Position of Salvadoran State before the IACHR on disappearances concerns families and NGOs — La postura del Estado salvadoreño ante CIDH por desapariciones preocupa a familias y a ONG

Nov 10, 2023

A group of humanitarian organizations and relatives of missing persons in El Salvador expressed concern this Thursday about the state's position of denying the phenomenon of disappearances before the Inter-American Commission on Human Rights (IACHR), including those of "short duration" under a state of emergency in effect since March 2022. — Un grupo de organizaciones humanitarias y familiares de personas desaparecidas en El Salvador se mostraron preocupadas este jueves por la postura del Estado de negar el fenómeno de las desapariciones ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), incluidas las de "corta duración" bajó un régimen de excepción vigente desde marzo de 2022.

A group of humanitarian organizations and relatives of missing persons in El Salvador expressed concern this Thursday about the state’s position of denying the phenomenon of disappearances before the Inter-American Commission on Human Rights (IACHR), including those of “short duration” under a state of emergency in effect since March 2022.

The IACHR held a public hearing to address the phenomenon, and El Salvador’s Presidential Commissioner for Human Rights, Andrés Guzmán, denied that disappearances occurred in the context of the state of emergency, decreed to fight gangs.

“There persists a narrative that makes the disappearance of people in El Salvador invisible,” said the program officer for the Foundation for Due Process (DPLF), Juan Carlos Sánchez, at a press conference, where he also claimed that there are at least three “points of concern.”

He pointed out that they observed the Presidential Commissioner for Human Rights and the Salvadoran Attorney General, René Escobar, “denying the existence of the disappearance of persons and forced disappearance in particular,” by state agents.

“They continue to claim that forced disappearance does not exist in El Salvador, which I think is a point that has greatly impacted the families, the mothers who search because their reality is diametrically different from what was expressed now in that hearing,” Sánchez added.

He also added concern about the “manipulation that exists over data and figures,” given that “a policy of opacity of the figures is undeniable.”

The Salvadoran authorities have kept secret data related to violence attributed to gangs, such as clandestine cemeteries, in addition to that linked to the state of emergency.

Sánchez added that the state representation did not refer to the ratification of international instruments on disappearance.

Yaneth Martínez, from the organization Cristosal, regretted that “the Salvadoran state has referred that forced disappearances do not exist in this framework of the state of emergency.”

She indicated that only Cristosal and the Human Rights Institute of the Central American University (Idhuca) have received 209 complaints of detained persons, where families do not receive information about their situation and location.

Humanitarian organizations have pointed out that the detention of persons about whom authorities refuse to provide information constitutes “short-term disappearances.”

The Human Rights Commissioner of President Nayib Bukele’s government said that in 2023 the Prosecutor’s Office has not received complaints of disappearances and labeled as “false” the “assertion that forced disappearances during the state of emergency even exist.”

He added that “nor do we exist or recognize in our context short-term forced disappearances.”

Carmen Argueta, mother of young Herber Argueta, who disappeared on August 4, 2021, said that “to date” she knows “absolutely nothing” about her son.

“Just as the government does not recognize the data shown by civil society, so I do not recognize any of the data that the government has given,” said Argueta, who said she feels “offended” as a mother and that the authorities “ignore” them.

For her part, Sandra Chafoya, whose son Joshua Romero disappeared on September 11, 2021, stated that they are “moved as families” and that it is “a lie” that families are receiving information about their cases from the authorities.

Eneida Abarca, who is part of the Search Block for Missing Persons, said that the outlook for families is that the authorities “are not going to invest resources in the disappeared.”

She said that in the case of her son Carlos Abarca, who disappeared on January 1, 2022, a Police chief told her that “they are not going to spend resources looking for Carlos.”

According to data from the Foundation for the Study of the Application of Law (Fespad), between 2019 and June 2022, there were 6,443 cases of missing persons, of which 2,400 have not been located.

The Prosecutor’s Office received in some of the most violent years in El Salvador between 2014 and 2019 more than 22,000 complaints of missing persons.

