Salvadoran State Dismisses UN Letter on State of Exception — Estado salvadoreño desestima escrito de la ONU sobre el régimen de excepción

Jul 27, 2024

The representation of El Salvador responded to a UN communication in which six rapporteurs argued that the permanent state of exception is not compatible with international law. — La representación de El Salvador respondió a una comunicación de la ONU en la que seis relatores plantearon que el régimen de excepción permanente no es compatible con el derecho internacional.

The Salvadoran State reminded the United Nations (UN) not to intervene in internal affairs and criticized a letter on serious human rights violations in the state of exception prepared by six rapporteurs, claiming it has serious methodological flaws for using unreliable sources.

On July 8 of this year, UN human rights rapporteurs informed the Salvadoran government that a permanent state of exception is not compatible with international law and expressed their concern about two legislative decrees approved by the Legislative Assembly that allow for mass trials and extend detention periods, which leads to serious human rights violations.

The 57-page response from the Salvadoran State begins with three technical considerations, one of which is the principle of non-interference.

“Thus, respect for state sovereignty implies that decisions on internal matters, such as the maintenance of public order, the administration of justice, and the protection of human rights, must be taken by the Salvadoran authorities themselves without external interference.”

El Salvador’s representation adds that “this approach allows the State to implement policies and reforms in line with local needs and contexts, ensuring that any international assistance or cooperation is carried out with full respect for the country’s will and sovereignty.

Ingrid Escobar, director of Socorro Jurídico Humanitario (Humanitarian Legal Aid), regretted the State’s response because she believes it deviates from respecting the universal framework and emphasized that the country must comply with international pacts and treaties.

“In that sense, they are saying not to interfere with El Salvador, but by doing so they are disregarding international treaties, pacts, agreements, resolutions, and United Nations declarations that El Salvador has committed to respect,” she said.

Justifies Continuation of the Regime

Similarly, the Salvadoran State justified the need to continue with the state of exception, arguing that a significant number of gang members are still at large and many leaders continue to operate underground.

“A significant number of gang members and terrorists are still at large, posing a threat to the country’s security and stability. Intelligence information indicates that many gang leaders continue to operate from hiding, coordinating criminal activities and perpetuating violence,” reads the text sent to the UN.

Despite claiming that, since the implementation of the state of exception in March 2022 and after 28 extensions, more than 80,500 people related to gang activities have been captured, of which 1,201 are high-ranking leaders.

In view of the human rights expert rapporteurs’ claim that “among the large number of detentions carried out under the state of exception in El Salvador, many of them constitute, or could have been classified as arbitrary detentions and, at times, enforced disappearances,” the State felt offended.

“It is reiterated that it is unacceptable to include statements (…) without any support or methodology that even indicates the source of such a statement, which, moreover, includes serious accusations against the State,” they stated.

Regarding the state of exception as a permanent state for more than two years, the Salvadoran State denies that it has been “adopted indefinitely.”

“It is important to reiterate that the Salvadoran State has not ‘indefinitely’ adopted this mechanism of containment against serious disturbances of public order, given that the extensions to the State of Exception that have been adopted to date arise from a precise analysis of the temporal context,” they assured.

Lack of Clarity

Concerning the legislative decrees approved by the Legislative Assembly that allow for mass trials and the extension of detention periods, the State excuses itself that gangs are terrorist groups and therefore cannot be judged as common criminals.

However, the director of Legal Aid explains that the State has not answered the UN’s questions about the suspension of due process guarantees caused by Decree 803 and 804.

“Decree 803 suspends deadlines and 804 disadvantages the defense, so the State is telling the United Nations that it does not have the complete context, but does not explain what context it refers to, only provides vague details,” said Escobar.

Veronica Reyna, a representative of the Servicio Social Pasionista (Passionist Social Service), believes that the State’s response shows an irresponsible position on a basic human rights analysis of the application of the state of exception.

“It is an irresponsible position, in my opinion, of the State, in the face of a basic analysis of the human rights of international treaties to which the State has committed itself, and it seems to question the United Nations systems, on the grounds that they should not interfere in state decisions and question their sources or their technical capacity to assess the reality of the country,” she expressed.

EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/gobierno-salvadoreno-desestima-informe-de-la-onu-sobre-el-regimen-excepcion/1157866/2024/

Estado salvadoreño desestima escrito de la ONU sobre el régimen de excepción

El Estado salvadoreño recordó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) no intervenir en asuntos internos y criticó un escrito sobre las graves violaciones a derechos humanos en el régimen de excepción elaborado por seis relatores, asegurando que tiene serios vacíos metodológicos por utilizar fuentes no confiables. 

