In summary:
- Hundreds of adults, children, and teenagers claim to have left the country for security reasons.
- Human rights organizations report displacement and migration due to harassment by state security forces.
- Economic reasons and family reunification remain the main causes of migration, even before the implementation of the state of emergency.
Hundreds of Salvadorans continue to migrate irregularly from the country despite improvements in security and a reduction in homicides, according to official figures collected by the International Organization for Migration (IOM).
According to the United Nations agency, between January and December 2023, 13,357 deportations were recorded in El Salvador, mostly from the United States and Mexico.
During their interviews with migration officials about the reasons for their migration, 8.1% of adults and 7.8% of children and adolescents said they left the country for security reasons. According to official data, 2023 marked 8 consecutive years of decreases in homicide figures.
The number of homicides in El Salvador decreased by 68.8% during 2023, according to official statistics. Authorities reported that 154 murders were committed last year, compared to 495 the previous year.
The figures do not include gang casualties, the recovery of human remains in clandestine graves and cemeteries, and deaths of people in state custody since President Bukele’s administration manipulated the way these figures are counted and excluded data. However, economic factors remain the main reason for leaving the country, with 75.1% of adults, 69.8% of children and adolescents (NYA), and family reunification with 14.5% of adults and 19.8% of NYA. During 2023, 7,753 men, 3,050 women, 1,350 boys, and 1,204 girls were returned.
Nevertheless, the number of returnees who said they had migrated for security reasons decreased in 2023 compared to 2022.
Of the total 14,437 returned individuals, 17% of adults and 22.6% of NYA said they emigrated for security reasons, 66.9% of adults and 58.5% of NYA for economic reasons, and 13.7% of adults and 17.2% of NYA for family reunification.
In 2022, 6,230 men, 3,595 women, 2,469 boys, and 2,143 girls were returned.
The reduction is apparent when compared to data collected by the IOM before the state of emergency and without the effects of the COVID-19 pandemic on migration patterns. For example, in 2019, 37,316 people were deported, of which 16.6% of the adult population said they left El Salvador due to insecurity, while children and adolescents reached 25.4%.
However, in 2019, economic factors also led the reasons for leaving El Salvador with 66.4% for adults and 52.6% for those under 18 years old.
According to the IOM, forced return is the act of sending a person back to their country of origin against their will, either to their country of origin, transit, or a country that agrees to receive the person, usually carried out under an administrative or judicial decision.
Migration is driven by structural factors, such as lack of employment opportunities, insecurity and violence, natural disasters, climate change, family reunification, and prospects of employment opportunities abroad, particularly in the United States, according to the IOM.
El Salvador has been under a controversial state of emergency for almost two years that suspends some constitutional guarantees and has allowed soldiers and police to arrest over 78,000 alleged gang members and collaborators.
Human rights organizations have reported that dozens of Salvadorans have been displaced within the country or even migrated due to harassment or fear of security forces that carry out arbitrary arrests and harass communities, replacing the fear of gangs in the territories.
According to the human rights organization Cristosal, 1,009 people have experienced internal forced displacement since the implementation of the state of emergency. The data, collected between March 2022 and January 31, 2024, reveal that 46.2% of the displacements were caused by police officers and soldiers, while 35.2% were caused by gangs.
However, the organization’s statistics do not establish which of these displaced individuals ultimately chose to leave the country.
Forced displacement can lead to forced migration. The IOM explains that forced migration is a migratory movement that can be driven by different factors, involving the use of force, compulsion, or coercion.
Infodemia: https://infodemia.com.sv/pese-a-mejoras-de-seguridad-persiste-migracion-por-violencia-en-el-salvador
Pese a mejoras de seguridad, persiste migración por violencia en El Salvador
En resumen:
- Cientos de adultos, niños y adolescentes manifiestan haber abandonado el país por razones de inseguridad.
- Organizaciones de DDHH denuncian desplazamiento y migración por acoso de cuerpos de seguridad del Estado.
- Razones de tipo económico y reunificación familiar siguen siendo las principales causas de migración, incluso desde antes de la aplicación del régimen de excepción.
Cientos de salvadoreños siguen migrando del país de forma irregular a pesar de las mejoras en materia de seguridad y reducción de homicidios, según cifras oficiales recabadas por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
De acuerdo con la entidad de las Naciones Unidas, entre enero y diciembre de 2023, en El Salvador se registraron 13 mil 357 deportaciones, en su mayoría de Estados Unidos y México.