Infobae: https://www.infobae.com/america/agencias/2023/11/09/la-postura-del-estado-salvadoreno-ante-cidh-por-desapariciones-preocupa-a-familias-y-a-ong/

La postura del Estado salvadoreño ante CIDH por desapariciones preocupa a familias y a ONG

Un grupo de organizaciones humanitarias y familiares de personas desaparecidas en El Salvador se mostraron preocupadas este jueves por la postura del Estado de negar el fenómeno de las desapariciones ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), incluidas las de “corta duración” bajó un régimen de excepción vigente desde marzo de 2022.

La CIDH realizó una audiencia pública para abordar el fenómeno y el comisionado presidencial de Derechos Humanos de El Salvador, Andrés Guzmán, negó que se dieran desapariciones en el contexto del régimen, decretado para combatir a las pandillas.

“Persiste una narrativa que invisibiliza la desaparición de personas en El Salvador”, indicó el oficial de programa de la Fundación para el Debido Proceso (DPLF), Juan Carlos Sánchez, en conferencia de prensa, donde además alegó que hay al menos tres “puntos de preocupación”.

Señaló que observaron al comisionado presidencial de Derechos Humanos y al procurador general salvadoreño, René Escobar, “negar la existencia de la desaparición de personas y la desaparición forzada en particular”, a manos de agentes estatales.

“Continúan manejando que la desaparición forzada no existe en El Salvador, creo que ese es un punto que ha impactado mucho a las familias, a las madres que buscan, porque su realidad es diametralmente diferente a lo que se expresó ahora en esa audiencia”, añadió Sánchez.

Y agregó que también preocupa la “manipulación que existe sobre los datos y las cifras”, dado que “es inocultable una política de opacidad de las cifras”.

Las autoridades salvadoreñas han puesto bajo secreto los datos relacionados con la violencia atribuida a las pandillas, como la de los cementerios clandestinos, además de la vinculada al régimen de excepción.

Sánchez añadió que la representación estatal no hizo referencia a la ratificación de instrumentos internacionales sobre la desaparición.

Yaneth Martínez, de la organización Cristosal, lamentó que “el Estado salvadoreño haya referido que no existen las desapariciones forzadas en este marco del régimen de excepción”.

Indicó que solo Cristosal y el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana (Idhuca) ha recibido 209 denuncias de personas detenidas, en las que las familias no reciben información sobre su situación y ubicación.

Las organizaciones humanitarias han señalado que la detención de personas de las que las autoridades se niegan a dar información se configuran en “desapariciones de corta duración”.

El comisionado de Derechos Humanos del Gobierno del presidente Nayib Bukele dijo que durante 2023 la Fiscalía no ha recibido denuncias de desapariciones y catalogó de “falsa” la “afirmación de que las desapariciones forzadas de durante el régimen de excepción siquiera existan”.

Añadió que “tampoco existe ni reconocemos en nuestro contexto la desapariciones forzadas de corta duración”.

Carmen Argueta, madre del joven Herber Argueta, desaparecido el 4 de agosto de 2021, dijo que “a la fecha” no sabe “absolutamente nada” de su hijo.

“Así como el Gobierno no reconoce los datos que le mostró la sociedad civil, así yo no reconozco ninguno de los datos que el Gobierno ha dado”, dijo Argueta, que señaló que se siente “ofendida” como madre y que las autoridades les “ignoran”.

Por su parte, Sandra Chafoya, cuyo hijo Joshua Romero desapareció el 11 de septiembre de 2021, sostuvo que están “conmovidas como familias” y que es “una mentira” que las familias están recibiendo información de sus casos por parte de las autoridades.

Eneida Abarca, que es parte del Bloque de Búsqueda de personas Desaparecidas, dijo que el panorama para las familias es que las autoridades “no van a invertir recursos en desaparecidos”.

Dijo que sobre el caso de su hijo Carlos Abarca, que desapareció el 1 de enero de 2022, un jefe de la Policía le manifestó que “no van a gastar recursos en buscar a Carlos”.

Según datos de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), entre 2019 y junio de 2022 se registraron 6.443 casos de personas desaparecidas, de las que 2.400 no han sido localizadas.

La Fiscalía recibió en algunos de los años más violentos en El Salvador entre 2014 y 2019 más de 22.000 denuncias de personas desaparecidas.

Infobae: https://www.infobae.com/america/agencias/2023/11/09/la-postura-del-estado-salvadoreno-ante-cidh-por-desapariciones-preocupa-a-familias-y-a-ong/