U.S. authorities who have been tracking him for months are sure that Salvadoran gang member Élmer Canales Rivera, alias Crook and one of the most influential leaders of the MS13, is hiding in Colonia Santa Úrsula in Mexico City, near the legendary Azteca Stadium. This was confirmed to Infobae by a member of a federal law enforcement agency in the United States and a US diplomatic source.
Crook fled to Mexico after the government of El Salvador’s President Nayib Bukele released him. However, he was still serving a sentence for murder and had pending charges of aggravated extortion and illicit association. Moreover, when Bukele released the gang leader on June 3, 2021, the United States had already requested his extradition to try him in a New York court for murder, drug trafficking, and arms trafficking.
In fact, the US embassy in San Salvador first warned that Crook had been released under unclear circumstances and asked the Salvadoran government for explanations, which Bukele’s officials never provided.
In May 2022, El Faro newspaper published audios in which Carlos Marroquin, the secretary for the Reconstruction of the Social Fabric in Bukele’s presidential cabinet, confessed that he had taken Crook to Guatemala. Another gang leader who spoke to El Faro confirmed that the Bukele government facilitated Canales Rivera’s escape. The release of Crook “was a transe (arrangement). Imagine how we did that: it was pure state power. Do you see the dirtiness of how they took him out with cars from the system?”
After fleeing El Salvador, with the help of Bukele and his associates, Crook settled for a time in southern Mexico and then in the capital, where for months he has been moving in the Santa Ursula sector, south of the city, according to a US federal agent who has been tracking Salvadoran criminals and the negotiations of the MS13 and Barrio 18 gangs with the government of Nayib Bukele since the president took office in 2019. Infobae confirmed the information with a US diplomatic official in Washington.
“On February 22, Vladimir Antonio Arevalo Chavez, alias Vampiro de Monserrat Criminales, Walter Yovani Hernandez Rivera, alias Baxter de Park View, and Marlon Antonio Menjivar Portillo, alias Rojo de Park View, were located by Mexican authorities and expelled to the United States,” said a Justice Department statement released two days before the mass transfer of inmates to Bukele’s mega-custody in El Salvador.
In sending them to the United States, Mexico did what Rodolfo Delgado, El Salvador’s attorney general and one of the standard-bearers of the Salvadoran government’s supposed war on gangs, had refused to do: send the MS13 leaders to a court where they could testify about the pact with the Salvadoran government.
Neither Blue nor Crook, whom the Bukele government helped escape to Mexico, are in the maximum-security mega-prison that makes the rounds of television stations worldwide and populates the social networks of the Salvadoran president and his acolytes. Nor were the other three leaders that Mexico has just extradited to the United States, or five other fugitives, in that prison.
Among all of them, Crook is one of the most important. He is a member of the ranfla nacional histórica (national gang leadership), as the group that has led the MS13 for decades is called in gang jargon. Crook is one of the leaders who has negotiated truces and pacts with Salvadoran governments that preceded Bukele’s and, judging by the evidence collected by US agents and prosecutors, he was essential in the negotiation with the current Salvadoran government, so much so that one of the officials closest to the president went personally and in official cars to pick him up and bring him to Mexico.
One of the U.S. agents consulted by Infobae, who confirmed that Crook had been located in Colonia Santa Ursula in Mexico City, said that his capture and extradition to the United States is a matter of days if the State Department in Washington takes the political decision to proceed. This agent did not rule out that the United States will ask the arrested and extradited gang members for more information about the Bukele government’s involvement in the pact with the MS13 and Barrio 18.
Mientras se inaugura la megacárcel, detectaron a un líder pandillero que el gobierno de Nayib Bukele ayudó a escapar a México
Autoridades estadounidenses que le siguen la pista desde hace meses tienen certeza de que el pandillero salvadoreño Élmer Canales Rivera, alias Crook y uno de los jefes más importantes de la MS13, se esconde en la Colonia Santa Úrsula en la Ciudad de México, cerca del mítico Estadio Azteca. Así lo han confirmado a Infobae un miembro de una agencia policial federal en Estados Unidos y una fuente diplomática de ese país.
