Just a few months ago, President Nayib Bukele asked Salvadorans for patience regarding the country’s investments in bitcoin, a plummeting cryptocurrency that was causing concern among some in the first nation in the world to adopt it as legal tender.
But now, with bitcoin reaching a historic high, the popular president congratulates himself on his initiative. The rise in this cryptocurrency has generated more than $200 million for the impoverished Central American nation. Bukele says using bitcoin as legal tender brings benefits through various channels, such as a program allowing foreigners to obtain citizenship by investing the equivalent of $1 million in bitcoins.
“Now that the market price of bitcoin has risen significantly, if we were to sell, we would get a profit of more than 40% (just from our market purchases), and our main source of BTC is now our citizenship program,” added the president.
President’s posts on social network X may make some believe that a huge amount of money is pouring into the country. And initially, it is true, but viewed in broader perspective, those millions earned from bitcoin investments are just a fraction of the nearly $5,000 million in external debt the nation had until Q3 2023, according to Moody’s Analytics data.
According to Nayib Bukele’s portfolio tracker, since El Salvador approved bitcoin as legal tender in September 2021, it has acquired 5,691 BTC at an average cost of just over $42,600. Having invested approximately $122 million from its treasury, El Salvador’s portfolio now amounts to over $360 million.
“We have decided to transfer a large portion of our bitcoin to a cold wallet and store that cold wallet in a physical vault within our national territory. You can call it our first ‘bitcoin piggy bank.’ It’s not much, but it’s honest work,” announced the president on social network X this Friday, in a tweet where he shared the first transfer of 5,689 BTC, currently worth over $400 million.
A cold wallet is a kind of savings bank account where cryptocurrencies that will not be immediately used can be stored, and they are not affected by price fluctuations.
After a sustained downward streak that raised concerns from international bodies and citizens, last Tuesday, bitcoin reached $69,000, setting a new record that was broken again on Monday, trading at over $72,000.
Investing a country’s resources in cryptocurrencies is a novel approach, but also risky and not recommended by heavyweight global financial institutions.
Bukele says, for now, he won’t sell El Salvador’s bitcoins
The president has made it clear that “we will not sell” amid the cryptocurrency’s rising trend. Bukele insists that by adopting bitcoin as legal tender in the country, alongside the dollar, El Salvador has also created other types of gains like those mentioned at the beginning of this article.
El Salvador’s government also claims that millions of Salvadorans “have already used the money of the future.” It also boasts of saving Salvadorans tens of millions of dollars in remittance fees by sending them through bitcoins and using geothermal energy from volcanoes for mining this cryptocurrency.
But a December 2023 survey by El Salvador’s José Simeón Cañas Central American University showed a different picture.
Only 12% of the country’s population used bitcoin at least once in 2023 to pay for goods and services, down from 2022 when 24.4% used it, according to the same pollster.
Could El Salvador pay off its debt with bitcoin?
This narrative is propagated by US investor and Silicon Valley venture capital specialist Tim Draper. He argued in a blog that El Salvador could become “one of the richest countries in the world” in a few decades thanks to bitcoin, and it “could eventually pay off its debt to the IMF and other financial institutions” with these gains.
Such an ambitious ‘prediction’ still needs to be backed up by facts. El Salvador remains one of the most indebted countries in the world, and this year’s IMF figures show its debt amounts to 73.4% of its Gross Domestic Product.
In January 2022, the IMF asked Bukele to eliminate bitcoin as legal tender in El Salvador.
“Adopting a cryptocurrency as legal tender poses serious risks to financial and market integrity, financial stability, and consumer protection and may generate contingent fiscal liabilities,” the IMF wrote at the time, in a standoff with the Salvadoran president, who maintained his bet on the cryptocurrency despite its continued decline.
Bukele se jacta de las ganancias en bitcoin, pero El Salvador sigue ahogado en deuda
Hace apenas unos meses, el presidente Nayib Bukele pedía paciencia a los salvadoreños por el camino que habían tomado las inversiones del país en bitcoin, una criptomoneda que caía en picada y generaba preocupación entre algunos en el primer país del mundo en adoptarla como moneda de curso legal.
Pero ahora, cuando el bitcoin ha alcanzado un récord histórico, el popular mandatario se congratula por su iniciativa. El alza de esta criptomoneda le ha generado más de 200 millones a la empobrecida nación centroamericana. Y Bukele dice que el tenerla como moneda de recurso legal le trae réditos por distintas vías, como un programa con el que extranjeros pueden obtener la ciudadanía a cambio de invertir el equivalente a $1 millón en bitcoins.
