The University Superior Council (CSU), one of the governing bodies of the University of El Salvador (UES), expressed its concern on Thursday about the new higher education law proposed by the Government to the Legislative Assembly, as it believes that it makes the institution invisible and could also increase the cost of pursuing higher education.
In a statement approved in today’s session, the CSU pointed out that the initiative “completely invisibilizes the name, existence, and spaces within the entities that make up the higher education level, as well as the relevance and contributions of the University of El Salvador, which today is the only public university in the country, with a 183-year history.”
Furthermore, it warned that the proposal “relativizes” the responsibility of the State, established in the Constitution of the Republic, to provide the necessary budget for the operation of the UES.
Article 12 of the initiative, which arrived on May 15th at the Assembly, conditions the budget allocation of state higher education institutions to “the availability of State resources.” In the current law, what is stated in Article 61 of the Constitution is reproduced, and the budget allocation is an obligation.
In this regard, the CSU also expressed concern that the proposal imposes “changes and demands” on higher education institutions and, in the case of the UES, “without the State’s commitment to finance the costs of its implementation.”
In the opinion of the Superior Council, this situation could put at risk the free education at the UES, which was implemented in 2018 for high school graduates from public institutions and later extended in 2021 to graduates from the private sector.
“We express our deep concern that the changes and demands proposed without the State’s commitment to finance the costs of their implementation in the University of El Salvador may reverse the right to free higher education that this institution has achieved with great effort,” said the CSU.
However, the council also considered that this could lead private higher education institutions to “substantially increase the costs of the public higher education service they provide, further compromising the right to education (…), making higher education and access to postgraduate studies more elitist.”
The change proposed by the Executive on the budget allocation of state higher education institutions comes amid a financial crisis that has affected the UES, as since 2022 it has stopped transferring millions of dollars for operation. Currently, the debt amounts to $49 million, and the university has been forced to suspend academic programs, scholarships, and limit its purchases to the essentials to continue operating.
According to official data up to 2022, the UES is the university with the highest number of enrolled students, with 60,415 registered for that year. This represented 32% of the total enrolled students, meaning 1 in 3 studied at the state university.
In this regard, in its statement, the CSU requested that the new higher education law respect university autonomy and the State’s obligation to provide the necessary resources for the operation of the UES, as established in Article 61 of the Constitution.
Moreover, it asked lawmakers to “conduct a thorough and serious study” of the proposal, also submitting it to a consultation process with different sectors and specifically listening to the UES’s position on the matter.
Consejo Superior UES: ley propuesta por el Gobierno podría elevar costo de educación superior
El Consejo Superior Universitario (CSU), uno de los órganos de gobierno de la Universidad de El Salvador (UES), expresó este jueves su preocupación por la nueva ley de educación superior que ha propuesto el Gobierno a la Asamblea Legislativa, por considerar que invisibiliza a la institución y puede además encarecer el costo de cursar estudios superiores.
En un pronunciamiento aprobado en la sesión de hoy, el CSU señaló que la iniciativa “invisibiliza totalmente el nombre, la existencia y los espacios dentro de las entidades que integran el nivel de educación superior, así como la relevancia y aportes de la Universidad de El Salvador, que hoy por hoy es la única universidad pública del país, con una trayectoria de 183 años”.
Además, advirtió que la propuesta “relativiza” la responsabilidad del Estado, establecida en la Constitución de la República, de proveer el presupuesto necesario para el funcionamiento de la UES.
El artículo 12 de la iniciativa, que llegó el 15 de mayo a la Asamblea, condiciona la asignación presupuestaria de las instituciones estatales de educación superior a “las disponibilidades de recursos del Estado”. En la ley vigente se reproduce lo establecido en el artículo 61 de la Constitución y la asignación presupuestaria es una obligación.
En ese sentido, el CSU también expresó preocupación porque la propuesta impone “cambios y exigencias” a las instituciones de educación superior y, en el caso de la UES, “sin el compromiso del Estado de financiar los costos de su aplicación”.
A juicio del Consejo Superior, esta situación pondría en riesgo la gratuidad de la educación en la UES, que se implementó en 2018 con los bachilleres provenientes de instituciones públicas y luego se amplió en 2021 a los bachilleres del sector privado.
“Expresamos nuestra profunda preocupación de que los cambios y exigencias planteados sin el compromiso del Estado de financiar los costos de su aplicación en la Universidad de El Salvador reviertan el derecho a la educación superior gratuita que esta institución ha conseguido con gran esfuerzo”, dijo el CSU.
Pero el consejo también consideró que esto podría llevar a que las instituciones privadas de educación superior incrementen “sustancialmente los costos del servicio público de educación superior que prestan, vulnerando aun más el derecho a la educación (…), volviendo más elitista la educación superior y el acceso a posgrados”.
El cambio que propone el Ejecutivo sobre la asignación presupuestaria de las instituciones estatales de educación superior ocurre en medio de una crisis financiera que ha provocado en la UES, debido a que desde 2022 ha dejado de transferirle millones de dólares para funcionamiento. Actualmente la deuda asciende a $49 millones y la universidad se ha visto obligada a suspender programas académicos, becas y limitar sus compras a lo más esencial para seguir operando.
Según datos oficiales hasta 2022, la UES es la universidad con la mayor cantidad de estudiantes inscritos, con 60,415 matriculados para ese año. Esto representó el 32 % del total de inscritos, es decir, 1 de cada 3 estudiaba en la universidad estatal.
En ese sentido, en su pronunciamiento, el CSU pidió que la nueva ley de educación superior respete la autonomía universitaria y la obligación del Estado de proveer los recursos necesarios para el funcionamiento de la UES, como lo establece el artículo 61 de la Constitución.
Además, pidió a los diputados que “realicen un estudio profundo y serio” de la propuesta, sometiéndola además a un proceso de consulta con diferentes sectores y que en especial se escuche la postura de la UES al respecto.