“We can no longer call it a regime of exception to a policy that has been established through the control of State institutions, the coaptation of independent powers, and the dismantling of the rule of law.” This is how the director of Amnesty International, Erika Guevara Rosas, described the security policy implemented by the Salvadoran government since March 2022.
Guevara spoke with LA PRENSA GRÁFICA and analyzed the almost eight months of the emergency regime. She considers this measure “an excuse for President Bukele to violate rights and to have greater political control.”
She maintains that during the last months, there has been a situation of opacity in the information on the whereabouts, status, and conditions of the more than 56,000 people detained.
“There are more than 70 people who have lost their lives in penitentiary centers, which have already been questioned due to overcrowding. One cannot imagine the conditions in which the detainees are held, where the basic rules of due process and a fair trial have been violated under the justification that they are trying to combat gang violence,” said Guevara.
He also lamented the international community’s silence regarding the situation in El Salvador.
He assures that what is happening in the country is a recipe implemented in other Central American countries. “There is a clear alarm of actions being taken by the government of Nayib Bukele that lead us to reflect how there is a deterioration and dismantling of the democratic space to take control of political power, and the international community well knows this,” said the defender.
“El régimen de excepción ha sido una excusa del GOES para violar derechos”: Amnistía Internacional
“Ya no le podemos llamar régimen de excepción a una política que se ha instaurado a través del control de las instituciones del Estado, la coaptación de los poderes independientes y el desmantelamiento del Estado de Derecho”. De esa forma describió la directora de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas, la política de seguridad instaturada por el gobierno salvadoreño desde marzo de 2022.
Guevara habló con LA PRENSA GRÁFICA y analizó los casi ocho meses del régimen de excepción. Ella considera que esta medida ha sido “una excusa para violentar los derechos por parte del presidente Bukele y tener mayor control político”.
Sostiene que durante los últimos meses ha existido una situación de opacidad en la información sobre el paradero, situación y condiciones en las que se encuentran las más de 56,000personas detenidas.
“Son más de 70 personas que por lo menos se tiene un registro que han perdido la vida en centros penitenciarios, que ya de por sí habían sido cuestionados por la situación de hacinamiento. No se puede imaginar las condiciones en las que se encuentran las personas detenidas, en donde se han violentado las normas básicas del debido proceso y de un juicio justo bajo la justificación de que se intenta combatir la violencia de las pandillas”, mencionó Guevara.
Además, lamentó el silencio que ha tenido la comunidad internacional con respecto a la situación de El Salvador.
Asegura que lo que ocurre en el país es una receta implantada en otros países centroamericanos. “Hay una alarma clara de acciones que está tomando el gobierno de Nayib Bukele que nos llevan a reflejar cómo hay un deterioro y desmantelamiento del espacio democrático con la finalidad de hacerse del control del poder político y eso lo conoce muy bien la comunidad internacional”, apuntó la defensora.