On Tuesday, the National Health Forum (NHF) pointed out that the “systemic violence” of the State of El Salvador against women has “intensified” within the framework of the state of emergency, in effect since March 2022 to combat gangs, which has become the primary security measure of President Nayib Bukele’s government against these groups.
This statement was issued in a communique where the NHF condemned the rape of a girl by a group of soldiers in the center of the country.
“This despicable act of sexual violence is not isolated, but an alarming manifestation of systemic violence inflicted on women from the very institutions of the State, a situation that has intensified in the framework of the state of emergency,” it indicated.
The NHF strongly condemned “the sexual assault perpetrated by Armed Forces members against a 13-year-old girl, in Mizata”.
The civil organization also demanded the State “ensure the safety, physical and emotional well-being of the victim, her family, and the community”.
It highlighted that, “despite the social repression they experience daily and under the threat of being prosecuted under the state of emergency, they bravely denounced this atrocious crime”.
“The abuses and sexual assaults perpetrated towards girls, teenagers, and women cannot be tolerated under any circumstances,” it emphasized.
It also requested the investigation of “other sexual offenses committed in many communities of the country at the hands of the Armed Forces and the National Civil Police”.
The criminal case against the six military personnel linked to this case advanced to the instruction stage, so a court ordered that the defendants remain in provisional prison.
According to a report from three humanitarian organizations, Salvadoran security forces have surpassed gangs in generating internal forced displacement, and among the generating events are harassment and sexual abuse.
The data from Cristosal, Pasionist Social Service (SSPAS), and the Human Rights Institute of the Central American University (Idhuca) indicate that the 223 victims of displacement they have assisted since 2022 have reported threats (18.4%), surveillance (17%), arbitrary detention (16.6%), and mistreatment and torture (14.8%) by police officers and soldiers.
Organización dice que violencia estatal contra mujeres salvadoreñas se ha “intensificado”
El Foro Nacional de la Salud (FNS) señaló este martes que la “violencia sistémica” del Estado de El Salvador contra las mujeres “se ha intensificado” en el marco del régimen de excepción, vigente desde marzo de 2022 para combatir a las pandillas y que se ha convertido en la principal medida de seguridad del Gobierno del presidente Nayib Bukele contra dichos grupos.
Esta afirmación fue emitida en un comunicado en el que el FNS condenó la violación de una niña por parte de un grupo de soldados en el centro del país.
“Este repudiable acto de violencia sexual, no es aislado, sino una manifestación alarmante de la violencia sistémica infligida a las mujeres desde las mismas instituciones del Estado, situación que se ha intensificado en el marco del régimen de excepción”, indicó.
El FNS condenó “enérgicamente la violación sexual perpetrada por miembros de la Fuerza Armada contra una niña de 13 años de edad, en el municipio de Mizata”.
La organización civil exigió también al Estado “garantizar la seguridad, el bienestar físico y emocional de la víctima, su familia y la comunidad”.
Destacó que, “a pesar de la represión social que experimentan diariamente y bajo la amenaza de ser procesados bajo la figura del Régimen de Excepción, denunciaron valientemente este atroz crimen”.
“Los abusos y violaciones sexuales perpetrados hacia las niñas, adolescentes y mujeres no pueden ser tolerados en ninguna circunstancia”, subrayó.
También pidió que se investigue “otros delitos sexuales cometidos en muchas comunidades del país en manos de la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil”.
La causa penal contra los seis militares vinculados con este caso avanzó a la etapa de instrucción, por lo que una corte ordenó que los imputados permanezcan en prisión provisional.
Según un reporte de tres organizaciones humanitarias, los cuerpos de seguridad salvadoreños han superado a las pandillas en la generación de desplazamiento forzado interno y entre los hechos generadores se encuentran el acoso y el abuso sexual.
Los datos de Cristosal, Servicio Social Pasionista (SSPAS) y el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana (Idhuca) señalan que las 223 víctimas de desplazamiento que han atendido desde 2022 han denunciado amenazas (18,4 %), vigilancia (17 %), detención arbitraria (16,6 %) y malos tratos y tortura (14,8 %) por parte de policías y soldados.