Hundreds of parishioners, religious figures, and students gathered on Saturday night (11.16.2024) to mark the 35th anniversary of the massacre of six Jesuit priests and two women in 1989 during the Salvadoran civil war (1980-1992). This commemoration coincides with the preliminary hearing in El Salvador against those accused of being the intellectual authors of this crime against humanity.
Dressed in shirts with religious messages, holding palm leaves adorned with flowers, and displaying the faces of the Jesuits—five of whom were Spanish—on cards or banners, attendees walked across the campus of the Universidad Centroamericana (UCA). Candles in each participant’s hands traced the path of the traditional “procession of the lanterns” through the internal streets of the university, where the so-called Martyrs of the UCA went about their daily lives.
“Even after 35 years (since the massacre), their legacy remains relevant to us,” Omar Serrano, Vice-Rector of Social Outreach of the UCA, told the EFE agency. He recalled that “they were brave men who dared to speak the truth in difficult times, who defended the humble, worked for human rights, and advocated for peace” while the country was embroiled in civil war.
“35 years after the martyrial death of our brothers, and so many other generous and innocent victims, we must evaluate if their spilled blood helps us to be more generous, more courageous, and ultimately more Christian,” said Jesuit José María Tojeira during the homily honoring the martyrs. “We are tasked with sowing amidst the hatred on social media, the propaganda presented as truth. We must be honest, even if we are disliked, and seek truth amidst corruption, rejection of solidarity, and the refusal of transparency,” he added.
The Jesuit Massacre in the Salvadoran Courts
This commemoration is marked by the recent preliminary hearing against 11 individuals, accused of being the intellectual authors of this crime, including former President Alfredo Cristiani (1989-1994) and former lawmaker Rodolfo Parker.
The hearing is expected to conclude in the coming days, determining whether the process will advance to trial. The defendants in this case, besides Cristiani and Parker, include retired military personnel Juan Rafael Bustillo, Juan Orlando Zepeda, Rafael Humberto Larios, Carlos Camilo Hernández, Nelson Iván López, Joaquín Arnoldo Cerna, Inocente Orlando Montano, Óscar Alberto León Linares, and Manuel Antonio Ermenegildo Rivas Mejía.
The victims were the Spaniards Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín-Baró, Amando López, and Juan Ramón Moreno, and Salvadoran Joaquín López, along with UCA worker Elba and her 16-year-old daughter, Celina Ramos, both Salvadorans.
The crime was committed in the early hours of November 16, 1989, five days after the then-rebel group Farabundo Martí National Liberation Front (FMLN) launched the offensive “Hasta el tope” in San Salvador, when an elite Salvadoran Army unit took the lives of the Jesuits.
For this crime, only Colonel Guillermo Benavides is imprisoned in El Salvador, sentenced to 30 years in prison in 1991 for conveying the order to assassinate the Jesuits. His pardon and sentence commutation have been denied since it is considered a crime against humanity.
DW: https://www.dw.com/es/el-salvador-conmemoran-masacre-de-los-mártires-de-la-uca/a-70803054
El Salvador: conmemoran masacre de los ‘Mártires de la UCA’
Cientos de feligreses, personas religiosas y estudiantes conmemoraron la noche del sábado (16.11.2024) el 35 aniversario de la masacre de seis sacerdotes jesuitas y dos mujeres en 1989 en la guerra civil salvadoreña (1980-1992), mientras en El Salvador se desarrolla la audiencia preliminar contra los acusados de la autoría intelectual de este crimen de lesa humanidad.
Ataviados con camisas con mensajes religiosos, portando palmas adornadas con flores y los rostros de los jesuitas, cinco de ellos españoles, en estampas o pancartas, las personas asistentes recorrieron el campus de la Universidad Centroamericana (UCA). Las velas en las manos de cada participante fueron marcando un camino de la tradicional “procesión de los farolitos” por las calles internas del centro de estudios, en el que hacían su vida diaria los llamados Mártires de la UCA.
“Son 35 años (de la masacre) y, para nosotros, su legado sigue teniendo vigencia”, declaró a la agencia EFE Omar Serrano, vicerrector de Proyección Social de la UCA. Recordó que “fueron hombres valientes que se atrevieron a decir la verdad en tiempos difíciles, que defendieron al humilde, trabajaron por los derechos humanos y promulgaban la paz” mientras el país se encontraba en guerra civil.
“35 años después de la muerte martirial de nuestros hermanos, y de tanta víctima tan generosa como inocente, debemos evaluar si su sangre derramada nos ayuda a ser más generosos, más valientes y, en definitiva, más cristianos”, dijo por su parte el jesuita José María Tojeira durante la homilía en honor a los mártires. “Nos toca sembrar en medio del odio en las redes, de la propaganda presentada como verdad. Debemos ser honestos, aunque caigamos mal, y buscar verdad en medio de la corrupción, del rechazo a la solidaridad y de la negativa a la transparencia”, agregó.
La masacre de los jesuitas en las cortes salvadoreñas
Esta conmemoración se ve marcada por la realización en los días previos de la audiencia preliminar contra 11 personas, señaladas de ser autores intelectuales de este crimen, entre ellos el expresidente Alfredo Cristiani (1989-1994) y el exdiputado Rodolfo Parker.
Se prevé que la audiencia concluya en los próximos días y se conozca si el proceso avanza o no a juicio. Los imputados en este caso son -además de Cristiani y Parker- los militares retirados Juan Rafael Bustillo, Juan Orlando Zepeda, Rafael Humberto Larios, Carlos Camilo Hernández, Nelson Iván López, Joaquín Arnoldo Cerna, Inocente Orlando Montano, Óscar Alberto León Linares y Manuel Antonio Ermenegildo Rivas Mejía.
Las víctimas fueron los españoles Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín-Baró, Amando López y Juan Ramón Moreno y el salvadoreño Joaquín López, la trabajadora de la UCA Elba y su hija de 16 años, Celina Ramos, ambas salvadoreñas.
El crimen se perpetró la madrugada del 16 de noviembre de 1989, cinco días después de que la entonces guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) lanzara la ofensiva Hasta el tope en San Salvador, cuando un comando de élite del Ejército salvadoreño segó la vida de los jesuitas.
Por este crimen únicamente está encarcelado en El Salvador el coronel Guillermo Benavides, condenado a 30 años de prisión en 1991 por trasladar la orden de asesinar a los jesuitas y a quien se le ha negado el indulto y conmutación de la pena por ser un crimen de lesa humanidad.
DW: https://www.dw.com/es/el-salvador-conmemoran-masacre-de-los-mártires-de-la-uca/a-70803054