On September 15, the news portal Infobae published a report revealing a series of conversations among high-ranking officials in Nayib Bukele’s government about acts of corruption by people close to power, and how to spy on political opponents and journalists.
The article, written by Salvadoran journalist Héctor Silva Ávalos (specialized in corruption issues), details how Muyshondt (who held a key position in security at Capres) met with Ernesto Castro (then private secretary of the Presidency, and now the president of the Legislative Assembly) to discuss two officials, one in the government and the other in Congress, accused of corruption and ties to drug trafficking.
In these conversations, according to the outlet, Muyshondt indicated that the head of the Salvadoran prison system, along with his mother, were involved in a corruption scheme.
“In ASOCAMBIO there’s a big mess, tiger. Uncontrolled theft… And the Prosecutor’s Office is putting together a file on this. Osiris’s (Luna) mother began assembling certain groups of suppliers, and there’s always a commission involved… (The prosecutors) have conversations, they have a lot of things that the Prosecutor’s Office could consider. They started amassing money out of nowhere…” the security chief reportedly told Castro, according to the publication.
Infobae reported that it has eight hours of recordings of conversations between Muyshondt and his interlocutors. These communications began in 2020, a year after Bukele’s government was established. It was Muyshondt’s habit to record all these conversations.
Muyshondt also shared with high-ranking government officials his concerns about Guillermo Gallegos, then a lawmaker, due to his closeness to the ruling party and possible ties to drug trafficking networks.
In the discussions, Muyshondt pointed out that investigations are underway in the United States against the aforementioned lawmaker.
Before these allegations became public, he first reported these irregularities within the government and then to local and foreign investigators.
Espionage Office
According to the publication, in August 2020, Muyshondt was tasked with setting up a political espionage office to monitor “persons of interest,” including allies, opponents, and journalists.
In the project named Project C815, they agreed to intercept the communications of Carlos Dada, director of El Faro, and Jorge Beltrán, a journalist for El Diario de Hoy specializing in security and corruption issues.
“The first step will be to try and access the electronic devices and email accounts of the subjects of interest through a method known as ‘phishing,’ which involves sending deceptive links to gain access to their information unknowingly,” one of the operation’s leaders reportedly said in that meeting.
Years later, it emerged that the phones of journalists were intercepted using more sophisticated software called Pegasus.
The Downfall of a Key Player
By late July 2023, Muyshondt began revealing information about alleged acts of corruption involving a Nuevas Ideas lawmaker and a high-ranking Capres official responsible for the press area.
However, in early August 2023, the security advisor was arrested, accused of treason and leaking confidential information to former President Mauricio Funes. Since then, there has been no information about him.
Infobae reports that Muyshondt was initially detained in police facilities near the former eastern bus terminal in San Salvador. He was then taken to the Psychiatric Hospital and ended up at Saldaña Hospital in Los Planes de Renderos.
During his detention in police custody, the news portal continues, he was visited by a sub-inspector linked to intelligence work, accused of abuses and close to Castro, identified by the code name “chirriplín.”
By November 2023, Muyshondt’s health condition had become complicated. Doctors reported he suffered from hypertension, mitral valve tumor (heart), suspected cardio infection, and thromboembolic stroke.
Finally, after a short and grim imprisonment, Muyshondt died in February 2024.
Reportaje revela conspiraciones previas a la detención, desaparición y muerte de Alejandro Muyshondt
El portal de noticias Infobae publicó este 15 de septiembre un reportaje en el que revela una serie de conversaciones entre altos funcionarios del Gobierno de Nayib Bukele acerca de actos de corrupción de personas allegadas al poder, y como espiar a opositores políticos y a periodistas.
El artículo, elaborado por el periodista salvadoreño Héctor Silva Ávalos (especializado en temas de corrupción), detalla como Muyshondt (con un puesto clave en materia de seguridad en Capres) se reúne con Ernesto Castro (entonces secretario privado de la Presidencia, y hoy presidente de la Asamblea Legislativa) para conversar acerca de dos funcionarios, uno en el gobierno y otro en el congreso, señalados de corrupción y vínculos con el narcotráfico.
