The funds that the Legislative Assembly assigned to the Ministry of Finance to execute supposed digital divide reduction projects are no longer available for this purpose, according to the updated budget execution data available on the Fiscal Transparency portal for the month of July.
These funds, amounting to $20.6 million, came from the distribution approved by the Assembly of the budget that belonged to INSAFORP and was divided into three parts after the institute’s liquidation was approved.
However, according to the Fiscal Transparency budget execution records, by July, the Treasury only had $59,140 available in this budgetary unit. This wasn’t because funds were disbursed, but because the allocation to it has been steadily cut back.
Timeline
In January of this year, the Assembly approved the budgets for the Instituto Nacional de Capacitación y Formación (INCAF) (National Training and Development Institute) and the Dirección de Integración (Integration Directorate). Both received a share of the budget that originally belonged to the Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP) (Salvadoran Vocational Training Institute), totaling $64.7 million.
From this amount: $20.6 million was allocated to the Dirección de Integración, $23.4 million to the INCAF; and $20.6 million was left with the Ministry of Finance.
When this distribution was approved, Carlos Gustavo Salazar, the ministry’s Director General of Budgets, explained that the funds remaining with the Treasury would be available for the execution of digital divide reduction projects by any ministry.
“It will enter the general fund and will be directed towards covering expenses to bridge the digital divide, through equipment acquisition, curriculum development, and provision of training in technological skills,” Salazar stated during his visit to the finance committee on January 24.
“Any ministry, any institution that wants to develop programs aimed at closing the digital divide, there will be a special fund there in the Ministry of Finance that can be used for these purposes.”
—Carlos Gustavo Salazar, General Director of Budget, Ministry of Finance
To locate the funds, a new budgetary unit 24 was created in the Ministry of Finance, named “Financing of Digital Divide Reduction Programs and Projects 2024”, and it was allocated $20,659,055.
The budget reform for distributing the INSAFORP funds was approved by the ruling party in the Assembly in a plenary session on January 31, 2024. Then, the decree was sanctioned by Claudia Juana Rodríguez, acting as head of the presidential office, the following day on February 1, and was published in the Diario Oficial on February 2.
However, despite being offered, approved, and sanctioned, the allocation to the Ministry of Finance did not fully enter the created unit.
According to budget execution records from Fiscal Transparency, in February, the unit in question had an allocation of $17.1 million. Thus, from the outset, the Treasury cut $3.5 million to assign it to another budgetary unit, which cannot be identified because that month, three budgetary units received additional allocations.
And that cut wasn’t the only one. In the following months, the allocation recorded in Fiscal Transparency reports for the unit has been progressively reduced.
In March, the unit appeared with $9.1 million allocated. In April, $8.1 million. In May, $7.1 million. In June, it appeared at zero. In July, the last report assigns it $59,140.
This publication sought a consultation session with the Ministry of Finance’s communications team to delve into the funds’ usage and to clarify to which budgetary units the funds from the INSAFORP budget were redirected. However, by the time of this report’s completion, there was no response from the State’s department.
Three economists, one of whom requested anonymity, viewed the ministry’s actions concerning these funds as lacking transparency, compounded by the fact that the funds had not been spent as promised and approved for the stated objectives.
“The use has been diverted. It has been allocated in other areas, and since it’s a movement within the same Treasury department, it’s unclear where it ended up. What is clear is that since it’s a payroll deduction for workers, it has turned into a tax because it’s used for Treasury purposes.”
—Rafael Lemus, Economist
Another economist also noted that the allocation approved in January didn’t mean having $20 million immediately available, but rather that was the amount expected to come in throughout the year from contributions, and this should have been spread over 11 months for execution. Which did not happen.
“The reality is that we can’t know exactly what they did. But what we can say is that the budget reform isn’t reflected in the July budget execution. Nothing has been disbursed.”
—Tatiana Marroquín, Economist
Fondos de INSAFORP que quedaron en ministerio de Hacienda ya no aparecen en el presupuesto
Los fondos que la Asamblea Legislativa asignó al ministerio de Hacienda para ejecutar supuestos proyectos de reducción de brecha digital ya no están disponibles para dicho fin, según la actualización de la ejecución presupuestaria disponible en el portal de Transparencia Fiscal correspondientes al mes de julio.
Dichos fondos, que ascendían a $20.6 millones provenían de la distribución que la Asamblea aprobó del presupuesto que pertenecía al INSAFORP, y que se repartió a tres manos, tras la aprobación de la liquidación del instituto.