El 8 de julio de este año, relatores relacionados a la defensa de los derechos humanos de la ONU expusieron al gobierno salvadoreño, que un régimen de excepción de forma permanente no es compatible con el derecho internacional y mostraron su preocupación por dos decretos legislativos aprobados por la Asamblea Legislativa que permiten juzgamientos masivos y amplían los plazos de detención, lo cual, propicia graves violaciones a derechos humanos. 

La respuesta del Estado salvadoreño que consta de 57 páginas inicia con tres consideraciones técnicas, entre ellas el principio de no injerencia.

“Así, el respeto a la soberanía estatal implica que las decisiones sobre asuntos internos, como el mantenimiento del orden público, la administración de justicia y la protección de los derechos humanos, deben ser tomadas por las propias autoridades salvadoreñas sin interferencia externa” 

La representación de El Salvador agrega que “este enfoque permite al Estado implementar políticas y reformas de acuerdo con las necesidades y contextos locales, garantizando que cualquier asistencia o cooperación internacional se realice en pleno respeto a la voluntad y soberanía del país.

Ingrid Escobar, directora del Socorro Jurídico Humanitario, lamentó la respuesta del Estado porque considera que se sale del respecto al marco universal y enfatizó que el país debe cumplir con pactos y tratados internacionales. 

“En ese sentido están diciendo no se metan con El Salvador, no hagan injerencia en El Salvador, pero con eso lo que hacen es desconocer tratados, pactos, convenios internacionales, resoluciones y declaraciones de Naciones Unidas que El Salvador se ha comprometido a respetar”, manifestó. 

Justifica continuidad del régimen

Asimismo el Estado salvadoreño justificó la necesidad de continuar con el régimen de excepción alegando que un número considerable de pandilleros aún se encuentran en libertad y muchos cabecillas continúan operando en la clandestinidad. 

“Un número considerable de pandilleros y terroristas aún se encuentran en libertad, representando una amenaza para la seguridad y la estabilidad del país. La información de inteligencia indica que muchos líderes pandilleros continúan operando desde la clandestinidad, coordinando actividades delictivas y perpetúan la violencia”, se lee en el escrito enviado a la ONU. 

Pese a asegurar que, desde el inicio de la implementación del régimen de excepción, en marzo de 2022 y luego de 28 prórrogas, han sido capturadas más de 80,500 personas relacionados con actividades pandilleriles, de las cuales 1,201 son cabecillas de alto rango. 

Ante el planteamiento de los relatores especialistas en derechos humanos que “entre el gran número de detenciones realizadas bajo el régimen de excepción en El Salvador muchas de ellas constituyen, o podrían haber llegado sido calificadas como detenciones arbitrarias y, en ocasiones, desapariciones forzadas¨, el Estado se mostró ofendido. 

“Se reitera que es inaceptable que se incluyan afirmaciones (…) sin ningún tipo de soporte o metodología que indique si quiera la fuente de dicha afirmación, que por lo demás incluye acusaciones graves en contra del Estado”, manifestaron. 

Con respecto al régimen de excepción como un estado permanente por más de dos años, el Estado salvadoreño niega que se haya “adoptado de manera indefinida”. 

“Es importante reiterar que el Estado salvadoreño no ha adoptado de “manera indefinida”, este mecanismo de contención a graves perturbaciones de orden público, dado que las prolongaciones al Régimen de Excepción que se han adoptado hasta la fecha, surgen de un análisis preciso del contexto temporal” aseguraron. 

Sin claridad

En cuanto a los decretos legislativos aprobados por la Asamblea Legislativa que permiten juzgamientos masivos y la ampliación de plazos de detención, el Estado se excusa que las pandillas son grupos terroristas y por tanto no pueden ser juzgados como delincuencia común.

Sin embargo, la directora del Socorro Jurídico explica que el Estado no ha respondido a las preguntas de la ONU sobre la suspensión de garantías del debido proceso que provocan el decreto 803 y el 804.

“El 803 suspende plazos y el 804 deja en desventaja la defensa, entonces el Estado le está diciendo a Naciones Unidas que no tiene el contexto completo, pero no le explica cuál es el contexto al que se refiere, solo da detalles vagos”, indicó Escobar. 

Verónica Reyna, representante del Servicio Social Pasionista, considera que la respuesta del Estado muestra una posición irresponsable frente a un análisis básico de derechos humanos sobre la aplicación del régimen de excepción. 

“Es una posición irresponsable, a mi juicio, del Estado,  frente a un análisis básico de los derechos humanos de los tratados internacionales a los que el Estado se ha comprometido y más pareciera que cuestiona a los sistemas de Naciones Unidas, en lógica de que no deberían de interferir en las decisiones estatales y cuestionan su fuentes o su capacidad técnica de realizar la realidad del país”, expresó.

EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/gobierno-salvadoreno-desestima-informe-de-la-onu-sobre-el-regimen-excepcion/1157866/2024/