On Thursday, the US Department of Justice unveiled an indictment against 13 MS-13 leaders accused of drug trafficking and organized crime, who are also charged with negotiating with the government of El Salvador.
The indictment, filed in the Eastern District of New York, alleges that Nayib Bukele’s government officials were involved in negotiations with the gang in 2019.
The document notes that after the presidential elections in which Bukele came to power, MS-13 gang leaders, including Borromeo Enrique Henríquez, alias “Diablito de Hollywood,” Elmer Canales Rivera, alias “Ladrón de Hollywood,” and Carlos Tiberino Ramírez Valladares, nicknamed “Snyder de Pasadena,” met secretly with government officials.
They met for a long time in the Zacatecoluca and Izalco prisons and other places. Government officials participated in this one, among whom he mentions the Director of Penal Centers, Osiris Luna, and the director of Reconstruction of the Social Fabric, Carlos Marroquín.
“The Government of El Salvador organized these meetings and prison officials,” reads the document created by a New York jury.
Free gang members also attended the meetings. They entered the prisons with their faces and arms covered not to show their identity and tattoos. They had access to credentials that identified them as intelligence officers and were escorted by correctional officers.
According to the criminal indictment, the negotiations with the Salvadoran government allowed the gang “a high level of benefits.”
“As part of these secret negotiations, the Ranfla Nacional, the Ranfla en las Calles and the Ranfla en los Penales negotiated with high-level government officials for financial benefits, control of territories, and less restrictive prison conditions that would guarantee MS-13 leaders better communication,” the document reads.
“It will become increasingly difficult for Bukele to deny the pact with the gangs.”
For Eleonora Lopez, Cristosal’s representative, this accusation further confirms Bukele’s pact with the gangs.
“This has been known for years, and these people had already been included in the Global Magnitsky Act,where their participation in the negotiations with the gangs is described,” she said.
For the expert, “it is becoming increasingly clear why (the government) refuses to extradite” gang members wanted by the U.S. justice system.
Eduardo Escobar of Acción Ciudadana considers that “it will be increasingly difficult for the government to hide its links with the gangs and the negotiations that led it “to this whole scheme” to obtain electoral benefits and reduce violence.
He considers there are fewer possibilities for the government to refute this accusation made by a US court because it cannot argue that it opposes the government. “Here, what it leads to is that the government assumes its responsibility in the matter,” he adds.
Both experts consider it time for the Attorney General’s Office to investigate this case. They added that the officials involved in negotiations with gangs should have already been removed from their posts.
“If the Attorney General’s Office has not done so, it is because there is no independence of powers and because the Executive controls the system,” denounces López.
EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/pandillas-el-salvador-gobierno-/1042350/2023/
Acusación de fiscalía de NY contra pandilleros vincula a funcionarios a negociaciones con la MS-13
El Departamento de Justicia de EEUU dio a conocer el jueves una acusación en contra de 13 líderes de la MS-13 acusados por delitos de narcotráfico y crimen organizado, a quienes tambié se les señala de negociar con el gobierno de El Salvador.
La acusación presentada en el Distrito Este de Nueva York, señala la vinculación de funcionarios del gobierno de Nayib Bukele en negociaciones con la pandilla ocurridas en 2019.
El documento señala que después de las elecciones presidenciales en las que Bukele llegó al poder, líderes de la pandilla MS-13, entre ellos Borromeo Enrique Henríquez, alias “diablito de Hollywood”, Elmer Canales Rivera, alias “ladrón de Hollywood” y Carlos Tiberino Ramírez Valladares, apodado “Snyder de Pasadena”, se reunieron en secreto con funcionarios de gobierno.
Resalta que se reunieron por largo tiempo en los penales de Zacatecoluca y en el penal de Izalco, así como en otros lugares. En esta participaron funcionarios de gobierno, entre los que menciona al Director de Centros Penales, Osiris Luna, y el director de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín.
“Estas reuniones fueron organizadas por el Gobierno de El Salvador y funcionarios penitenciarios”, se lee en el documento creado por un jurado de Nueva York.
En las reuniones también participaron pandilleros que estaban en libertad. Estos entraban a los penales con el rostro y brazos cubiertos para no mostrar su identidad y tatuajes. Tuvieron acceso a credenciales que los identificaba como oficiales de inteligencia y eran escoltados por custodios de la Dirección de Centros Penales.
De acuerdo a la acusación criminal las negociaciones con el gobierno de El Salvador permitieron a la pandilla “un alto nivel de beneficios”.
“Como parte de estas negociaciones secretas, la Ranfla Nacional, la Ranfla en las Calles y la Ranfla en los Penales negociaron con oficiales de gobierno de alto nivel para beneficios financieros, control de territorios y condiciones menos restrictivas en las prisiones que les garantizaran a los líderes de la MS-13 mejor comunicación”, se lee en el documento.
“Cada vez se le hará más difícil al Bukele negar el pacto con las pandillas”
Para Eleonora López, representante de Cristosal, esta acusación representa una confirmación más del pacto de Bukele con las pandillas.
“Esto ha sido conocido desde hace años, y estas personas ya habían sido incluidas en la Global Magnitsky donde se describe su participación en las negociaciones con las pandillas”, señala
Para la experta “cada vez queda más claro porque (el gobierno) se niegan a extraditar” a pandilleros requeridos por la justicia estadounidense..
Eduardo Escobar, de Acción Ciudadana considera que “cada vez se le hará más difícil al gobierno ocultar sus vínculos con las pandillas, y las negociaciones que lo llevaron “a toda esta trama” para obtener beneficios electorales y en la reducción de la violencia.
Considera que hay menos posibilidades de que el gobierno pueda refutar este señalamiento hecho por una corte de EEUU pues no puede argumentar que es oposición del gobierno. “Acá a lo que lleva es a que el gobierno asuma su responsabilidad en tema”, acota.
Ambos expertos consideran que ya es hora que la Fiscalía empiece a investigar este caso, agregan que los funcionarios señalados en negociaciones con pandillas ya tendría que haber sido separados de sus cargos.
“Si la Fiscalía no lo ha hecho es porque no hay una independencia de poderes y porque el sistema está completamente controlado por el Ejecutivo”, denuncia López.
EDH: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/pandillas-el-salvador-gobierno-/1042350/2023/