The visit of a delegation of U.S. officials to El Salvador from October 25 to 27, 2023, led by Deputy Secretary for Western Hemisphere Affairs, Brian A. Nichols, is of great importance to the country according to opinions of deputies from both the opposition and the ruling party. These opinions vary on the topic of the country’s democratic situation.
“I don’t think it’s a coincidence that the date of the visit coincides with this historic moment,” said John Wright Sol, of Nuestro Tiempo.
The meeting will occur in the context of the discussion surrounding President Nayib Bukele’s registration as a candidate seeking reelection, despite the constitutional prohibition.
Wright also believes that the United States “has not been entirely consistent” on the reelection topic. Initially declaring as undemocratic the justices of the Constitutional Chamber that enabled the reelection, and later other voices indicate that it is an internal Salvadoran matter.
“I do believe that this is an issue that we Salvadorans have to resolve, and that no actor from the international community will come to save us or demand compliance with the Constitution. I think it’s up to us citizens,”
John Wright Sol, deputy of Nuestro Tiempo
Among the topics to be discussed are inclusive economic prosperity, the rule of law, human rights, migration cooperation, and security.
Furthermore, the Deputy Secretary is expected to meet with business actors and with the Institute of Human Rights of the Central American University José Simeón Cañas (IDHUCA).
“I think the visit will be interesting. There’s also international concern about what’s happening in these countries. As far as I understand, it’s not an exclusive visit to El Salvador,” said Dina Argueta, deputy of the FMLN.
She added that this visit takes on greater relevance with elections just a few months away.
“Democracy will be discussed in a meeting where one of the main actors is one of the direct violators of the Constitution. He is the only person who, through constant violation of an established democratic process in our country, wants to continue being president,”
Dina Argueta, deputy of the FMLN
She maintained that the government “has no valid arguments” to uphold the candidacy.
Claudia Ortiz, deputy of Vamos, commented that it is important to address economic issues and the root causes of irregular migration to the United States, such as the economic autonomy of women and protection from violence, in addition to topics on democracy, the rule of law, and due process.
“This is definitely an important point to overcome impunity in our country. The opposite of impunity is justice, and a citizen security strategy must be based on justice,” she said.
She added that Bukele’s registration has precedents that affect democracy, beginning when on May 1, 2021, a “technical coup” was carried out on the Constitutional Chamber of the Supreme Court by removing justices without due process and appointing those aligned with the government.
“A group of lawyers who are usurping functions in that state institution have said that there is a legal way to violate the Constitution, but there is no such thing,” she stated.
Respecting Decisions
For his part, Ernesto Castro, president of the Legislative Assembly and deputy of Nuevas Ideas, said he has no confirmation of the meeting between the Deputy Secretary and President Bukele. But if it happens, he does not rule out that important issues for both countries will be discussed.
“And having such visits will be very important to continue with a direct, frank dialogue, as has always been the case. Always respecting each other’s independence as a country. So I think that visit will be very interesting,” he said.
Numan Salgado, of the GANA faction, considered that “the United States’ foreign policy towards El Salvador has changed” and that “there is no longer an embassy in El Salvador that is part of political activism” and the country has its own interests. “Decisions of the government of El Salvador are now respected,” he added.
John Wright sobre visita de subsecretario Brian Nichols: “No creo que sea coincidencia”
La visita de una delegación de funcionarios estadounidenses a El Salvador del 25 al 27 de octubre de 2023, encabezada por el secretario adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, reviste de mucha importancia para el país de acuerdo a opiniones de diputados tanto de oposición como del oficialismo, con algunas posturas distintas en cuanto al tema de la situación democrática del país.
“No creo que sea coincidencia la fecha cuando viene a visitar el país, que coincide con este momento histórico”, señaló John Wright Sol, de Nuestro Tiempo.
La reunión ocurriría en el contexto de discusión de la inscripción del presidente Nayib Bukele como candidato para buscar la reelección, pese a la prohibición constitucional.
También opina que Estados Unidos “no ha sido del todo consistente” en el tema de la reelección, ya que primero declara actores no democráticos a magistrados de la Sala de lo Constitucional que habilitaron la reelección y luego otras vocerías señalan que es un asunto interno salvadoreño.
“Yo sí creo que es un tema que tenemos que resolver como salvadoreños y que ningún actor de la comunidad internacional vendrá a salvarnos o vendrá a exigir que se cumpla la Constitución, creo que nos corresponde a los mismos ciudadanos”,
John Wright Sol, diputado de Nuestro Tiempo
Entre los temas que se tratarían está el de prosperidad económica inclusiva, el estado de Derecho, derechos humanos, cooperación migratoria y seguridad.
Además, se prevé que el secretario adjunto se reúna con actores empresariales y con el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (IDHUCA).
“Creo que la visita será interesante, digo porque hay también una preocupación a nivel internacional de que lo que está sucediendo en estos países, porque entiendo no es una visita exclusiva para El Salvador”, expresó Dina Argueta, diputada del FMLN.
Añadió que a pocos meses de realizarse las elecciones, esta visita toma más relevancia.
“Se va a hablar de democracia en una reunión donde uno de los actores principales es uno de los violadores directos de la Constitución de la República, porque es la única persona que a través de la violación constante a un proceso democrático establecido en nuestro país quiere seguir siendo presidente”
Dina Argueta, diputada del FMLN
Y sostuvo que el gobierno “no tiene argumentos válidos” para mantener la legalidad de la candidatura.
Claudia Ortiz, diputada de Vamos, comentó que es importante abordar los temas de la economía y las causas raíces de la migración irregular hacia Estados Unidos, como la autonomía económica de las mujeres y la protección de la violencia, además de temas de la democracia, el estado de Derecho y el debido proceso.
“Es definitivamente un punto importante para vencer la impunidad en nuestro país, lo contrario de la impunidad es la justicia y una estrategia de seguridad ciudadana tiene que estar basada en la justicia”, dijo.
Añadió que de alguna manera la inscripción de Bukele tiene antecedentes que atañen a la democracia, iniciando cuando el 1 de mayo de 2021 se dio “un golpe técnico” a la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia al destituir a los magistrados sin un procedimiento y nombrar a otros afines al gobierno.
“Es un grupo de abogados que están usurpando funciones en esa institución del Estado han dicho que hay una manera legal de violar la Constitución, pero no hay tal”, expresó.
Respeto a decisiones
Por su parte, Ernesto Castro, presidente de la Asamblea Legislativa y diputado de Nuevas Ideas, dijo que no tiene confirmación de la reunión entre el secretario adjunto y el presidente Bukele, pero que de ocurrir no descarta que se discutan temas de importancia para ambos países.
“Y tener ese tipo de visitas va a ser muy importante para continuar con un diálogo directo, franco, como lo que se ha tenido siempre. Siempre respetando cada uno de nosotros nuestra independencia como país. Así que creo que va a ser muy interesante esa visita”, dijo.
Numan Salgado, de la fracción de GANA, consideró que “la política exterior de los Estados Unidos hacia El Salvador ha cambiado” y que “no hay una embajada en El Salvador que es parte del activismo político” y que el país tiene sus propios intereses. “Ahora se respetan las decisiones del gobierno de El Salvador”, agregó.