Crook huyó a México luego de que el gobierno del presidente Nayib Bukele de El Salvador lo liberó a pesar de que aún cumplía una condena por homicidio y de que tenía pendientes procesos por extorsión agravada y asociaciones ilícitas. Además, cuando Bukele liberó al jefe pandillero, el 3 de junio de 2021, Estados Unidos ya había solicitado su extradición para juzgarlo en una corte de Nueva York por delitos de homicidio, narcotráfico y tráfico de armas.
Fue, de hecho, la embajada de Estados Unidos en San Salvador la primera que advirtió que Crook había sido liberado en circunstancias poco claras y pidió explicaciones al gobierno salvadoreño, las cuales los funcionarios de Bukele nunca dieron.
En mayo de 2022, el periódico El Faro publicó audios en los que se escucha a Carlos Marroquín, secretario de Reconstrucción del Tejido Social en la casa presidencial de Bukele, confesar que él había llevado a Crook hasta Guatemala. Otro líder pandillero que habló con El Faro confirmó que el gobierno de Bukele facilitó la huida de Canales Rivera. La liberación del Crook “fue un transe (arreglo) que se hizo. Imagínese cómo hicimos eso: fue puro poder del Estado. ¿Ve la chuquedad (suciedad) de cómo lo sacaron con carros del sistema?”, dijo el pandillero a los periodistas.
Luego de huir de El Salvador, con ayuda de Bukele y los suyos, Crook se instaló un tiempo en el sur de México y luego en la capital, donde desde hace meses se mueve en el sector de Santa Úrsula, al sur de la ciudad, según confirmó un agente federal estadounidense que ha seguido la pista a los criminales salvadoreños y a las negociaciones de las pandillas MS13 y Barrio 18 con el gobierno de Nayib Bukele desde que el presidente asumió su cargo en 2019. Infobae confirmó la información con un funcionario diplomático estadounidense en Washington.
“El 22 de febrero, Vladimir Antonio Arévalo Chávez, alias Vampiro de Monserrat Criminales, Walter Yovani Hernández Rivera, alias Baxter de Park View, y Marlon Antonio Menjívar Portillo, alias Rojo de Park View, fueron localizados por autoridades mexicanas y expulsados hacia los Estados Unidos”, dice un comunicado del Departamento de Justicia publicado dos días antes del traslado masivo de reos al megapenal de Bukele en El Salvador.
Al enviarlos a Estados Unidos, México hizo lo que Rodolfo Delgado, el fiscal general de El Salvador y uno de los abanderados de la supuesta guerra del gobierno salvadoreño contra las pandillas, se había negado a hacer: mandar a los lideres de la MS13 a una corte en la que pueden rendir testimonio sobre el pacto con el gobierno salvadoreño.
Ni Blue ni Crook, al que el gobierno de Bukele ayudó a escapar a México, están en el megapenal de máxima seguridad que hace las rondas por las televisoras de todo el mundo y puebla las redes sociales del presidente salvadoreño y sus acólitos. Tampoco estaban en esa cárcel los otros tres líderes a los que México acaba de extraditar a Estados Unidos, ni otros cinco prófugos.
Entre todos ellos, el Crook es uno de los más importantes. Él es miembro de la ranfla nacional histórica, como se llama en jerga pandilleril al grupo que ha dirigido a la MS13 durante décadas. Crook es uno de los líderes que ha negociado treguas y pactos con gobiernos salvadoreños que antecedieron al de Bukele y, a juzgar por las pruebas recabadas por agentes y fiscales estadounidenses, fue esencial en la negociación con el gobierno salvadoreño actual, tanto que uno de los funcionarios más cercanos al presidente fue, personalmente y en carros oficiales, a traerlo para llevarlo a México.
Uno de los agentes estadounidenses consultados por Infobae, que confirmó que Crook ha sido ubicado en la Colonia Santa Úrsula de Ciudad de México, dijo que su captura y extradición a Estados Unidos es una cuestión de días si el Departamento de Estado en Washington toma la decisión política de proceder. Este agente no descartó que Estados Unidos pida a los pandilleros arrestados y extraditados más información sobre la participación del gobierno Bukele en el pacto con la MS13 y el Barrio 18.