Describing it as a “squandering of public funds,” the Movimiento de Trabajadores Despedidos (MTD) reacted to the leak of personal data of 974,428 Salvadorans contributing to the Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), which also reveals officials’ salaries.
According to spokesperson Héctor Rodríguez, the salary information of officials, their advisors, and other state workers should be public. However, the current administration’s policy is to keep it hidden, which could lead to corruption.
“There is no actual saving; instead, we have salaries averaging $2,000 and up. There is a squandering of public funds without benefits reaching the popular sectors; 5,000 schools remain unrepaired in this country, yet they purchased a helicopter,” he stated.
The database contains 974,428 records showing each citizen registered with the ISSS, their employer, their salary, their unique identity document number (DUI), their registered address, and in some cases, their tax identification number (NIT).
Regarding this, Rodríguez mentioned, “What has been exposed in this government are salary lists that have increased instead of decreased. We already said they fired 21,000, but they rehired another 21,000, and additionally, in March, they increased the payroll by 24,000.”
“There is a significant regression in access to public information. In the first five years of this government, there is a serious setback, and now it’s getting worse. What the hackers have done by exposing public information that should be public. We had all the information on public employees’ salaries along with their advisors, but now the regime is concealing information as there are signs of corruption,” he added.
He emphasized that one of the measures following recent leaks in various state departments has been to seek “a scapegoat by finding those responsible for the information leak.”
Rodríguez highlighted that a lot of public money is being spent on high salaries, in contrast to the 165 closed cultural centers that were beneficial for the youth.
Filtración de salarios de funcionarios revela “despilfarro de fondos públicos”, según movimiento de trabajadores
Como una muestra “del despilfarro de fondos públicos”. Así califica el Movimiento de Trabajadores Despedidos (MTD) la filtración de datos personales de 974,428 salvadoreños que cotizan al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y que expone además los salarios de funcionarios.
Según mencionó su vocero, Héctor Rodríguez, la información del salario de funcionarios, sus asesores y demás trabajadores del Estado debería ser pública, pero la normativa de la actual administración es mantenerlo oculto, lo cual puede generar actos de corrupción.
“No hay un ahorro como tal, sino que tenemos salarios en una media de $2,000 hacia arriba. Hay despilfarro de fondos públicos sin que lleguen beneficios a los sectores populares; 5,000 escuelas están sin repararse en este país, pero compraron un helicóptero”, indicó.
La base de datos contiene 974,428 registros y en ellos se puede ver el nombre de cada ciudadano inscrito al ISSS, su empleador, el salario que percibe, su número de documento único de identidad (DUI), la dirección que tiene registrado ante el Instituto y en algunos casos su número de identificación tributaria (NIT).
Al respecto, Rodríguez mencionó que “lo que ha quedado al descubierto en este Gobierno son planillas de salario que en vez de bajar se han incrementado. Ya decíamos que despidieron 21,000, pero recontrataron otros 21,000 y además, en marzo habían incrementado la planilla en 24,000”.
“Hay un retroceso significativo en materia de acceso a la información pública. En los primeros cinco años de este Gobierno hay un retroceso grave y ahora se va acentuando más. Lo que han hecho los hackers al poner en evidencia información pública que debería ser pública. Tuvimos toda la información de los salarios de empleados públicos con sus asesores, pero ahora el régimen está ocultando información, pues hay indicios de actos de corrupción”, agregó.
Destacó que una de las medidas de las filtraciones recientes en diferentes carteras del Estado, ha sido buscar “el chivo expiatorio al buscar a los culpables de la filtración de la información”.
Rodríguez destacó que se gasta mucho dinero público en salarios altos, en contraste con las 165 casas de la cultura cerradas y que eran de beneficio para los jóvenes.