President Nayib Bukele renewed last July a $390,000 contract for lobbyist Damian Merlo of Grupo Asesor de América Latina, LLC, whom he hired last January to “foster a solid dialogue” with the U.S. Government and the U.S. media.
According to a document filed with the U.S. Department of Justice dated June 3, 2022, the purpose of the rehire is to continue providing advice and support in public relations and communications to the client to improve bilateral ties with federal and congressional authorities.
The disbursement of the funds is made in six payments and would be effective until December of this year.
With the contracting of January 14, 2022, which contemplated payment of more than $30,000 for the same period, and the new contracting, the Presidency of El Salvador would have paid more than $70,000 coming from the State’s coffers to improve the image of the president before the North American country.
The document states that the Public Relations agency received the updated and signed contract from the Office of the President of El Salvador on September 29, 2022.
“The registrant (lobbyist) will continue to communicate with the American public, government officials, and the media about the importance of fostering a strong dialogue between the U.S. and El Salvador,” reads the document published on the website.
For political analyst and ex-diplomat Rubén Zamora, these hires only represent “people’s money that is being thrown away” since he assures that Bukele’s image is not improving.
Paying a lobbyist has not worked, he emphasizes. On the contrary, his opinion highlights the “exploitation of a North American company that has to earn its money.”
“We are facing a situation where the president (Bukele) has taken the public treasury with these expenses and the loans that have already been maxed out; I consider it inconceivable.”
Zamora considers that with Bukele’s lousy image before the international community, it is “a waste that he is spending thousands of dollars” since this is not how diplomatic relations will improve.
In 2021 alone, after congressmen called on Bukele to respect the democratic state, freedom of the press, and human rights, the Salvadoran president hired three companies to lobby and try to clean up his image before U.S. officials.
Two contracts were for six months and one for one year, with costs of $65,000 (two contracts) and $75,000 per month.
A Democratic legislative aide, who asked not to be identified, recently told El Diario de Hoy that “Bukele can spend all he wants, but it won’t change the fact that making friends in Washington is achieved by respecting the law.”
He further stated that many presidents believe hiring experienced lobbyists or relationship firms outweighs respect for the law, something he dismissed.
Rubén Zamora sobre lobista en EE.UU: Bukele está usando fondos públicos para su propia imagen
El presidente Nayib Bukele renovó en julio pasado un contrato por $390,000 para el lobista Damian Merlo, del Grupo Asesor de América Latina, LLC, a quien en enero pasado contrató para “fomentar un dialogo sólido” con el Gobierno de Estados Unidos y medios de comunicación de ese país.
Según documento inscrito en el Departamento de Justicia de Estados Unidos con fecha 3 de junio de 2022, la recontratación tiene como finalidad continuar brindando asesoría y apoyo en relaciones públicas y comunicaciones a su representado a fin de mejorar las relaciones bilaterales antes las autoridades federales y del Congreso.
La erogación de los fondos se efectúa en seis pagos y tendría vigencia hasta diciembre de este año.
Con la contratación del 14 de enero de 2022, la cual contemplaba un pago de más de $30,000 por un periodo igual, y la nueva contratación, la Presidencia de El Salvador habría pagado arriba de $70,000 provenientes de las arcas del Estado para mejorar la imagen del presidente ante el país norteamericano.
En el documento se señala que la agencia de Relaciones Públicas recibió el contrato actualizado y firmado de la Oficina del Presidente de El Salvador el 29 de septiembre de 2022.
“El registrante (lobista) continuará comunicándose con el público estadounidense, los funcionarios del gobierno y los medios de comunicación sobre la importancia de fomentar un diálogo sólido entre los EE. UU. y El Salvador”, reza el documento publicado en el sitio web.
Para el analista político y exdiplomático, Rubén Zamora, estas contrataciones solo representan “dinero del pueblo que se está botando”, pues, asegura que la imagen de Bukele no está mejorando.
Pagar un lobista no ha dado resultado, resalta. Por el contrario, en su opinión resalta más el “aprovechamiento de una empresa norteamericana que tiene que ganar su dinero”.
“Estamos frente a una situación a la que ha llevado el presidente (Bukele) al erario público con estos gastos y los prestamos que ya toparon, considero que es una cosa inconcebible”.
Zamora considera que con la mala imagen de Bukele ante la comunidad internacional es “por gusto que se esté gastando miles de dólares”, ya que no es de esta forma que las relaciones diplomáticas van a mejorar.
Solo en 2021, después de que congresistas llamaron a Bukele a respetar el estado democrático, la libertad de prensa y los derechos humanos en el país, el mandatario salvadoreño contrató tres empresas para que hicieran lobby e intentaran limpiar su imagen ante los funcionarios norteamericanos.
Dos de los contratos iban por períodos de seis mes y uno por un año con costos de $65,000 (dos contratos) y $75,000 mensuales.
Un asesor legislativo demócrata, que pidió no ser identificado, dijo recientemente a El Diario de Hoy que “Bukele puede gastar todo lo que quiera, pero no cambiará el hecho de que hacer amigos en Washington se logra respetando la ley”.
Además, afirmó que muchos presidentes creen que contratar firmas de lobistas o relacionistas experimentados pesa más que el respeto a las leyes, algo que descartó.