En esas conversaciones, según ese medio, Muyshondt señala que el responsable del sistema carcelario salvadoreño, junto a su madre, están implicados en una trama de corrupción.
“En ASOCAMBIO hay un gran desvergue (desorden), tigre. Hueveyo de a galán (robo descontrolado) … Y en la Fiscalía están armando un expediente de esa mierda. La mamá de Osiris (Luna) empezó a ensamblar ciertos grupos de proveedores y siempre hay una comisión (de dinero) de por medio… (Los fiscales) tienen conversaciones, tienen un montón de cosas que la Fiscalía pudiera tomar en cuenta. Se empezaron a hacer de la nada un vergo de pisto (dinero)…”, le habría dicho el responsable de seguridad a Castro, de acuerdo a la publicación.
Infobae ha informado que tiene en su poder ocho horas de grabaciones de conversaciones entre Muyshondt y sus interlocutores. Estas comunicaciones ocurrieron a partir de 2020, un año después de instalado el gobierno de Bukele. El asesor tenía como costumbre grabar todas esas conversaciones.
Muyshondt también trasladó a altos funcionarios de Gobierno su preocupación acerca de Guillermo Gallegos, entonces diputado, por su cercanía con el oficialismo y sus posibles vínculos con redes de narcotráfico.
En las plática, Muyshondt les hace ver que en los Estados Unidos están abiertas investigaciones contra el diputado señalado.
Antes de que se conocieran de manera pública esos señalamientos, denunció primero al interior del gobierno esas irregularidades y, luego, a investigadores locales y extranjeros.
Oficina de espionaje
Según la publicación, en agosto de 2020, a Muyshondt le fue encomendado montar una oficina de espionaje político para dar seguimiento a “personas de interés”, que incluye aliados, opositores y periodistas.
En el proyecto demominado Proyecto C815, acuerdan intervenir las comunicaciones de Carlos Dada, director de El Faro, y de Jorge Beltrán, periodista de El Diario de Hoy y especializado en temas de seguridad y corrupción.
“…El primer paso será intentar ingresar a los dispositivos electrónicos y cuentas de correo de los sujetos de interés a través de un método conocido como “phishing”, que consiste en enviar enlaces engañosos para que quien los abra dé acceso, sin quererlo, a su información”, habría dicho uno de los responsables de la operación en esa reunión.
Años después, trascendió que teléfonos de periodistas estaban intervenidos con una software más sofisticado llamado Pegasus.
El ocaso de una pieza clave
A finales de julio de 2023, Muyshondt comenzó a revelar información acerca de supuestos actos de corrupción de un diputado de Nuevas Ideas y de un alto funcionario de Capres, responsable del área de prensa.
Sin embargo, a principios de agosto de 2023 el asesor de seguridad fue detenido, acusado de traición y de filtrar información confidencial al expresidente de la República, Mauricio Funes. Desde entonces, ya no se supo nada de él.
Infobae reporta que Muyshondt estuvo detenido en un inicio en unas instalaciones policiales cercanas a la ex terminal de buses de oriente en San Salvador. Luego fue llevado al hospital Psiquiátrico y terminó en el hispital Saldaña en los Planes de Renderos.
En su reclusión en las bartolinas policiales, prosigue el portal de noticias, recibió la visita de un subinspector ligado a labores de inteligencia, señalado de abusos y cercano a Castro; es identificado en el indicativo “chirriplín”.
Para noviembre de 2023, el estado de salud de Muyshondt ya es complicado. Los médicos reportan que padece de hipertensión arterial, tumor valvular mitral (corazón), sospecha de cardio infección y accidente cerebrovascular tromboembólico.
Finalmente, y luego de un corto y escabroso encarcelamiento, Muyshondt falleció en febrero de 2024.