Summary:
- With secrecy, Salvadoran authorities carried out exhumations in a clandestine grave where members of Barrio 18 buried their victims.
- Organizations and families claim that public institutions refuse to provide information on missing persons.
- Experts estimate that there are around 51 clandestine graves throughout the country.
Dozens of family members and friends buried Óscar Alexis Arévalo, a 19-year-old at the time of his disappearance, who was recently found in a clandestine grave discovered in the Cumbres San Bartolo residential area, a territory controlled by the Barrio 18 gang.
During the funeral, some attendees wore T-shirts with the young man’s photograph and the phrase “We love you Oscarito,” while others carried posters they had used in previous search efforts years ago.
“Thank God I have him here. Now I can let him go, I won’t cry for him anymore so he can be at peace,” said his mother María Elisa Rauda standing beside the white coffin surrounded by flowers and photographs.
According to his family, Arévalo was a construction worker’s assistant who disappeared on January 7, 2022, in Tonacatepeque, north of San Salvador. Since then, his family initiated a search process to find his whereabouts.
In early October, it was revealed that the Fiscalía General (Office of the Attorney General) was leading some exhumation work in a clandestine grave located near the Cumbres de San Bartolo residential area. However, no institution provided official information about the procedure.
Infodemia verified that a group of people in uniforms similar to those worn by prisoners on trust phase were carrying out extraction and cleaning operations, while police officers guarded the entrances to the site and placed yellow “do not cross” tape.
Weeks later, the Fiscalía confirmed that Arévalo’s remains were exhumed on September 24 in the sector’s grave. Subsequently, the young man’s remains were taken to the Instituto de Medicina Legal (Institute of Legal Medicine) for analysis.
“(The mother) has been a partner who fought for an investigation into that cemetery, that grave, and there we suspect there are other young people killed by gangs,” Idalia Zepeda of the Asociación Salvadoreña para los Derechos Humanos (ASDEHU) (Salvadoran Human Rights Association) told Infodemia.
Óscar Alexis, who would now be 22 years old, was buried in the Tonacatepeque cemetery.
Government Keeps Information Classified
Arévalo’s case has reopened the debate about the lack of information related to security issues, homicides, missing persons, and discoveries in clandestine graves and cemeteries, as the government wishes to maintain a favorable image of the country.
“The right to access public information is being blocked, and it seems to me that evidently this has propaganda strategy purposes, but also aims to conceal possible crimes of human rights violations and corruption,” the lawyer David Morales from the organization Cristosal told Infodemia.
A group of relatives of missing persons, grouped in the Bloque de Búsqueda (Search Block), denounce that they frequently visit public institutions to learn about the progress of investigations, but are often not attended or evade giving them information about their cases.
Infodemia requested statistics on missing persons reports between 2022 and 2024 from the information access units of the National Civil Police (PNC) and the Ministry of Justice and Security, but the request was denied.
The Ministry of Justice and Security responded that “the information you request is produced, generated and managed by the Fiscalía General de la República.”
The Secretary-General of the Movimiento de Trabajadores de la Policía (MTP) (Police Workers Movement), Marvin Reyes, stated that authorities have located about 51 clandestine graves, but authorities have not carried out victim recovery efforts.
“Those details are with the Fiscalía, with exact locations where they are found, and they haven’t worked on them, as the Fiscalía argues they do not have enough budget to carry out this task nor the technical personnel to perform the excavations,” commented Reyes.
Sepultan a joven encontrado en fosa clandestina; gobierno mantiene reserva sobre desaparecidos
Resumen:
- Con hermetismo, autoridades salvadoreñas realizaron exhumaciones en una fosa clandestina donde integrantes del Barrio 18 sepultaban a sus víctimas.
- Organizaciones y familiares sostienen que las Instituciones públicas se niegan a brindar información de las personas desaparecidas.
- Expertos estiman que hay alrededor de 51 fosas clandestinas en todo el país.
