The Movement of Dismissed Workers (MTD) recently denounced the cessation of activities of 11 members of the Workers’ Union of the Ministry of Culture (Sitrasec), while condemning the use of the state of emergency as a tool to “persecute” entities with a critical stance towards the government.
Salomon Alfaro, spokesperson for the MTD, said they have felt harassed since implementing the state of emergency in their fight for labor rights. Moreover, from March 2022 until the end of August 2023, this movement reports at least 16 union workers who have been captured under the state of emergency, “although there may be more,” they expressed.
“The arrests made against our fellow unionists for demanding labor rights are managed using the same method of the state of emergency. Workers are not criminals, but are denouncing because their rights have been disrespected. What intimidates these workers is that they will be captured and the state of emergency will be applied to them,” Alfaro denounced.
“The regime seems to be used for all kinds of repression. The worrying thing is that some comrades have received freedom (they have alternative measures to detention) and are still in prison. The Prosecutor’s Office has placed itself at the orders of the Government, treating cases as if they were under the state of emergency,” he added.
Alfaro mentioned the cases of Francisco Lizama, Jorge Saravia, and Miguel Angel Ventura, unionists from the Municipal Mayor’s Office of San Marcos, who have had alternative measures to detention for three months but have not been released by the General Directorate of Penal Centers (DGCP).
In a statement released on Sunday, September 3, 2023, the MTD condemns “the use of the state of emergency to defame, persecute, criminalize, and imprison those identified as dissenting opponents.” In light of this, they urged the Office for the Defense of Human Rights (PDDH) to verify the complaints and follow up on the dismissals from Sitrasec.
The Cristosal organization, which also advocates for human rights in El Salvador, has recorded 27 defenders affected under the state of emergency. Of these, three belong to union movements in the country’s interior.
Meanwhile, the Humanitarian Legal Aid (SJH) recently released a report detailing 175 deaths inside penal centers under the state of emergency. Of these cases, the majority (91%) are people without gang affiliations.
Of these deaths, SJH recorded the case of José Leonidas Bonilla, a unionist from the Mayor’s Office of Mejicanos, who died on September 3, 2022. He was imprisoned in Mariona prison on charges of illicit associations, and according to the organization, the cause of his death was negligence in the lack of medical attention. He died in Rosales Hospital.
Dismissals
Regarding the termination of the 11 Sitrasec unionists, Alfaro stated that the reasons given to justify the termination were “for a breach of their duties that could not be tolerated,” and he claims that due process was not followed. At the end of August, the MTD announced the dismissal of the general secretaries of three unions from the Ministry of Public Works (MOP).
This movement claims that 10,000 public workers have been dismissed in the current administration.
The Permanent Table for Labor Justice and the Foundation for the Study and Application of Law (FESPAD) commented on the latest dismissals of unionists and public workers. “Unions must act freely and independently, without external pressures (…) We call for solidarity in the face of mass layoffs in various municipalities,” they cited on social media.
Union movements refer to the closure of government institutions (the latest being INSAFORP and INJUVE) as “the way the State gives the dismissal of workers and the annulment of the union as such,” and thus urge people to organize to safeguard labor rights.
Sindicalistas: el régimen es utilizado para amedrentar
El Movimiento de Trabajadores Despedidos (MTD) denunció recientemente el cese de labores de 11 miembros del Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Cultura (Sitrasec), a la vez que condenaron la utilización del régimen de excepción como herramienta para “perseguir” a las entidades con una postura crítica al oficialismo.
De acuerdo con Salomón Alfaro, vocero del MTD, han sentido el hostigamiento desde la implementación del régimen de excepción, en su lucha por los derechos laborales. Además, desde marzo de 2022 hasta finales de agosto de 2023 este movimiento reporta al menos 16 trabajadores sindicales que han sido capturados en el marco del régimen de excepción, “aunque puede que sean más”, expresaron .
“Las detenciones que se hacen a los compañeros sindicalistas por exigir los derechos laborales las manejan con el mismo método del régimen de excepción. Los trabajadores no son delincuentes, sino que están denunciando porque sus derechos han sido irrespetados. Con lo que intimidan a estos trabajadores es que los van a capturar y les aplicarán el régimen”, denunció Alfaro.
“El régimen como que sirve para toda represión. Lo preocupante es que hay compañeros que han recibido libertad (tienen medidas alternas a la detención) y hasta el momento siguen en prisión. La Fiscalía se ha puesto a las órdenes del Gobierno, llevan los casos como si fueran del régimen de excepción”, expuso.
Alfaro mencionó los casos de Francisco Lizama, Jorge Saravia y Miguel Ángel Ventura, sindicalistas de la Alcaldía Municipal de San Marcos, que tienen medidas alternas a la detención desde hace tres meses, pero no han sido liberados por parte de la Dirección General de Centros Penales (DGCP).
En un comunicado dado a conocer el domingo 3 de septiembre de este 2023, el MTD condena la “utilización del régimen de excepción para difamar, perseguir, criminalizar y encarcelar a quienes identifica como opositores disidentes”. Ante esto, instaron a la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) a verificar las denuncias y darle el seguimiento a los despidos de Sitrasec.
La organización Cristosal, que también vela por los derechos humanos en El Salvador, lleva el registro de 27 defensores que tuvieron alguna afectación en el marco del régimen de excepción. De ellos, tres pertenecen a movimientos sindicales en el interior del país.
En tanto, el Socorro Jurídico Humanitario (SJH) dio a conocer recientemente un informe en el que detallaron 175 muertes al interior de los centros penales, en el marco del régimen de excepción. De esos casos, la mayoría (el 91%) se trata de personas que no tenían vínculos con pandillas.
De esas muertes, el SJH registró el caso de un sindicalista de la Alcaldía de Mejicanos, José Leonidas Bonilla, quien falleció el 3 de septiembre de 2022. Estaba recluido en el centro penal de Mariona bajo el delito de agrupaciones ilícitas y la causa de su muerte, de acuerdo con esta organización, fue negligencia en la falta de atención médica. Falleció en el hospital Rosales.
Despidos
Sobre el cese de los 11 sindicalistas del Sitrasec, Alfaro mencionó que las razones para justificar el cese laboral fue “por un incumplimiento a sus labores que no se podían tolerar” y denuncia que no se realizó el debido proceso. A finales de agosto el MTD dio a conocer el despido de los secretarios generales de tres sindicatos del Ministerio de Obras Públicas (MOP).
Este movimiento denuncia que en la actual administración se ha dado el cese de funciones a 10,000 trabajadores públicos.
La Mesa Permanente por la Justicia Laboral, junto a la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), se pronunció sobre los últimos despidos tanto de sindicalistas como de trabajadores públicos. “Los sindicatos deben actuar de manera libre e independiente, sin presiones externas (…) Hacemos un llamado a la solidaridad, ante los despidos masivos ocurridos en las distintas municipalidades”, citaron en redes sociales.
Los movimientos sindicales se refieren al cierre de instituciones de gobierno (las últimas son el INSAFORP y el INJUVE) como “la manera en que el Estado da el despido de los trabajadores y la anulación del sindicato como tal”, por lo que instan a que las personas puedan organizarse para resguardar los derechos laborales.