Sin embargo, en los registros de ejecución presupuestaria de Transparencia Fiscal, hasta julio, Hacienda solo tenía $59,140 disponibles en dicha unidad presupuestaria. Y no porque hubiera fondos devengados, sino porque se ha ido recortando la asignación a la misma.
Cronología
En enero de este año, la Asamblea aprobó los presupuestos del Instituto Nacional de Capacitación y Formación (INCAF) y de la Dirección de Integración. Ambos se repartieron el pastel que originalmente pertenecía al Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP) y que ascendía a $64.7 millones.
De ese monto: $20.6 millones se asignaron a la Dirección de Integración, $23.4 millones se asignaron al INCAF; y $20.6 millones se dejaron en Hacienda.
Cuando se aprobó dicha distribución, Carlos Gustavo Salazar, director general de Presupuestos, del ministerio, explicó que los fondos que quedarían en Hacienda estarían disponibles para ejecución de proyectos de reducción de brecha digital de cualquier ministerio.
“Va a ingresar al fondo general y se orientará para cubrir gastos para cerrar la brecha digital, mediante la adquisición de equipamiento, desarrollo de currícula y provisión de entrenamiento en habilidades tecnológicas”, indicó Salazar, en su visita a la comisión de hacienda, el 24 de enero.
“Cualquier ministerio, cualquier institución que quiera desarrollar programas orientados a cerrar la brecha digital, habrá un fondo especial ahí en el ministerio de Hacienda que podrá ser utilizado para estos fines”.
— Carlos Gustavo Salazar, director general Presupuesto Ministerio de Hacienda
Para poder ubicar los fondos, en el ministerio de Hacienda se creó la unidad presupuestaria 24, denominada “Financiamiento de Programas y Proyectos de Reducción de Brecha Digital 2024” y se le asignaron $20,659,055.
La reforma presupuestaria para distribuir los fondos del INSAFORP fue aprobada por el oficialismo en la Asamblea en plenaria del 31 de enero de 2024. Luego, el decreto fue sancionado por parte de Claudia Juana Rodríguez, como encargada del despacho de la presidencia, al siguiente día, el 1 de febrero; y se publicó en eel Diario Oficial del 2 de febrero.
Sin embargo, pese a lo ofrecido, aprobado y sancionado, la asignación al ministerio de Hacienda ni siquiera ingresó íntegra a la unidad creada.
Según los registros de ejecución presupuestaria de Transparencia Fiscal, en febrero, la unidad en cuestión tuvo una asignación de $17.1 millones. Así, de entrada, Hacienda le recortó $3.5 millones que asignó a otra unidad presupuestaria, sin que pueda identificarse cuál, debido a que ese mes hubo tres unidades presupuestarias que tuvieron refuerzos en sus asignaciones.
Y ese recorte no fue el único. En adelante, cada mes, la asignación que los reportes de Transparencia Fiscal han registrado en la unidad han venido en decrecimiento.
Así, en marzo, la unidad aparecía con $9.1 millones asignados. En abril, con $8.1 millones. En mayo, con $7.1 millones. En junio, apareció a cero. Y en julio, el último informe le asigna $59,140.
Este medio gestionó con el equipo de comunicaciones del ministerio de Hacienda un espacio de consulta para poder profundizar en el uso de los fondos en cuestión y tener claridad sobre a qué unidades presupuestarias se redigieron los fondos que provenían del presupuesto que devengaría el INSAFORP. Sin embargo, hasta el cierre de esta nota, no había ninguna respuesta de parte de la cartera de Estado.
Tres economistas, uno de ellos bajo condición de anonimato, consideraron poco transparente el actuar del ministerio en relación a esos fondos, aunado al hecho de que no se ha devengado en lo que se prometió y aprobó como objetivo.
“Se ha desviado el uso. Se ha asignado en otras áreas, que como es un movimiento dentro de la misma cartera de Hacienda, no se sabe dónde ha ido a parar. Lo que sí es que como es un descuento a la planilla de trabajadores, se ha convertido en un impuesto porque se usa para fines de Hacienda”.
— Rafael Lemus, economista
Otro economista señaló también que la asignación aprobada en enero no significaba tener $20 millones disponibles de inmediato, sino que esa era la cantidad que ingresaría en el año por la contribución y esta se debía repartir en 11 meses para su ejecución. Lo que no sucedió.
“La verdad es que no podemos saber exactamente qué hicieron. Pero lo que sí podemos decir es que la reforma presupuestaria no se refleja en la ejecución presupuestaria de julio. No se ha devengado nada”.
— Tatiana Marroquín, economista