The Teacher’s Union warned this Monday that public educational centers no longer have supplies to execute the School Feeding Program (PASE), implemented by the Ministry of Education (MINED).
“In schools, there’s not even a single bean, not a grain of rice, not a drop of milk, not a teaspoon of sugar,” affirmed Jorge Villegas, general secretary of the Teacher’s Union.
In 2020, with the declaration of COVID-19 as a health emergency, MINED suspended in-person classes for public and private schools. With this measure, PASE was also interrupted and in its place, students’ families received food packages at least twice a year.
For 2023, with the return of 100% in-person classes, the state department also ordered the resumption of PASE in all public educational centers of the country. However, since that announcement, teacher unions claimed that the funds offered to carry it out and the supplies delivered in March were insufficient. In almost all schools, teachers reported that they had not received beans, milk, and even sugar.
Nearly four months have passed since MINED delivered the first batch of food, which, according to unions was enough to cover 40 days of meals. “Since March, more than a month or a month and a half have passed since that food ran out,” Villegas pointed out today.
The union stated that so far, only schools in the department of La Libertad have been informed that they will receive the second batch of food between August 22nd and 24th. For the rest of the departments, there is no date yet.
David Rodriguez, secretary of the union organization, stated that unofficially, workers from MINED have assured them that they have not yet purchased the food to supply the schools.
He explained that in the year they should receive at least three batches with supplies in February, June, and September. “But if on August 23 they are going to deliver food for another 40 days, they will practically be delivering when the children have already left the schools,” he indicated.
He regretted that the situation is affecting students, especially in the rural area, where “children arrive with the hope of trying the cereal with milk, now there are no foods,” pointed out David Rodriguez.
In addition to the food shortage, the union also denounced that, halfway through the school year, the schools have only received $292.50 from the Annual School Budget, when in previous years they received $750 in a first disbursement. At the end of the year they deposited the other $750, to complete the $1,500 annually.
“It is not understandable that at this time of the year the Ministry of Education still does not understand that schools can only function with paper, giving us $292 seven months into the year, we can’t help but worry,” Rodriguez said.
The school budget is used for stationery expenses, minor repairs, and basic service payments. To date, teachers have had to alleviate the needs with their own funds and even by making collections with parents, assured the secretary of organization.
“En las escuelas ya no hay ni un grano de frijol, ni una gota de leche”: docentes denuncian desabastecimiento de alimentos en escuelas
Bases Magisteriales advirtió este lunes que los centros educativos públicos ya no tienen insumos para ejecutar el Programa de Alimentación Escolar (PASE), implementado por el Ministerio de Educación (MINED).
“En las escuelas ya no hay ni un grano de frijol, ni un grano de arroz, ni una gota de leche, ni una cucharadita de azúcar”, afirmó Jorge Villegas, secretario general de Bases Magisteriales.
En 2020, con la declaración del covid-19 como emergencia sanitaria, el MINED suspendió las clases presenciales para los centros escolares públicos y privados. Con esta medida, también se interrumpió el PASE y en su lugar, familias de los estudiantes recibieron paquetes de alimentos al menos dos veces al año.
Para este 2023, con el regreso de las clases 100 % presenciales, la cartera de Estado también ordenó reanudar el PASE en todos los centros educativos públicos del país. Sin embargo, desde ese anuncio, las gremiales de docentes aseguraron que los fondos ofrecidos para ejecutarlo, así como los insumos que les entregaron en marzo, eran insuficientes. En casi la totalidad de escuelas, los maestros denunciaron que no habían recibido frijoles, leche e incluso azúcar.
Han pasado casi cuatro meses desde que el MINED entregó el primer lote de alimentos, que según las gremiales alcanzaba para cubrir la alimentación de 40 días. “Desde marzo a la fecha, ya tienen más de un mes o mes y medio que esos alimentos se terminaron”, apuntó hoy Villegas.
La gremial aseguró que hasta el momento, solo a escuelas del departamento de La Libertad se les ha informado que recibirán el segundo lote de alimentos entre el 22 y 24 de agosto. Para el resto de departamentos, aún no hay fecha.
David Rodríguez, secretario de organización del sindicato, afirmó que extraoficialmente trabajadores del MINED les han asegurado que aún no han comprado los alimentos para abastecer las escuelas.
Explicó que en el año deberían recibir al menos tres lotes con insumos en febrero, junio y septiembre. “Pero si el 23 de agosto nos van a entregar alimentos para otros 40 días, prácticamente van a estar entregando cuando los niños ya se vayan de las escuelas”, indicó.
Lamentó que la situación esté afectando a los estudiantes, especialmente en la zona rural, donde “los niños llegan con el anhelo de probar el cereal con leche, ahora ya no hay alimentos”, apuntó David Rodríguez.
Aunado a la situación de desabastecimiento de alimentos, la gremial también denunció que, a medio año lectivo, los centros escolares solo han recibido $292.50 del Presupuesto Escolar Anual, cuando en años anteriores recibían $750 en un primer desembolso y al final del año les depositaban los otros $750, para completar los $1,500 anuales.
“No es comprensible que a esta altura del año el ministerio de Educación aún no entienda que las escuelas pueden funcionar solo con papel, que nos den $292 a siete meses del año, no deja de preocuparnos”, dijo Rodríguez.
El presupuesto escolar se utiliza para gastos de papelería, reparaciones pequeñas y pago de servicios básicos. A la fecha, los maestros han tenido que paliar las necesidades con sus propios fondos e incluso haciendo colectas con padres de familia, aseguró el secretario de organización.