“Ahora que el precio de mercado de bitcoin ha subido mucho, si vendiéramos, obtendríamos una ganancia de más del 40% (solo de las compras en el mercado), y nuestra principal fuente de BTC es ahora nuestro programa de ciudadanía”, agregó el mandatario.
Las publicaciones del presidente en la red X pueden hacer que algunos piensen que al país le está entrando una ingente cantidad de dinero. Y en princpio es cierto, pero visto desde una perspectiva más amplia, esos millones que habría ganado por las inversiones en bitcoin son apenas una fracción de la deuda externa de casi $5,000 millones que esa nación tenía hasta el tercer trimestre de 2023, de acuerdo con datos de Moody’s Analytics.
Según el tracker del portafolio de Nayib Bukele, desde que El Salvador aprobó el bitcoin como moneda de curso legal, en septiembre de 2021, ha adquirdo 5,691 BTC a un costo promedio de poco más de $42,600. Habiendo invertido aproximadamente $122 millones de su tesorería, el portafolio de El Salvador ahora acumula más de $360 millones.
“Hemos decidido transferir una gran parte de nuestro bitcoin a una billetera fría y almacenar esa billetera fría en una bóveda física dentro de nuestro territorio nacional. Puedes llamarlo nuestra primera ‘alcancía bitcóin’. No es mucho, pero es trabajo honesto”, anunció este viernes el mandatario en X, en un tuit en el que compartió la primera transferencia, de 5,689 BTC, lo cual al valor actual serían más de $400 millones.
Una billetera fría es una especie de cuenta bancaria de ahorro, en la que se pueden guardar las criptomonedas que no se van a usar de inmediato, y estas no sufren por las subidas o bajadas de precio.
Después de una sostenida racha de caída, que levantó críticas de organismos internacionales y preocupaciones de los ciudadanos, el martes de la semana pasada el bitcoin alcanzó los $69,000, imponiendo un nuevo récord que volvió a batirse el lunes, al cotizar sobre los $72,000.
Invertir recursos de un país en criptomonedas es un enfoque novedoso y al mismo tiempo riesgoso y poco recomendado por organismos financieros de peso en el mundo.
Bukele dice que, por ahora, no venderá los bitcoins de El Salvador
El mandatario ha dejado claro que “no venderemos” en medio de la tendencia alcista de la criptomoneda. Bukele insiste en que al adoptar el bitcoin como moneda de curso legal en el país, junto con el dólar, El Salvador creó también otro tipo de ganancias como las que mencionamos al inicio de esta nota.
El gobierno de El Salvador también alega que millones de salvadoreños “ya han usado el dinero del futuro”. También se precia de haber hecho que los salvadoreños se ahorren decenas de millones de dólares en comisiones por enviar remesas a través de bitcoins, y de usar energía geotérmica de los volcanes para la minería de esta criptomoneda.
Pero una encuesta de diciembre de 2023 de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas de El Salvador reveló otro panorama.
Apenas el 12% de la población de ese país utilizó el bitcoin al menos una vez en 2023 para pagar bienes y servicios, una caída con respecto a 2022, cuando lo usó el 24.4%, según el mismo encuestador.
¿Podría El Salvador pagar su deuda gracias al bitcoin?
Esta es una narrativa propagada por el inversionista estadounidense y especialista en capital de riesgo de Sillicon Valley, Tim Draper. Argumentó en un blog que El Salvador podría convertirse en “uno de los países más ricos del mundo” en unas pocas décadas gracias al bitcoin, y que “podría llegar a pagar su deuda al FMI y otras instituciones financieras” con esas ganancias.
Una ‘predicción’ tan ambiciosa todavía debe ser respaldada con hechos. El Salvador todavía sigue siendo uno de los más endeudados del mundo y según cifras de este año del FMI, su deuda equivale al 73.4 % de su Producto Interno Bruto.
En enero de 2022, ese organismo pidió a Bukele que eliminara el bitcoin como moneda de curso legal en El Salvador.
“La adopción de una criptomoneda como moneda de curso legal implica graves riesgos para la integridad financiera y del mercado, la estabilidad financiera y la protección del consumidor y puede ocasionar pasivos fiscales contingentes”, escribió el FMI entonces, en un pulso con el mandatario salvadoreño, que mantuvo su apuesta por la criptomoneda a pesar de que entonces seguía cayendo.