Is Nayib Bukele’s ‘Iron Fist’ in El Salvador Working? — ¿Es efectiva la mano dura de Bukele en El Salvador?

Feb 13, 2023

The gains under Bukele are laudable, but among other gang experts consulted by InSight Crime, there is a counter-consensus: They are impossible to sustain unless the underlying conditions that allow the gangs to emerge and flourish are addressed. What’s more, the experts said, the ultimate target may not be the gangs but democracy itself. — Los avances en el mandato de Bukele son loables, pero hay consenso de otros expertos sobre pandillas a quienes InSight Crime consultó: son imposibles de mantener a menos que se traten las condiciones que hacen posible el surgimiento y la proliferación de las pandillas. Más aún, señalaron, el objetivo último pueden no ser las pandillas, sino la democracia misma.

“If you really want to respond to gang violence, you need to look at the social dimension of the gangs,” said Sonja Wolf, a professor of political science at Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) in Mexico and the author of Mano Dura: The Politics of Gang Control in El Salvador, a book which explores earlier mano dura politics in El Salvador.

“And that means you can’t just arrest gang members, but you also need to ensure that the conditions in the communities that give rise to gangs are also being addressed,” she explained. “So even if you think you can arrest your way out of the current gang problem, if you don’t address those social conditions, it’s likely that there will be gang structures again in the future because those community conditions have not been addressed.”

José Miguel Cruz, a professor at Florida International University who has spent the last 20 years analyzing gangs in El Salvador (and other places), concurred.

“Gang identity in [El Salvador] is strong, and I don’t have evidence that the gangs have abandoned that identity,” Cruz wrote in an email. “There is no guarantee that, if there is a drastic change in conditions (political position, natural disaster, inability to manage the prisons, etc.), that the gang structures won’t reappear, especially if the conditions that give rise to them continue to be present.”

Cruz added that it was impossible to tell how wounded the gangs were, without getting into the prisons. It was there, of course, where the gangs regrouped during El Salvador’s first mano dura experiment in the mid-2000s, a period that saw a similarly striking uptick in incarcerations, government abuses, and popularity of the governing administration. However, what emerged from that round of mass incarceration was a more formidable, durable gang, one with more discipline, more reliable communications systems, more revenue, and more political savvy.

The full text is available in English…

Insight Crime: https://insightcrime.org/news/nayib-bukele-iron-fist-el-salvador-working/

¿Es efectiva la mano dura de Bukele en El Salvador?

“Si de verdad se quiere responder a la violencia de las pandillas, debe analizarse la dimensión social de estos grupos”, comentó Sonja Wolf, profesora de ciencias políticas en el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), de México, y autora de Mano dura, un libro que explora políticas anteriores de mano dura en El Salvador. “Y eso significa que no se puede simplemente encerrar a los pandilleros, sino que se debe garantizar que se esté dando respuesta a las condiciones en las comunidades que motivaron la aparición de las pandillas. Así que incluso si se piensa que se puede salir del problema de las actuales pandillas con arrestos, si no se tratan esas condiciones sociales, bueno, es muy probable que resurjan estructuras pandilleras en el futuro, pues no se dio respuesta a esas condiciones en las comunidades”.

Con ella concordó José Miguel Cruz, profesor de la Universidad Internacional de la Florida (FIU), quien ha pasado los últimos 20 años analizando las pandillas de El Salvador (y de otros lugares).

“Las identidades pandilleriles [en El Salvador] son muy fuertes y no tengo evidencia de que los pandilleros hayan abandonado esas identidades”, escribió Cruz por correo electrónico. “No hay ninguna garantía de que ante un cambio de inesperado de condiciones (decisión política, desastre natural, incapacidad de gestión dentro de las prisiones, etc.), las estructuras pandilleriles no reaparezcan, especialmente si las condiciones que dan origen a su existencia siguen presentes”.

Cruz añadió que era imposible afirmar qué tan afectadas estaban las pandillas sin entrar a las prisiones. Fue allí, por supuesto, donde se reagruparon las pandillas durante el primer experimento de mano dura en El Salvador a mediados de los 2000, un periodo en el que se presentó un alza igual de asombrosa en las encarcelaciones y los abusos del gobierno. Pero lo que surgió de esa ronda de encarcelaciones masivas fue una pandilla más formidable y duradera, con más disciplina, sistemas de comunicación más confiables, mayores ingresos y mayor habilidad política.

Insight Crime: https://es.insightcrime.org/noticias/exito-mano-dura-bukele-elsalvador/