Decenas de familiares y amigos sepultaron a Óscar Alexis Arévalo, un joven de 19 años al momento de su desaparición y que fue encontrado recientemente en una fosa clandestina descubierta en la residencial Cumbres San Bartolo, un territorio controlado por la pandilla Barrio 18.
Durante el acto fúnebre, algunos asistentes vistieron camisetas con la fotografía del joven y la leyenda “Te amamos Oscarito”, mientras que otros llevaban los carteles que utilizaron durante las jornadas de búsqueda en años atrás.
“Gracias a Dios que aquí lo tengo. Ahora sí lo dejo ir, ya no lo voy a estar llorando para que él esté tranquilo”, dijo su madre María Elisa Rauda parada a un costado del ataúd de color blanco que estaba rodeado de flores y fotografías.
Según su familia, Arévalo era un ayudante de albañil que desapareció el 7 de enero de 2022 en Tonacatepeque, al norte de San Salvador. Desde entonces, sus familiares iniciaron un proceso de búsqueda para dar con su paradero.
A inicios de octubre, trascendió que la Fiscalía General lideraba unos trabajos de exhumación en una fosa clandestina localizada en la ribera de un afluente cercano a la zona residencial Cumbres de San Bartolo. Sin embargo, ninguna institución dio información oficial sobre el procedimiento.
Infodemia constató que un grupo de personas con uniformes similares a los de los reos en fase de confianza realizaban trabajos de extracción y limpieza, mientras que policías custodiaban los accesos al lugar y colocaron cintas amarillas de “no pasar”.
Semanas después, la fiscalía confirmó que los restos de Arévalo fueron exhumados el 24 de septiembre en la fosa del sector. Posteriormente, los restos del cuerpo del joven fueron llevados al Instituto de Medicina Legal donde le realizaron los análisis.
“(La madre) ha sido una compañera que ha luchado porque puedan investigar ese cementerio, esa fosa, y ahí tenemos sospechas que hay otros jóvenes asesinados por pandillas”, dijo a Infodemia Idalia Zepeda de la Asociación Salvadoreña para los Derechos Humanos (ASDEHU).
Óscar Alexis, que ahora tendría 22 años de edad, fue sepultado en el cementerio de Tonacatepeque.
Gobierno mantiene reserva de información
El caso de Arévalo ha reabierto el debate sobre la falta de información relacionada con temas de seguridad, homicidios, desaparecidos y descubrimientos en fosas y cementerios clandestinos, ya que el gobierno desea mantener una imagen favorable del país.
“El derecho de acceso a la información pública está siendo bloqueado, y a mí me parece que evidentemente esto tiene fines de estrategia de propaganda, pero también fines de ocultamiento de posibles delitos de violaciones a derechos humanos y corrupción”, dijo a Infodemia el abogado David Morales de la organización Cristosal.
Un grupo de familiares de personas desaparecidas, agrupadas en el Bloque de Búsqueda, denuncian que peregrinan con frecuencia por instituciones públicas para conocer el avance de las investigaciones, pero a menudo no son atendidos o evaden darles información sobre sus casos.
Infodemia solicitó a las unidades de acceso de información de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ministerio de Justicia y Seguridad las estadísticas de denuncias de personas desaparecidas entre 2022 y 2024, pero la petición fue denegada.
El ministerio de Justicia y Seguridad respondió que “la información que solicita es producida, generada y administrada por la Fiscalía General de la República”.
El Secretario General del Movimiento de Trabajadores de la Policía (MTP), Marvin Reyes afirmó que las autoridades en el país se han ubicado unas 51 fosas clandestinas, pero que las autoridades no han realizado trabajos de recuperación de víctimas.
“Esos detalles, los tiene la Fiscalía con ubicación exacta donde se encuentran, y no los han trabajado, ya que la Fiscalía argumenta no tener suficiente presupuesto para realizar esta tarea y tampoco tienen el personal técnico para hacer las excavaciones”, comentó Reyes.