Durante sus entrevistas con personal de migración sobre las causas que provocaron su migración, el 8.1% de los adultos y el 7.8% de la niñez y adolescencia (NYA) afirmó que dejaron el país por razones de inseguridad.
De acuerdo con datos oficiales, en 2023 sumaron 8 años consecutivos de reducciones en las cifras de homicidios.
El número de homicidios en El Salvador se redujo un 68.8% durante el año 2023, según estadísticas oficiales. Las autoridades reportan que el año pasado se cometieron 154 asesinatos, frente a los 495 del año previo.
Las cifras no incluyen bajas de pandilleros, recuperación de osamentas en fosas y cementerios clandestinos y muertes de personas bajo custodia del Estado, dado que el Ejecutivo de Bukele manipuló la forma en la que se contabilizan y excluyó datos.
Sin embargo, el factor económico sigue siendo la mayor causa de abandono del país con un 75.1% en adultos, un 69.8% NYA y la reunificación familiar con 14.5% de los adultos y 19.8% de NYA. Durante 2023, fueron retornados 7 mil 753 hombres, 3 mil 50 mujeres, 1.350 niños y 1.204 niñas.
Sin embargo, el número de retornados que dijo que había migrado por razones de inseguridad bajó en 2023, frente al 2022.
Del total de 14 mil 437 personas retornadas, un 17% de los adultos y un 22.6% de NYA dijeron que emigraron por razones de inseguridad, 66.9% de adultos y 58.5% de NYA por factores económicos y un 13.7% de los adultos y 17.2% de NYA por reunificación familiar.
En 2022, fueron retornados 6 mil 230 hombres, 3 mil 595 mujeres, 2 mil 469 niños y 2 mil 143 niñas.
La reducción se marca si se comparan los datos recopilados con la OIM antes del régimen de excepción y sin los efectos de la pandemia de la covid-19 en el flujo migratorio. Por ejemplo, en 2019 fueron deportadas 37 mil 316 personas, de las que el 16.6% de la población adulta dijo haber salido de El Salvador por inseguridad, mientras que la niñez y adolescencia llegó al 25.4%.
No obstante, en 2019 también los factores económicos estuvieron a la cabeza de las razones para salir de El Salvador con el 66.4% en adultos y 52.6% en menores de 18 años.
Según explica la OIM, un retorno forzoso es el acto de devolver a una persona a su país de origen, en contra de su voluntad, puede ser a su país de origen, de tránsito o un país que acepte recibir a esta persona, que generalmente se hace en virtud de un acto o decisión de carácter administrativo o judicial.
La migración es alimentada por factores estructurales, como falta de oportunidades de empleo, la inseguridad y violencia, desastres por fenómenos naturales, el cambio climático, la reunificación familiar y las perspectivas de oportunidades de empleo en el extranjero, especialmente en los Estados Unidos, señala OIM.
El Salvador permanece por casi dos años bajo un polémico régimen de excepción que suspende algunas garantías constitucionales y que ha permitido a soldados y policías detener a más 78.000 supuestos pandilleros y colaboradores.
Organizaciones de derechos humanos han denunciado que decenas de salvadoreños se han desplazado dentro del territorio o incluso migrado por el acoso o temor a los cuerpos de seguridad que llegan a las comunidades a realizar capturas arbitrarias y acoso, sustituyendo el temor a las pandillas en los territorios.
Según la organización de derechos humanos Cristosal 1,009 personas han sufrido desplazamiento forzado interno desde la implementación del régimen de excepción. Los datos, que fueron retomados entre marzo de 2022 y el 31 de enero de 2024, revelan que un 46.2% de los desplazamientos fueron provocados por agentes de la policía y soldados, mientras que un 35.2% por pandillas.
Sin embargo, las estadísticas de la organización no establecen cuál de esa cantidad de desplazados tomó cómo última opción salir del país.
El desplazamiento forzado puede terminar en migración forzosa. La OIM explica que la migración forzosa es un movimiento migratorio que puede ser impulsado por diferentes factores, involucra el uso de la fuerza, la compulsión o la coerción.
Infodemia: https://infodemia.com.sv/pese-a-mejoras-de-seguridad-persiste-migracion-por-violencia-en-el-salvador