental sobre Minería, Minerales, Metales y Desarrollo Sostenible (IGF, en inglés), una entidad que apoya a los países comprometidos con el aprovechamiento de la minería para garantizar que esta actividad “apoye sus objetivos de desarrollo sostenible”.
El Salvador es el país más endeudado de Centroamérica con el 87 % de su Producto Interno Bruto (PIB) comprometido. En su discurso de toma de posesión, el 1 de junio pasado, Bukele dijo que impulsar la economía sería su siguiente paso.